Esta
semana ha sido el funeral de una catecúmena tunicada. Era una viuda anciana y
sin hijos, es decir, sin parientes directos dentro del CNC, y su comunidad
pasaba de ella desde hacía años por causa de su edad, que la incapacitaba para
hacer el trípode como los demás.
Por ello
no me sorprendió que solo cinco neocatecumenales hiciesen acto de
presencia en el funeral. Ya se sabe que les cuesta mucho acudir a ceremonias de
religiosos de misa de 12. De hecho, en sus últimos años de vida, quienes
visitaron con asiduidad a esta anciana, sin fallar nunca, fue gente del Opus Dei.
Y sí, al funeral fue más gente del Opus que del CNC.
Son este
tipo de detalles los que muestran el entrañable amor que se tienen unos a otros
en las comunidades.
El caso
es que a la salida del funeral me fijé en el tablón de anuncios que hay en el
atrio de esta parroquia y me llamó la atención el siguiente aviso.
¡Rouco
Varela bendiciendo columbarios!
Espero
que la noticia llegue a su amigo Kiko, tan alérgico a los columbarios, tan
insensato que pretende saber más que la Iglesia, tan engreido que se cree con
capacidad para decretar lo que han de pensar, querer y hacer los demás y tan absurdo que quiere disponer quien va al infierno:
«Pues que estamos hasta el gorro de
la cremación, eso no es cristiano: jamás en la Iglesia se ha quemado nadie. Se quemaban los masones y los
budistas, jamás se quemó un cristiano; eso no estaba en la tradición de la
Iglesia. ¿Y cómo es posible que lo hayan permitido ahora? Pues por motivos de
salud, porque los terrenos cuestan mucho, porque no hay sitio ya… Vamos, eso
es una cosa horrible. Pues nosotros vamos a cambiar de dirección, vamos a decir
que en el Camino no estamos de acuerdo, los del Camino no nos quemamos. Y el que se quiera
quemar que se vaya al infierno a quemarse, a quemarse al infierno.» (Tostón de Pascua 2014)
A ver si el señor Rouco lo desasna un poco cuando se vuelvan a ver.
Cuando se trabaja con niños es muy eficaz contarles un cuento,
todos prestan atención. Con los neocatecúmenos pasa lo mismo, su nivel neuronal
es similar al de los niños, por eso cuando se trata de hacerles interiorizar como
fundamentales ciertas presuntas similitudes y tradiciones que nada tienen que
ver con el Cristianismo, les gusta recurrir a los cuentos.
Con el paso del tiempo están perdiendo el tino, pero antes,
cuando Carmen todavía conseguía hilar algunas frases, recurrían a lo que ella llamaba
tradición oral hebraica, en decir, a cuentos, para aleccionar a los
infantilizados neocatecúmenos, como en el siguiente vídeo del que he transcrito
la parte mollar del cuento.
K: Hay
otro midrash -porque es muy importarte conocer la tradición hebraica-, otro “misdrash”
que habla de la piedra, porque es muy importante... A mí me gustaría que lo
contara Carmen, me lo contó una vez… Carmen, di lo de la piedra. Ven aquí, ven
aquí. Ven aquí. Porque tiene relación con las bodas, los pozos, ¿no? A ver di
una palabra. Di una palabra, una palabra un momento de esto de la piedra. Dilo,
es de Jacob, ¿no?
C: El
problema… que de la crucifixión y la muerte hay muchos testigos; de la
resurrección es muy difícil tener pruebas “tanjantes” de la resurrección.
Entonces ¿cómo podían expresar los apóstoles este hecho? Y entonces es muy
interesante que son hebreos ellos y tienen un mundo hebreo detrás y ellos lo
expresan con palabras que ellos viven muy fuertemente. Y una palabra que todo
hebreo sabe muy bien es rodar la piedra.
K: Quitar
la piedra. Rodarla, hacerla rodar es quitar la piedra.
C: Si habéis
visto sepulcros de estos que tienen una piedra redonda, grande, enorme, que
tienen que rodar la piedra. Y en Israel es importante lo de rodar la piedra y
todo niño y todo el que está realmente catequizado en el mundo hebraico sabe
que es una palabra clave esta de rodar la piedra. Porque de ahí nace el pueblo
de Israel, las tribus.
A los hebreos el rollo de la piedra rodante les trae sin
cuidado, si fuese algo “que ellos viven muy fuertemente” y si ahí naciese “el
pueblo de Israel”, habría una enorme -como la piedra- fiesta judía para conmemorarlo.
Y es… Tiene
relación… solo una vez lo cuenta la escritura y es cuando Jacob, huyendo de su
hermano Esaú y por mandato de su madre, va a buscar a Raquel. Y siempre los
pozos es lugar de encuentro en la escritura de matrimonios.
Carmen patina. Jacob, que ha traicionado a su hermano, va en
busca de la protección de su tío. Y la excusa para que Isaac permita que su
hijo menor se vaya es la de que busque esposa entre los parientes de su madre,
no sea que se case con una cananea.
K: De bodas.
C: De bodas.
Entonces
el pozo, el pozo para la escritura siempre es fuente… encuentro de bodas.
También Rebeca con Isaac es en el pozo. Y allí llegó de repente el pobre Jacob
huyendo, huyendo y dice además el “misdrash” que huía y que iba feliz porque le
había dicho a su madre: Haré lo que tú me has dicho. Tiene muchísimas palabras que
se enlazan con el nuevo testamento muy bien.
Uso kiko de la ficción: buscar paralelos a los Evangalios con
los cuentos, a condición de que sean cuentos judíos.
Y dice que
llegó allí al pozo y estaba una piedra enorme, como dirán los evangelios “y era
la piedra muy grande”.
Es que con piedras pequeñitas no se tapa ni un pozo ni una
tumba. Esto es tan chusco como decir que hay un paralelo enorme -como la
piedra, de nuevo-, porque tanto en el midrash como en los Evangelios se calzan
con sandalias.
Tanto es
así que no la podían mover hasta que se reunían todos los pastores para abrevar
los ganados, porque era muy pesante y se necesitaban cuarenta hombres para mover
la piedra. Y esto en Israel, esto de mover la piedra tiene una fuerza muy
grande en su tradición, esta palabra.
La Biblia nada dice sobre esos cuarenta tipos tan necesarios y
me sorprendería mucho que fuese necesario que se reuniesen tantos pastores para
poder abrir el pozo.
Y dice
que Jacob llegó allí y preguntó por Raquel.
Falso. Preguntó por su tío (Génesis 29)
Y dice: Mira
es aquella pastorcita que está viniendo por allí con el ganado.
Y
entonces al llegar allí ella… Hizo que él solo movió la piedra del pozo como
quien saca un corcho de una botella. Lo cual todos los presentes se quedaron sorprendidos,
impresionados de que pudiera tener esa fuerza. Dicen de donde le vino a Jacob
esta fuerza para mover a piedra. Y dice hasta en el midrash mismo que un rocío
de resurrección bajó sobre él. Y le entregó a esta mujer no joyas ni camellos
ni nada sino su fuerza y su sensibilidad y la besó.
Y
entonces ¿qué hace esta Raquel?: Corriendo, corriendo fue a su casa a contarlo.
Todo lo anterior es puro cuento. La Biblia no registra
admiración ninguna por parte de los pastores ni regalos ni rocío.
Estas
cosas que saben los hebreos y los apóstoles estaban muy metidos en este mundo
hebraico, no saben expresar la grandeza de la resurrección del Señor más que
con el lenguaje de lo grande que tenían ellos. Para ellos esto de mover la
piedra… Por eso las mujeres iban pensando ¿quién nos moverá la piedra?
¡Faltaría más, por favor! ¡Cómo no va a ser más grande e
impresionante mover una piedra que la resurrección de un muerto!
A otras cuando
llegar allí dicen la piedra estaba movida y había allí dos hombres –no dice
ángeles, nosotros lo hemos hecho en seguida ángeles-. Dos hombres que le dicen:
Buscáis al que estaba muerto, está vivo.
También
hay que tener muy en cuenta la tradición oral de ellos.
Y a continuación, se embarca Carmen en otro cuento -tradición
oral, lo llama-en el que inventa paralelos inexistentes entre las aventuras de
Moisés y el Nuevo Testamento.
También
Moisés y Aaron van al faraón en un día de fiesta. Que iban todos los reyes de los
alrededores a coronarlo y a darle… había audiencia del faraón.
Y llegan
allí Moisés y Aaron y están en la puerta y dice que todos los reyes de Hedón (¿?)
venían y ponían coronas al faraón. Hay uno allí que dice: Hay ahí dos señores
abajo, pero que estaban resplandecientes. Hazlos pasar. Y ellos pasan ahí.
Y dice: ¿Vosotros
que queréis?
Y dice:
En nombre de Yahveh que dejes salir a nuestro pueblo.
Y dice: Ese
dios, ¿quién es ese dios? Ese dios no lo conozco yo, ¿dónde están las coronas
que me traéis, donde están los esos… vuestros tributos? ¿Qué tierra es esa de
donde venís? ¿qué dios tenéis vosotros? Y dice: Bueno, esperad.
Y se fue
a la biblioteca a buscar a este dios. Y entonces cuando sale, dice: Ese dios
aquí no se conoce. Está el dios de Hedón, está el dios de tal, de cual y cual… Ese
dios aquí no se conoce.
Y es
cuando ellos le contestaron, como hace Jesucristo con los de Emaús: Tardo y necio
de corazón, como buscas a un vivo entre los muertos. Nuestro dios es el viviente,
el señor de cielos y tierra que no está en la biblioteca de los vuestros. Todos
esos que tienes en la biblioteca son muertos y nuestro dios es el dios viviente.
Quiere decir
que en este ambiente hebraico que no solamente es la escritura sino la tradición
oral se entiende muy bien porque la intervención de las mujeres en todo el anuncio
de la resurrección y también el lenguaje que usan que para ellos es tan sagrado
y tan real y tan verdadero que se ve la potencia de Dios de este dios único que
hace… esto tiene mucho tomate para otra ocasión. Ya he dicho lo que quería
decir.
Dudo que a los judíos les haga ninguna gracia que venga una “gentil”
a decirles lo que tienen que considerar sagrado y verdadero. Pero la guida la
pone el Kiko.
La convivencia está por concluir. Tras la lectura del texto arcano
por parte de Ascen, celebran una ‘uka’ en la que lo más de lo más es lo que el
mamotreto llama monición de entrada. Lo transcribo tal cual para que toméis
buena nota.
Monición
ambiental:
KIKO:
Al final
de la Eucaristía pediremos carismas que ayuden a la evangelización:chicos, chicas, familias. Bien. ¿Estamos
todos preparados? ¿Está el P. Mario revestido? ¿Podemos comenzar? Pues, en pie.
Y eso es todo. Lo peor lo dejan para el final, porque tras la
oración conclusiva de la ‘uka’, DENTRO DE LA CELEBRACIÓN LITÚRGICA Y ANTES DE
LA DESPEDIDA resulta que Kiko se pone a pedir por la boquita.
KIKO:
Tenemos
que hacer la colecta y el calendario y si hay algún hermano que nos pueda
completar la Merkabá.
-
Presbíteros para la itinerancia
-
Seminaristas
- Chicos
para la itinerancia
- Chicas
y hermanas para la evangelización y los seminarios
-
Familias para la misión
-
Restauradores para la obra artística de Kiko Argüello (ponerse en contacto
através de info@foacka.com)
-
Hermanas para el Taller Litúrgico fundado por Kiko de Madrid (ponerse en
contacto con Pepita y Ángel en los teléfonos +34 6.9 9.7 4.2 y +34 6.9 9.79.5)
Colectas
para la convivencia y para la evangelización
KIKO:
Estas colectas son para pagar la convivencia y ayudar a la Evangelización, a
los seminarios tienen ahora que pagar las matrículas; sed buenos y echadnos una
mano.
Comentario
de KIKO sobre la Scrutatio de los jóvenes, los domingos
KIKO:Es importante ayudar a los jóvenes a escrutar
los domingos la Escritura. Si van los catequistas, funciona. Se hace un domingo
al mes. En Madrid nos dicen que en la parroquia de La Paloma funciona muy bien;
los responsables de las vicarías poneos en contacto y organizadlo en una
parroquia de la zona. En Barcelona también nos dicen que está funcionando desde
hace ocho años. Hay que ayudar a los jóvenes. ¡Ánimo!
Entrega
del dibujo de S. Francisco Javier
KIKO: He
traído un regalo para vosotros. He hecho un dibujo de S. Francisco Javier,
patrón de las misiones, y he puesto aquí: ¡A ti Señor la gloria! Uno así de
grande para cada seminario. Y para vosotros uno pequeño para que lo tengáis en
el Salterio.
Luego dice que la colecta es “para la evangelización”, pero en
realidad va a pagar los caprichos y los “regalos” de alguno.
Comentario
de P. MARIO sobre la celebración de los 50 años de su presbiterado
P.
MARIO: Ante todo, agradezco mucho al Seminario de Madrid y al de Roma por la
ayuda que me habéis dado para ir a la casa de la Virgen en Éfeso, que ha sido
estupendo. Y había hecho un recordatorio de mis 50 años de presbítero y hubiera
querido darlo a las comunidades, pero no había suficientes. Han sobrado
algunos. Os lo regalo para que recéis por mí, por mi salud y por Kiko. Si
alguno quiere el recuerdo del P. Mario lo puede pedir a Pilar Pajes, secretaria
del Centro Neocatecumenal de Madrid.
Y solo después de todo este rollo, se procede a la Bendición
final con la que termina la ‘uka’.
Y como no va a ser que Mario tenga la última palabra, el
inefable todavía tiene algo que decir.
KIKO:
Muy bien, hermanos, ¿habéis estado contentos en esta convivencia? ¿Cuándo nos
volvemos a ver? En el anuncio de Adviento. ¡Que seáis buenos y que recéis por
nosotros! Os llevamos en el corazón.
¡Tanto rollo y tanta bolsa para acabar con un moralismo!