sábado, 31 de marzo de 2018

Kikomitin. Pascua 2018 (VIII)



Cuatro gatos, algunos con túnica, en valencia
«Y os hablo un poco del Triduo pascual, sobre todo para las comunidades más jóvenes. El Camino os ha enseñado que el Jueves Santo, normalmente, no vamos a la Misa In Coena Domini a las comunidades más jóvenes porque no queremos que se confunda con la Vigilia pascual, ya que hemos oído a S. Atanasio que dice que esta noche brilla ––esa liturgia–– por encima de todas. Pues en España la Vigilia pascual no brillaba nada porque las iglesias, el Jueves Santo, estaban llenas; también el Viernes Santo, pero el Sábado Santo había cuatro gatos. ¿Verdad?»
Falso. Desde que acabé el Camino, cada año me paseo por una parroquia en busca de los cuatro gatos. Da igual donde vaya. En la vigilia pascual el templo se llena.
«Teníamos nosotros que enseñar, catequéticamente, a nuestros paganos que venían a las catequesis qué es esta Noche Santa.»
¡Nos ha fastidiado mayo con tanta flor! Sí, a los paganos hay que explicarles qué es la Pascua; pero a los religiosos de misa de 12, esos a los que desprecia y llama cuatro gatos, no. Y eso de que para que la vigilia parezca más hay que impedir que se participe en los oficios de jueves y viernes santo, corrigiendo a la Santa Madre Iglesia, que es quien los ha dispuesto, no es sólo que sea estúpido, es que además es de un engreimiento, de un creerse más listo que los padres de la Iglesia, que lo flipo.
 
Cuatro gatos en Valparaíso (Chile)
«Y entonces os hemos dicho que existe esta tradición de que el Jueves Santo es la conmemoración de la Santa Misa, la institución de la Eucaristía que hace Jesucristo y los apóstoles, y en la que hacen en la parroquia una fiesta enorme, pues es como si fuera un doblaje de la Vigilia pascual [Falso. Y por más que lo repita, sigue siendo MENTIRA]. Y en muchas parroquias es más importante el Jueves Santo que la Vigilia pascual [MIENTE]. Gracias a Dios esto ha mejorado, pero hace cuarenta años era así, que no se podía comparar la Misa In Coena Domini ––esa Misa de Jueves Santo–– con la Misa que se hacía en la vigilia a la que, además, no veía (sic) nadie [Más MENTIRAS], porque en España es primavera y casi todo el mundo se va de vacaciones y las iglesias estaban vacías; sin embargo el Viernes Santo sí estaban llenas de gente. Pero el Sábado Santo, en general, partían todos de vacaciones y asisten a la Misa de Resurrección en el pueblo de Málaga donde están de vacaciones; esto es lo que sucede tradicionalmente en España, de forma que la Vigilia pascual hay cuatro gatos.»
MENTIRA. Quien se quiere ir de vacaciones, no se espera al sábado, se va desde el miércoles, así que en general tan llenas están las Iglesias el jueves, como el viernes como el sábado. Y el que se va a su tierra, a Málaga o a donde sea, se mete bajo un capirote y participa en las procesiones, no se va a playa.
Cuatro gatos en Managua
«Nosotros os hemos enseñado que para prepararnos a la Vigilia pascual, es muy importante que la comunidad se reúna durante el Triduo Santo, y el Jueves Santo proclamen el evangelio de S. Juan los capítulos en los que Cristo está lavando los pies de los discípulos en la última cena. Y os hemos enseñado que durante esta celebración el cura ––si hay cura, claro, porque a lo mejor no tenéis un cura para todas las comunidades–– o el responsable lave los pies a los hermanos, y os decimos que veáis en ese gesto no al responsable, sino al mismo Jesucristo que os lava los pies [es un laico. No representa a Jesucristo. No tiene ese carisma ni lo puede tener]; esto es el Jueves Santo. Tenemos un momento de oración, una liturgia de la Palabra, donde subrayábamos (lo hacemos desde cincuenta años) este signo.»
50 años de empecinamiento en el error. De inventarse un folclore tonto en lugar de participar en los oficios de toda la Iglesia.
Cuatro gatos en París
«Después, el Viernes Santo, las comunidades tienen la Celebración de la Cruz, donde les decimos a los jóvenes que es muy importante esta celebración porque al final tendrán la adoración de la cruz donde se besa la cruz, un momento donde los hermanos deben pensar cuál es su cruz que están dispuestos a aceptar. Pero nosotros le hemos dicho a las comunidades que ya han terminado el Camino que, si quieren, el Viernes Santo pueden ir a la parroquia, que algunos curas protestan [¡Qué comprensivos son el divo y su legión y qué protestones los curas clericalistas!]. No importa, nosotros tenemos que ser fieles al Carisma que Dios nos ha dado, pero por amor al párroco lo hacemos, porque también en la parroquia se hace la Adoración a la Cruz y puedo ponerme en la cola y, cuando beso la Cruz, pues pensar cuál es mi cruz hablando con el mismo Jesucristo.»
Queda claro que lo opcional es sumarse a la liturgia de la Iglesia y lo obligatorio la farándula inventada por su humildad.
«Y el Sábado Santo, en la Vigilia pascual.
Cuatro gatos en Alcalá de Henares, que es zona deskikianizada
Pues este es el Triduo pascual: la Misa In Coena Domini, la cena del Señor, la institución de la Eucaristía con los apóstoles donde les lava los pies; el Viernes Santo, donde conmemoramos la Cruz de Cristo y se canta el Salmo 21, aunque en la Iglesia más antigua todo esto estaba resumido en la Vigilia pascual, porque no hace falta desdoblar el misterio porque la Eucaristía ya conmemora la Pasión, Muerte, Resurrección y Ascensión al cielo de nuestro Señor. Pero, de todas maneras, nosotros somos fieles y obedientes a la Iglesia. Y si dice la Iglesia que hay que celebrar el Triduo Santo, pues lo celebramos.»
MENTIRA. No lo hacen. Lo que hacen es inventarse una chapuza para mantenerse aparte, sin participar en el Triduo Santo de la Iglesia
«Pero hace falta entender que a nosotros el Señor nos ha dado un carisma que es llevar a la fe a los paganos, a los alejados de la Iglesia, algo que es prioritario y fundamental».
A las pruebas me remito para afirmar que, si tal es su carisma, son un fracaso: el mismo divo ha reconocido que 50 años después siguen sin ser cristianos. Pero además eso tan fundamental y prioritario nada tiene que ver con que no participen en el Triduo Santo, sino que monten un circo al margen.
Ni cuatro gatos en Roma
«Si hay algo de la liturgia que no entienden, nosotros tenemos que educarles verdaderamente. Por eso nosotros hemos hecho tantas cosas, educando a los paganos sobre la Santa Eucaristía. Y por eso celebrábamos la Misa sentados, donde pasa Jesucristo a servirnos tal y como dice el evangelio en el que afirma que pasará el Señor y los sentará a su mesa, y a aquellos siervos que vea obedeciendo lo que él les ha mandado, dice que los sentará a su mesa y él mismo pasará y les servirá (cf. Lc 12,37) [Aquellos siervos que obedezcan. Puesto que entre ellos no se ha producido el milagro de la conversión, no les aplica esa profecía. Y por tanto yerran al incumplir las órdenes recibidas al respecto]. Entonces, es catequético y muy formativo coger a un pagano que ha estado en la droga o que ha sido un ladrón o un proxeneta ––pues tenemos en las cárceles comunidades con gente de todo tipo, que ha robado, etc.–– y educarles en este sentido, porque vosotros, que sois los más antiguos, pues erais gente de Iglesia, pero ahora tenemos de todo, con gente de todo tipo. Entonces, a ese hermano que ha estado en el infierno y que ha sufrido mucho le enseñamos que Dios le sienta a su mesa y él mismo, en la persona del presbítero, pasa y le sirve. ¡No te puedes imaginar el escándalo! Muchos piensan que no tenemos reverencia a la Eucaristía porque recibíamos al Señor sentados; muchos clericales pensaban así que no entienden que evangelizar a los alejados de la Iglesia es una cosa totalmente prioritaria [sabiendo como son las comunidades de ahora, deduzco que los hijos del Camino son todos gente alejadísima de la Iglesia. Lo que tristemente es cierto]. Ahora, por amor a estos que piensan así, pues hemos hablado con el Papa y nos ha dicho que recibamos la comunión de pie y desde nuestro sitio [aunque lo cuente como si hubiera sido ayer, eso sucedió en tiempos de Juan Pablo II. Y NO fueron autorizados a comulgar sentados], porque estos clericales no quería que lo hiciéramos así, no, querían que hiciéramos una procesión como se hace en todas las iglesias. «Pero ¿quiénes sois vosotros? ¿Quiénes sois?». No sabéis lo que hemos pasado.»

viernes, 30 de marzo de 2018

Kikomitin. Pascua 2018 (VII)



«Aunque os hemos dicho que el catecumenado es una escalera para que, poco a poco, a través de la comunidad conozcáis vuestros pecados [y se los cuentes a todos] y nos despojemos del hombre viejo y lo sumerjamos en las aguas de nuestro bautismo, eso no se ha hecho. Reconozcámoslo. O se ha cumplido muy poquito.
Padre, se me ha escapado una verdad
Entonces, Dios ha entregado a su Hijo por ti para que tú ya no vivas tu vida, sino que Cristo viva en ti y tú ya no hagas tu voluntad absolutamente. Porque tu vivir es Cristo. Así de claro. ¿Mañana te dice Cristo que te levantes pronto y que vayas a Misa o que reces los Laudes o no sé qué cosa, o que tienes que ir a buscar a los pobres y darles limosna, o que tienes que pedir perdón a todos los que detestas? No sé, no sé, yo no sé cuál es la voluntad de Dios para ti
Por fin se le escapa una verdad. Tened siempre presente que Kiko no tiene ni idea de cual es la voluntad de Dios para ti. No lo olvides, porque a continuación va a empezar a disponer lo que quiere que hagas con tu vida, sin importarle desconocer si eso es lo que Dios quiere para ti.
«Por eso es interesante lo de la Gran Misión en las Plazas. Os he traído el panfleto que Dios nos inspiró de que teníais que salir durante el tiempo pascual. Son cinco encuentros, durante los domingos de Pascua ––está escrito aquí–– para ayudar a vuestra fe.»
Yo diría que es para satisfacer su ego y ya. El caso es que a continuación les suelta el rollazo de que tienen que ir todos, especialmente los jóvenes, a los que, si les diera por no querer, hay que obligarles a obedecer, por su bien, claro; y también les alecciona sobre como seleccionar a los que tendrán que hablar hechos concretos y sobre lo que tienen que decir, y durante cuanto tiempo y como tienen que montar la chuminada placera y a qué horas… Todo en su libertad, como se ve, porque no tiene ni idea de lo que quiere Dios para ninguno de ellos, pero sabe lo que quiere él de cada uno de ellos. Y le parece más interesante que hagan lo que quiere él a que busquen la voluntad de Dios. Normal, porque resulta que Kiko, por medio de sus vicarios, reparte y administra la salvación en lo que llama “el tercer encuentro”:
Multitud de público en la plaza
«Tercer encuentro: buscáis un hermano, un catequista, que tiene que anunciar el Kerigma.Y en ese encuentro dirá a los que escuchan: «Esta es la noticia de tu salvación: si la escuchas y la crees te salvarás». Es el tercer encuentro.»
Y en el quinto, se les intenta vender el CNC, que están muy necesitados de sangre fresca.
«Y después, si algunos hermanos dicen que sí, entonces hablamos con la parroquia cercana y les invitamos a unas catequesis, en una local. Muchas veces, en muchos sitios, viene gente pagana, que les resulta muy difícil ir a una parroquia porque no les gusta la estructura eclesial. Es como si a mí me interesa escuchar qué es el Islam y he conocido unos musulmanes muy majos que me han dicho: «¿Quieres que te expliquemos que es el Islam?». Y les digo: «Pues muy bien». Pero después me invitan a ir a la mezquita y les digo que no: «¡No, a la mezquita no voy!» [Es como si a mí me interesa el diseño industrial y en lugar de pedir plaza en dicha rama de Industriales me meto en bellas artes, no sea que si voy donde de verdad saben de lo que me interesa, aprenda]. Pues eso sucede con mucha gente que nos escuchan, pero no les invites a una estructura, tienen miedo que los captes y los metas en una cápsula porque toda su vida han pensado que la Iglesia es un horror, que tiene encasillada a la gente, que son unos moralistas. Son todos los prejuicios que el demonio ha alimentado fuera de la Iglesia y de los que hemos participado muchos cuando estabais en el mundo [será que como siguen con los mismos prejuicios, no quieren ir a la parroquia... ¿o será afición a la simulación y al engaño?]. Por eso hay que ver cómo ayudar a esos hermanos que desean continuar. ¿Cómo lo hacemos? Pues a lo mejor buscamos una familia y vienen tan contentos con una familia. «Oye ¿tienes tú un salón en el que quepan doce personas? Es que son doce los que han pedido ser ayudados». «¡Sí, hombre, venid a mi casa!». Y allí es estupendo, hay muchas familias están haciendo así las catequesis.»
Al que me confunda con un parroquiano, me lo como
No lo creo. Pero si hubiera sólo una familia haciendo tal cosa, están burlando la autoridad del obispo y el servicio a la parroquia que es, en el aprobadísimo estatuto, la razón de que exista en CNC.
«Yo os he dicho algunas pinceladas sobre lo que es el cristianismo y algunos habréis descubierto que si esto de lo que os he hablado es el cristianismo, no sois cristianos. Y, efectivamente, tienes razón
Bien está que el gran divo dé la razón a este blog, que tanto tiempo lleva diciéndolo.
Y a continuación toca el cuento de las cuatro noches, que me parece que ya se ha contado en este blog.
Como sabéis, el Poema de las Cuatro Noches, que es muy antiguo, dice que Dios ha establecido unos jalones en la historia que son las cuatro noches.
La primera noche es la noche en la que Dios hace la Creación. «¡Hágase la luz! Y la luz se hizo», que son las lecturas de la Vigilia pascual, en la que la primera lectura habla de la Creación, los seis días de la Creación que crea de la nada.
¡Siempre el mismo rollo!
La segunda noche es cuando aparece la fe sobre la tierra. ¿Segunda lectura de la Vigilia pascual? ¡Abraham que va a sacrificar a su hijo! La fe es el don más grande que hay en la tierra; la fe, que es una virtud sobrenatural que viene de Dios; la fe es un regalo que Dios ha hecho a los hombres. Es la noche en la que aparece la fe sobre la tierra, es cuando Dios le dice a Abraham: «¡Mira las estrellas del cielo! Así será tu descendencia». Y sostenido por la fe que Dios le da a nuestro padre Abraham, y Abraham, dice S. Pablo, no miró su propio cuerpo; era viejo y sin vigor; y la matriz de su mujer estaba muerte, era estéril, pues era ya vieja y ya no tenía la menstruación. Pues no, no miró ni a la matriz muerta de su mujer ni a su vejez, sino, como dice S. Pablo, mirando al que le hablaba creyó. Aparece la fe sobre la tierra, pues Abraham creyó que Dios era capaz de realizar lo que le prometía. Eso es grandísimo, pues no dudó de que Dios le iba a hacer padre de una multitud de pueblos tan grande como las estrellas del cielo y como la arena de la playa. Y así es, hoy Abraham es considerado padre de tres religiones: de la hebraica, de los musulmanes y de los católicos y cristianos; también los protestantes; millones y millones de hombres, se ha cumplido totalmente esa palabra. La segunda noche es cuando aparece la fe sobre la tierra.
La tercera noche es, como sabéis, cuando Dios abre el mar mostrando con ello que va a abrir la muerte, que va a abrir un camino a través de la muerte. Y el mar se abrió y su pueblo pasó; el mar que, como dos barreras a derecha e izquierda, le abrían paso.
Y esa tercera noche anuncia la cuarta noche en la que viene Cristo.»
Y aquí lo corto porque de nuevo se pone a desvariar sobre la pascua judía, que es muy inferior a la cristiana, pero es que algunos añoran las cebollas de Egipto. Sólo entresaco un chiste:
«Si os invitan a una celebración pascual hebrea, en la mesa habrá un sitio libre. Ese sitio es para Elías».
Digo que es un chiste porque para acudir a una celebración pascual hebrea (repito que es muy inferior a la cristiana, porque la suya no ve la resurrección), tendrían que saltarse la férrea ley kikiana que dice que excomulgado quede quien no esté en Pascua con su comunidad.

jueves, 29 de marzo de 2018

Kikomitin. Pascua 2018 (VI)



¿De qué substancia está hecha la bolsa?
…«Buenos, hermanos, esta noche tengo que daros una palabra [recuérdese que en el Camino todo es moralismo y todo se hace por puños, porque hay que hacerlo]: el kerigma. Y ¿qué es lo que dice el kerigma? Lo digo para que os vayáis contentos. Pues el kerigma dice una cosa sorprendente y es que nos hace mirar a Cristo crucificado. Y ¿por qué nos hace mirar a Cristo crucificado? Porque nos dice la Palabra de Dios que esto que veis (señala el crucifijo), en él está presente, está reflejada, la substancia divina. La substancia es una palabra filosófica. ¿Qué es la substancia? ¿De qué substancia está hecho esta funda de la Biblia? Pues decimos: «De plata». La substancia es la plata. Y esto de bronce. Y ¿cuál es la substancia de Dios? ¿De qué está hecho? ¿Cómo está hecho? Pues la Palabra nos lo dice. Bueno, lo que nos dice es que miremos a Jesucristo, que él es imagen de la substancia divina, de Dios. Y ¿qué es lo que vemos en esa imagen de un hombre crucificado?
Ya os he explicado muchas veces ––que no se habla bien en esta semana de Pasión–– lo que significaba la crucifixión, que dice el filósofo Cicerón que ni hubo ni habrá jamás un suplicio semejante. ¡Era un horror!»
Y como los cristianos no se recrean con espectáculos sangrientos, para no ser confundidos con tales pusilánimes, el tipo se recrea describiendo con lujo de detalles los sufrimientos corporales que padecía un crucificado y se deleita con los gritos que imagina debían dar los ajusticiados. Y sigue, y más, y dale… Y se frota las manos imaginando a María contemplando la escena.
El único ejemplar de la epístola de Pablo a los kikocenses
«Entonces, la Iglesia nos invita a mirar a Cristo crucificado. …Y ¿qué es lo que vemos? Pues que ese hombre que está sufriendo tanto está sufriendo por ti y está sufriendo por mí. Cristo se entregó por todos los hombres. Claro que la Sangre de Cristo, que era Sangre de Dios, tiene valor infinito. Cristo lo entregó por ti, ha muerto por ti. Por eso los cristianos primitivos tenían mucho cuidado de no volver a crucificar a Jesucristo con el pecado. Lo dice la epístola de S. Pablo: «¡Ay del que vuelva a crucificar a Jesucristo, porque no tendrá ya salvación!» [Se debe referir a la única epístola de Pablo a los kikocenses, que es falsa]. El que sabiendo lo que Cristo ha hecho por él, que con toda conciencia y habiendo sido bautizado y perdonado y metido en una comunidad, crucifica de nuevo a Jesucristo, pues que se prepare. Por eso tenemos que estar todos vigilantes, porque el demonio, a todos, y a los curas más, nos ronda buscando a quien devorar.
El Kerigma dice eso. ¿Qué dice? Que Cristo ha muerto por ti, sí, por tus pecados, y que Dios le resucitó para nuestra justificación. Porque si entregó su vida por ti y el Padre aceptó lo que se llama su oblación vicaria (vicario es uno que se entrega por otro) [Desnortado total. Vicario es quien sustituye a otro en sus funciones], si el Padre aceptó que él se entregase por ti, que muriera por ti, entonces, si Él ha muerto en tu lugar tú ya no mueres. Y como Dios aceptó la muerte de Cristo por tus pecados su resurrección muestra tu justificación; murió y fue resucitado para nuestra justificación. Demuestra que Dios aceptó su oblación y ya no tienes que morir, eres libre de la muerte. Y ¿qué dice el Kerigma? Que no solamente fue resucitado para nuestra justificación, sino que lo elevó por encima de todo poder, de toda virtud y de toda dominación y lo sentó a su derecha. Eso de sentarlo a su derecha significa que lo constituyó Kyrios, sacerdote eterno para siempre, sumo sacerdote para siempre, para que intercediera por nosotros. Entonces, ahora mismo, en el cielo, Jesucristo está intercediendo por cada uno de los que me estáis escuchando [que falta os hace. Y por todos los demás, sin el castigo de escuchar eso, también]. Y ¿por qué?
Como vuelvas a comerte mi postre, te vas a enterar de como te amo
Porque la substancia divina es amarte, amarte. Y ¿eso qué es? ¿Qué es el amor de Dios? No es un sentimiento como se siente por una chica o por un chico. ¿Qué es el amor de Dios? Pues Cristo mismo nos lo dice, lo hemos escuchado esta tarde en el evangelio: «Padre, yo en ellos y tú en mí para que sean perfectamente uno como tú Padre estás en mí yo estoy en ti, perfectamente uno». ¿Qué es esto de la unidad? ¿Uno? ¿Perfecta unidad? Dice Jesucristo que cuando nos eligió y nos dio una comunidad cristiana, nos dio esa comunidad con una sola condición [va a ser que ningún kiko del universo cumple la condición y por eso no se da en ellos ni el amor a enemigo ni la unidad]: para que viendo cómo nos amamos mostremos esta unidad porque tenemos vida eterna dentro en la dimensión del enemigo; el enemigo que es tu mujer, que es tu hija que se fue de casa, que es tu marido [no hay que perder ocasión cuando se trata de atacar a la familia], lo que sea, pues Dios te da la ocasión de amar a los demás, a tu prójimo, en una nueva dimensión: «Como yo os he amado». Cristo nos amó cuando éramos sus enemigos, no opuso resistencia a nuestras bofetadas ni a los salivazos ni a la tortura de la cruz. No, se ofreció como un manso cordero dándonos ejemplo de cómo tenemos que hacer nosotros. Tú, mujer, tienes que ser una corderita con tu marido; tienes que ser mansa, humilde, mansa con tu marido en casa; no puedes ser violenta, no puedes responder a la violencia con la violencia; no puedes [él si que puede ejercer la violencia, pero a ti no se te ocurra responder o te merecerás el feminicidio]. No, somos cristianos.
Pero no solamente es para que os améis como yo [está hablando de sí mismo, claro, porque cita no es] os he amado, sino que os he metido en una comunidad para que seáis perfectamente uno. Y si sois perfectamente uno el mundo creerá, se convertirán, porque todos están buscando el amor y la perfecta unidad, es algo que está sembrado en el corazón mismo, en el fondo de todo hombre. Solamente que están esperando que aparezca. Y no aparece por ninguna parte. Aparece la violencia, los espectáculos inmorales y violentos. ¿Dónde ven los hombres normales la perfecta unidad? ¿Dónde? ¿Dónde está eso?»
En Kikónides, no. Absolutamente, no. 50 años de fracaso lo confirman.
Oye, ¿apagaste la luz antes de salir?
«Dios ha suscitado el Camino Neocatecumenal. Claro, esa sería una pregunta muy importante para que os hagáis en la próxima convivencia: ¿Es que en nuestra comunidad somos uno?; primera pregunta. Y segunda: ¿Qué tenemos que hacer para ser perfectamente uno? Porque si no, mejor apaga y vámonos, porque solamente de esta forma, dice el Evangelio, cumpliremos nuestra misión.»
En efecto, sucederá que el último apagará y cerrará la puerta.
«¿Cómo se es perfectamente uno? A ver, no sé si alguno lo sabe. ¿Cómo es? ¿Tenemos que repartir el dinero? ¿Es eso? ¿Se refiere al dinero? ¿A qué se refiere ser «perfectamente uno»? Claro, si somos uno no podemos llamar por teléfono y criticar a un hermano, eso está prohibido [y tu libertad te la metes donde te quepa, que aquí todo es moralismo y órdenes y obediencia]: juzgar, criticar, hablar mal de nadie; por ejemplo. Que seamos perfectamente uno, uno.
La substancia divina ––y esto es lo más importante de lo que voy a decir esta noche–– es que si conociéramos el amor de Dios sabríais que Cristo está en estos momentos delante del Padre, pensadlo bien, está en el cielo, presentando sus llagas gloriosas solamente por una cosa: que Dios quisiera realizarse como Dios en ti. Fíjate lo que he dicho: Dios quiere realizar su ser Dios en ti. ¿Cómo? Siendo uno dentro de ti. Como el Padre es uno con el Hijo, así Dios quisiera ser en ti perfectamente uno. «¡Ay, qué bonito, Kiko! Y eso ¿cómo se hace? ¿Cómo se come eso? ¡A ver, dínoslo tú! ¿Cómo puede ser en mí el amor de Dios perfectamente uno en mí?» Pues es una buena pregunta [una pregunta que Kiko no ha sabido responder en 50 años, yo buscaría otro a quien preguntar]. Yo te respondería: «¡Con el Espíritu Santo!». Sin el Espíritu Santo tú no puedes ser uno ni con Cristo ni con su Padre. Dios te manda su Espíritu Santo. «Entonces, Kiko, según lo que tú no (sic) estás contando queda claro que yo no soy uno con el Padre ni con el Hijo, porque de alguna manera yo me resisto a la acción del Espíritu Santo. ¿Verdad? Porque es el Espíritu Santo el que logra que yo sea perfectamente uno con Cristo. Y ¿por qué me resisto al Espíritu Santo?». Piénsalo. Pues te respondería con el Evangelio: «el que no odia su vida la pierde». Más: «el que no odia su propia vida, no puede ser mi discípulo». Y aquí muchos no habéis perdido vuestra vida. Dirigís vuestra vida como os da la gana; vuestro matrimonio es como os da a vosotros la gana; vuestros hijos como quisieras que fueran. Todo así.»
¡Improcedente! ¡Vergonzoso! ¡Mira que todavía hacer uso de su libertad en lugar de someterse en todo a uno que no sabe de nada!