Tostón publicitario de Adviento 2020 (IV)

 

Y el Señor, en este tiempo, que te ha formado, te ha dado un tiempo largo de camino -aquí el que tenga menos, tendrá 20 años de camino, por lo menos-. Una historia de salvación ha hecho contigo, una misión de evangelizar.

Evangelizar significa primero tu vida, que la persona vea en ti a Cristo y Cristo resucitado, pero, decía, el problema es que nosotros juzgamos, contristamos al Espíritu Santo.

Que nadie se deje confundir. ¿Contristó Jesús al Espíritu Santo cuando llamó zorro a Herodes? El problema no es denunciar la maldad. El problema es la maldad. Ningún malvado puede evangelizar.

Por eso, esta noche, yo quiero darte una palabra sobre esto, porque, mira, todo lo que tú haces, todos los hechos de tu vida, están escritos en el cielo, todo el sufrimiento que tienes con este hijo, en el trabajo, cuando te persiguen cuando te insultan, todo está escrito en el cielo y cuando vayas al cielo… Esperemos ir pronto al cielo, porque san Pablo dice que morir es con mucho lo mejor. Ir con Cristo para siempre, estar con este amor, este amor que has experimentado aquí, quien lo tiene adentro lo podrá vivir para siempre.

Una vez más, engañado o a sabiendas, se presenta como cita bíblica algo que solo está en un kikirikanto. Lo que pusa san Pablo en la carta a los de Filipos ni es lo que dice el kikirikanto ni aplica a otro que no sea el propio Pablo: «Por un lado, quisiera morir para ir a estar con Cristo, pues eso sería mucho mejor para mí» (Fil 1,23).

Decía que está escrito allá en el cielo, se abrirá un libro y ahí se dirá: mira, ahí vas a descubrir todo lo que el Señor ha hecho, cómo te ha amado aquí. A mí me dirá que estaba tan necio que no quería ni entrar a escuchar. Y yo, a través de tu enamorada, te hice entrar y ahí te abrí el oído para escuchar. Te di una comunidad. En mi comunidad había un fascista, y yo era comunista, ¿entiendes? Tú Imagínate qué fantasía, y chocábamos siempre, siempre nos peleábamos. Muy bien, para que descubriera lo que había en mi corazón. Me interesaba más una ideología que el hermano, ¿entiendes? 

Y a ti también. Ha hecho una historia contigo y te ha dado una esposa, hijos, no sé qué historia estupenda y estará escrito todo en este libro. Ahí podrás descubrir el amor que Dios te ha tenido, el amor, si no lo ves ahora es malo y espero que lo veas, ahora, el amor que Dios te tiene, qué te hace estar agradecido, contento, alegre. Dios te ha amado, te ama, Dios te quiere. Este Cristo dentro de ti te dice todos los días: “Te quiero, te amo”. “Pero mira como estoy”. Te dice: “Yo ya te conozco hace rato y siempre te amo, siempre te he amado y te he amado así como eres, para mí está estupendo”. No te dice: “Vas mal”. No te dice esto. Dios dice: “Estupendo, a mis ojos eres precioso, eres magnífico”.

Y de repente, se sacan de la manga al diosito de blandiblup. Cuando Jesús está con la cananea, no le dice “estupendo, magnífico, que bien que hayas estado con muchos tipos”. Lo que le dice es «cinco maridos has tenido, y el que ahora tienes no es tu marido». Lo primero no le hubiese servido de nada a la cananea; lo segundo, sí. Pero los kikotistas son tan ignorantes que confunden no juzgar con no corregir.

Y quería decir otra cosa como para terminar esta primera parte de anuncios. El problema más grave que tenemos todos… Por eso espero que el Señor os regalé una sabiduría grande. El camino está hecho… Es un camino donde se bajan siete escalones para que tú descubras que no eres mejor que nadie o, como decían los padres del desierto, que tú eres el último y el peor de todos. Esto es una iluminación profundísima: que tú eres el último y el peor de todos. Si el Espíritu Santo te ilumina, como un foco que te ilumina dentro, y te hace ver esto: el último y el peor de todos, que tú no te mereces estar aquí, que no tendrías que estar en la comunidad, no te mereces que los demás… “Mira, mira este hermano, mucho mejor que yo; el otro, mucho mejor que yo; el otro, muchísimo”. El otro es Cristo, el otro es Cristo. Es más bueno que tú, más santo que tú. Tú eres el último y el peor de todos. El Espíritu Santo te hace ver esto.

San Felipe Neri se levantaba por la mañana y decía “Señor tenme dos manos encima de la cabeza, si no hoy te la juego”.

Deberían informarse mejor sobre las pretendidas citas. Lo que le gustaba rezar a san Felipe Neri es: «Señor, no te fíes de mí. Señor, ten de tu mano a Felipe, que, si no, un día, como Judas, te traicionará».

Se conocía perfectamente. Se conocía que era un traidor en potencia, un asesino, un adúltero, un desgraciado, lo sabía muy bien.

No. No lo era y no quería serlo. Por eso pedía ayuda a quien podía dársela. Pero a los kikos les gusta pensar que todos son tan “pedores” como ellos. Solo que ellos lo son realmente.

Y espero que te haga el Señor este regalo, que después de tantos años de camino no te conoces. San Pedro no se conocía: “Yo daré mi vida por ti”. Y ha tenido que ver que no, que no, que era un traidor. Un traidor como tú y como yo, el último y el peor de todos, dicen los padres del desierto.

Con la salvedad de que san Pedro sí dio la vida por Él. No como otros…

Esto es el cristiano que se mira y se ve como el último el peor de todos. Es una iluminación grandísima y si tú te lo creyeras, si tú te lo crees, porque esto es ser cristiano, hermano, ser el último, considerarse el último y el peor de todos, si tú te lo creyeras, tú imagínate cómo es la relación con los demás, con tus hermanos de comunidad. Tú eres el último, el peor de todos…

Hoy estaba en la cama y tenía un vaso de… de horchata, y desde la cama tumbado así veía este vaso que estaba casi lleno; cuando me levanté y lo miré, lo vi casi vacío. El vaso no había cambiado, era yo en mi posición. Yo estaba tumbado…

Si tienes dentro esta humildad, el último y el peor de todos, vas a la comunidad y ves a los hermanos todos estupendos, todo magnífico. Lo ves… “Este es más santo, el otro más santo, el otro es más bueno”.

No puedo con los discursitos almibarados cargados de tonterías. El humilde no es el que tiene alucinaciones y ve santos en quienes no lo son, lo que caracteriza al humilde es que no juzga. No es que sea un bobalicón para pensar que el malvado es buenísimo, es que no juzga al malvado, lo disculpa, piensa que ha sido engañado, que es una víctima del mal y se compadece de él. Pero no ve santos por las esquinas.

Y ve que todo, las relaciones suyas con los demás es distinta. En relaciones de este lo bajo, el otro es más… El vaso lo ves lleno. Si te pones arriba, si te pones así con tu soberbia del vaso medio vacío, esta comunidad da pena.

Pero si vas como el último y el peor de todos empiezas a ver que los hermanos… Cuántos años te están soportando los hermanos, cuántos años te están llamando los hermanos, y te conocen. ¿Tú piensas que los hermanos después de 20 años no te conocen? ¿No te conocen? Sí que te conocen y te aman y te quieren. El último y el peor de todos. ¡Qué regalo! Todos los santos tenían este regalo profundísimo. Se conocían bien, sabían quién eran, que eran capaces de matar, de destruir, de hacer la más grande porquería o grandes pecados si Dios no tenía la mano.

Y aquí también, ojo. “No, yo no he adulterado, no he matado”. Ojo. Cuidado, cuidado. La soberbia: yo, yo, yo. ¿Qué es esto de ser último y el peor de todos? ¿qué es esto? ¿qué es? Yo no soy el último, yo no soy el peor que todos yo soy buena gente, yo… Cuidado, porque Dios te da que ayudarte. Dios que te ama, te ayudará, porque el cristiano es uno que se considera el último y el peor de todos, o como dice san Pablo: “considerando a los demás superiores a ti”, que es lo mismo. Viendo que el otro es superior a ti, entras en comunidad. “Ese es superior a mí, ese es superior a mí, ese es superior a mí”. Se terminaron las divisiones, las peleas, las murmuraciones y los juicios, ¿verdad? 

Hay que decirles que se apliquen la receta y se enteren de que los que participan en el blog, son superiores a ellos, los muy kikos.

Se termina todo, porque tú ves que es por gracia de Dios que estás ahí, y cuando estás en esta actitud, empiezas a ver cómo ha sido Dios, qué bueno, tiene un discernimiento fantástico.

Es tan bueno y tan fantástico que hace posibles sitios como este blog, para desintoxicación y desprogramación de kikos.