A continuación viene
el eskruticidio a un sacerdote que ya se publicó en el blog gracias a Alejada y
que puede leerse aquí. Y tras los ejemplos de
cómo entrometerse en el libre albedrío de los demás, hay otro anexo.
KIKOTESIS DE JACOB
«Estamos viviendo un momento de gracia del Señor. Un momento en que el
Señor está pasando y nos está liberando. La fe es un combate.
Hay, en la Escritura, un pasaje: La lucha de Jacob con Dios. Dice la
Escritura que Jacob está huyendo de su suegro Labán. Sabéis que Jacob tuvo que
servirle durante siete años. Cuando huye de Esaú, va a refugiarse en la casa de
Labán. Se enamora de Raquel y Labán le dice que si quiere a Raquel debe estar
siete años a su servicio como sirviente. Permanece siete años trabajando para
Labán y, cuando está a punto de casarse, Labán le dice que no le da a Raquel
sino a Lía; si quiere a Raquel, tiene que quedarse a trabajar para él otros
siete años. Jacob se casa con Lía y continúa trabajando para casarse con Raquel.
Pero Dios lo bendice y hace que sus rebaños se multipliquen. Llega un momento en
que Jacob huye de Labán con todos sus rebaños y Labán lo persigue. Dice que le ha
robado porque Jacob se llevó consigo lo que era suyo, ya que ha estado
trabajando durante 14 años. Lleva consigo a sus mujeres y once hijos. Cuando
está a punto de pasar el Yaboq, está a punto de entrar en el territorio de su
hermano Esaú, su hermano sabe que Jacob se acerca con sus rebaños y dice:
"Ahora sabrás quién soy yo. ¡Me robaste mi primogenitura!" Y se va para
matarlo.
Detrás de él tiene a Labán y delante está su enemigo. Esto
es muy importante porque en toda la Escritura la crisis se manifiesta como un
momento conflictivo del cual no hay salida: delante está la muerte y detrás también.
Cuando
ves el paso del Mar Rojo es lo mismo: delante el mar que cierra el paso y
detrás el enemigo. No
hay salida, quieres dispararte a ti mismo: no hay solución, no hay ninguna
solución. En
este momento, Jacob se niega a pasar el Yaboq porque tiene miedo de que Esaú lo mate. (El
Yaboq es un río). Entonces dice la Escritura que hace pasar el Yaboq a todos
sus rebaños, todos sus bienes, y luego hace pasar a las mujeres y sus hijos, y
se quedó solo de este lado. No
quería pasar, tenía miedo de pasar porque la muerte estaba al otro lado; tenía
miedo de ir a encontrarse con la muerte, ir al encuentro de un tiempo que no
podía manipular, un tiempo desconocido: el tiempo de Dios, entrar en un tiempo
que no le pertenece porque no puede dominar la muerte. Jacob permanece en este lado. Y,
en este momento, Jacob está solo, completamente solo, sin bienes, sin afectos,
mientras que al otro lado del río están sus esposas, sus hijos y todos sus
bienes. Está
aquí, solo, y con una angustia terrible: siente que lo matan, como si alguien
estuviera a punto de matarlo. Esta
angustia se hace visible en un hombre, hasta el punto que aparece un hombre, lo
agarra y quiere estrangularlo, quiere matarlo. Y como
tiene que defenderse, comienza a luchar.
Esta es una imagen, una Palabra de Dios que expresa lo que es la vida del
hombre. Te encuentras con acontecimientos que quieren matarte, que quieren
destruirte, que te amenazan. Los acontecimientos son hitos, acontecimientos que
amenazan tu integridad, tu persona, como si alguien quisiera matarte. Esto es
lo que significa esta lucha. Es como si Jacob sintiera que alguien quiere
matarlo, porque lo están persiguiendo constantemente, siempre lo están
engañando, hasta el colmo de que ahora lo están matando por delante y por
detrás; ahora, además de todo esto, aparece este hombre, este desconocido,
alguien que lucha con él. Pero Jacob resiste, va a su encuentro y comienza la
lucha. Quien lucha con
Jacob es Dios, en imagen: porque debe enseñarle a Jacob, debe prepararlo.»
El diosito del kikismo
no entiende el concepto de libre albedrío, por eso jamás duda en forzar la
voluntad de sus aceptos.
«Jacob es un elegido de Dios, y cada vez que Dios elige a alguien, opera en
él para prepararlo. En
esta lucha, en la que Jacob se resiste a Dios, antes del alba, este que lucha
con él, al ver que Jacob se resiste, decide acabar con él. Entonces
le golpea en la articulación de la cadera y le disloca la pierna. Jacob
queda impotente para pelear más, pero en ese momento, Jacob descubre que quien
está luchando con él es Dios. Al ver que es Dios quien está luchando con él, se
aferra con todas sus fuerzas al que está luchando con él, que le quiere matar,
y no lo suelta; se
aferra con todas sus fuerzas. Aquel
que pelea con él, que casi lo ha vencido, que prácticamente ya lo ha vencido,
no quiere matarlo, quiere irse, pero Jacob lo aferra y no lo suelta. Y Dios le
dice: "Déjame porque se acerca el alba". Y
Jacob le responde: "No te soltaré hasta que me bendigas". En la Escritura la
palabra es muy importante. No solo
en la Escritura, incluso entre los pueblos primitivos. En
muchos pueblos la palabra es muy importante, tiene gran fuerza. En
Camerún hay un pueblo para quien la palabra tiene tanta fuerza que si hablas,
creen todo lo que digas, porque el engaño y la mentira son como si no
existieran; hablan muy poco y
por eso la palabra es poderosa.»
Y en los bosques hay
hadas de colores y si se te cae un diente hay un ratoncito que te lo cambia por
una moneda. Es decir la naturaleza del ser humano es la misma en todos sitios,
incluso en Camerún.
«En la Escritura, la palabra siempre aparece con gran fuerza: tanto para
bendecir como para maldecir la Palabra siempre se realiza. Por
eso, si alguien te bendice, te dice que esto te suceda, lo que ha dicho te
sucederá. Y
si alguien pronuncia una maldición, que te suceda algo malo, lo que te ha dicho
tiene poder; bendición
y maldición son cosas muy serias.»
Toca sesión de superstición, porque ningún hombre
tiene poder para obligar a Dios a que cumpla, tanto si le da por bendecir como
por maldecir, pero mucho menos si le da por maldecir. La maldición no viene de
Dios.
«Por eso Jacob dice: "No te dejaré hasta que me bendigas". Y que Dios lo bendice. Quiere
decir: Hasta que tú no pronuncies sobre mí una palabra, buena, que se cumpla,
porque tu palabra es omnipotente, porque tú eres Dios". Entonces Dios le
dice: "¿Cómo te llamas?" Y él responde: "Jacob".
Dios le dice: "Ya no llamarás Jacob, te llamarás Israel. Israel,
que significa 'Fuerte con Dios', porque has conocido tu debilidad, ahora te
apoyarás en mí, porque sabes quién es el fuerte". Ahora
Jacob puede pasar el Yaboq, ya no le teme a la muerte, ya no se apoya en su
fuerza.
El problema del hombre es que se apoya en sí mismo, se apoya en su razón,
en su inteligencia, siempre se apoya en lo que cree que es la verdad; no se
apoya en el otro, no sabe cómo pasar al otro, no se apoya en dios (minúscula en
el original). La verdad es que el hombre se apoya únicamente en sí mismo y,
como él no ha vencido a la muerte, cuando se encuentra en medio de acontecimientos
que lo superan, le nace un hijo con síndrome down, su esposa no sé qué...
se siente destruido. Porque él quiere que la vida sea de otra manera, que no sea
así, se está desmoronando, tiene un problema de dinero, su marido se está
muriendo, su esposa... una serie de cosas terribles.»
Cosas terribles que les
pasan a todos… Recuérdese que antes ha dicho que esas cosas son la lucha de
Dios contigo porque tú has sido elegido… A ver si es que Dios los elige a
todos, todos y todos; o a ver si es que Dios no envía la muerte ni la
destrucción.
«El hombre, verdaderamente, no puede dominarse a sí mismo. El Señor nos
invita, invita a todos los hombres, a trascender nuestro yo y apoyarnos en Él,
porque Él puede, Él puede verdaderamente transformar nuestra existencia.
¿Por qué os digo esto sobre Jacob? ¿Este
hecho de que Dios le cambia su nombre como los primeros cristianos, en el
bautismo, cambiaban el nombre? Exactamente
porque el nombre significa una nueva realidad. ¿Por qué es una nueva realidad? Porque Jacob ahora ha
descubierto que Dios existe. Pero, ¿por qué ha descubierto
que Dios existe? Porque
Dios ha luchado con él. La fe, por
lo tanto, en Jacob, aparece como un combate. ¿Qué significa esta palabra? Significa
que tu vida, cada vida (la Palabra Jacob, esta Palabra que yo pronuncio ahora es una Palabra
revelada por Dios para toda la humanidad)…»
Los tinglaos “teolocos”
de su sensibilidad son la pera. La palabra de Dios siempre es para toda la humanidad, y nunca necesita que sea
pronunciada por su humildad para ser eficaz.
«…quiere decir que cada vida humana es un combate en el que Dios interviene
por medio de la cruz, a
través de los acontecimientos de muerte que se producen, que van contra la idea
que todo hombre tiene de sí mismo, y Dios interviene con acontecimientos para destruir este ídolo,
destruye a este dios que el hombre ha hecho de sí mismo.
¡Ah, el destructivo diosito del CNC,
siempre tan dispuesto a romperlo todo por las malas, con muertes y más muertes!
«¿Y por medio de qué interviene? A través de la muerte, en
definitiva: la cruz. ¿Qué
quiere Dios al enviar a la gente estos acontecimientos de muerte? Con
estos acontecimientos de muerte pretende, en definitiva, que el hombre descubra
que quien está luchando con él no es la adversidad, no es el demonio solamente. Es
Dios mismo quien lucha con él.»
En suma, que en el
kikismo diosito es asistente del “demoño”.
«Es Dios mismo quien quiere derrotarlo porque él, haciéndose dios de toda
realidad, se está condenando a sí mismo, se está matando. Y el único modo de salvar a este
hombre es derribarlo.»
Peor aún: en el
kikismo, la salvación no viene de Cristo y por eso diosito tiene que hacer la
puñeta para “salvar” a los tristes kikos.
«Entonces Dios baja al campo y se prepara para luchar contra ti. Tu
vida siempre ha sido un combate contra Dios. Si reflexionas sobre tu vida,
comienzas a entender muchas cosas; empiezas
a entender por qué te sucedió eso en esa ocasión, porque esto te sucedió a ti,
porque Dios está luchando contigo y quiere vencerte.»
"Jacob permanece en este lado. Y, en este momento, Jacob está solo, completamente solo, sin bienes, sin afectos, mientras que al otro lado del río están sus esposas, sus hijos y todos sus bienes. Está aquí, solo, y con una angustia terrible: siente que lo matan, como si alguien estuviera a punto de matarlo. Esta angustia se hace visible en un hombre, hasta el punto que aparece un hombre, lo agarra y quiere estrangularlo, quiere matarlo. Y como tiene que defenderse, comienza a luchar."
ResponderEliminar"Los acontecimientos son hitos, acontecimientos que amenazan tu integridad, tu persona, como si alguien quisiera matarte. Esto es lo que significa esta lucha."
No hay mejor resumen que la historia de Jacob de lo que le pasa a la gente que decide pasar el Segundo Escruticidio y entrar en el Catecumenado. Al pasar, dejas atrás a tú persona, pierdes tú integridad, tu visión crítica de las cosas, amigos, hijos, pareja o esposa (porque aunque ambos caminen la vida del matrimonio solo girará entorno al CNC y nada más), resumen, te quedas solo ante los delirios de diosito.
I.C.
Tienes mucha razón, Gloria, cuando dices que los tinglaos “teolocos” de su sensibilidad son la pera. Es probable que esa sea la razón por la cual todavía no aparecen publicados, ni editados oficialmente los mamotretos. La purga que requieren por la Congregación para la Doctrina de la Fe es grande.
ResponderEliminarLo que aquí me llama la atención es que tantos “presby” guapachante de los RM que se supone “estudian” teología no se hayan animado a hacer las correcciones ellos mismos.
He aquí dos frutos de la hortaliza para la ensalada:
Primero:
Israel, que significa 'Fuerte con Dios', porque has conocido tu debilidad, ahora te apoyarás en mí, porque sabes quién es el fuerte"
Nacar Colunga, 1944:
32, 28 Y él le dijo; «No te llamarás ya en adelante Jacob, sino Israel, pues has luchado con Dios y con hombres y los has vencido.»
Israel significa el que lucha contra Dios y vence. Tal vez el mismo nombre sea una paradoja o muestra del humor de Dios (por aquello de dejarse vencer por un hombre).
Bueno, usar la Nacar Colunga para rebatir un argumento kikiano no es un arma fuerte, pues esa Sagrada Biblia es de los religiosos naturales de misa de 12. Usemos su propia espada.
Biblia de Jerusalén, 2009:
32, 28 Dijo el otro: «¿Cómo te llamas?» —«Jacob.»— 29 «En adelante no te llamarás Jacob, sino Israel, porque has sido fuerte* contra Dios y contra los hombres, y has vencido.»
Nota al pie de página:
*Gn 32 29 Sentido que dan las versiones al verbo śârah, empleado aquí y en Os 12 5. «Israel», que probablemente significa «muéstrese Dios fuerte», se interpreta «Fuerte ha sido él contra Dios», etimología popular. Este cambio será también indicado en 35 10, donde parece ser más primitivo. Es posible que denote la fusión de dos grupos diferentes, el de «Jacob» y el de «Israel», ver 33 20: «El, Dios de Israel».
Ahí lo dejo, porque basta un dedo de frente para ver el tinglado “teoloco”.
Segundo:
¿Este hecho de que Dios le cambia su nombre como los primeros cristianos, en el bautismo, cambiaban el nombre?
Este punto es más discutible. Afecta la teología del bautismo y el problema es que realmente, en el bautismo, no hay un cambio de nombre, ni me parece que esa haya sido la intención de la Iglesia en ninguna de sus etapas históricas. En el bautismo ‘se recibe’ el nombre, no se cambia. Al cambiar la condición humana, al pasar de creatura (en común con las demás cosas mortales creadas) a la condición filial de hijos e hijas de Dios, se recibe el nombre que ahora ha sido dado por nuestro Padre-Madre Dios.
Otra cosa muy distinta era cuando se “entraba en religión”, por así decirlo, cuando se ingresaba a la vida religiosa, que en los conventos y monasterios se cambiaba el nombre. A lo cual viene al pelo la historia de Sor Rita:
Habiendo hecho ya sus votos, la Madre Superiora entregó a las recién iniciadas en nuevo nombre:
- Tú, hija, te llamaras Ana, Sor Ana.
- Tú, hija, te llamaras Luisa, Sor Luisa.
Y cuando le tocó a la muchacha en cuestión, le dijo:
- Tú te llamarás Rita, Sor Rita.
En ese momento la muchacha rompió en llanto. Decidió enviar al Vaticano una carta donde hizo la petición de cambio de nombre. Al cabo de unos meses le enviaron el pasaje y todo lo necesario para ir a cambiarse el nombre, y llegó al Vaticano.
Para cambiar su nombre, se realizaría una ceremonia donde ella tomaría un nombre al azar de una cajita. Antes de comenzar la ceremonia, sacerdote que la oficiaría le dijo:
- Hija, te hemos dado la oportunidad de cambiar tu nombre ante Dios. Pero debes saber que este nuevo nombre que tomes del papelito de la caja será el definitivo. ¡Ahí no hay vuelta atrás!
Sor Rita le contestó:
- Sí Padre, estoy segura de que no habrá nada peor en esta vida que llamarse ZORRITA.
- De acuerdo. Toma un nombre y encomiéndate a Jesús.
- Sor Rita toma el papelito y sin leerlo se lo entregó al sacerdote.
Este lo leyó, y con rostro agradable le dijo:
- Hija, de hoy en adelante serás SOR RAIMUNDA!!!!!
El estudio de la teología se produce cuando los chavales, ya han terminado el proceso de performación mental en la cosmología kikiana. De este modo NO acuden a los autores teológicos para confrontar sus ideas con las de los autores estudiados. Involuntaria y automáticamente acuden a los manuales de teología buscando todo aquello que confirma la incontinencia verbal del Sr. Argüello. Ya San Agustín decía lo mismo que en las catequesis, Sal Anselmo ya decía lo mismo que en la Reditio, San Buenaventura ya escribió comunidad de comunidades, etc. Con San Juan Pablo II ya es que lo bordan: no hay homilía, poema, carta, entrevista, que no sea una rúbrica de todo lo que se enseña en el CNC.
EliminarDe hecho, los pocos clonaditos (por suerte),a los que he conocido, o siguen asombrados de cómo podían estudiar antes los curas si el Sr. Argüello aún no había escrito libros de teología. Lo último ha sido una respuesta "Shutter island" tremenda: San Oscar Romero escuchó las catequesis, celebró la eucaristía con el rito de ese camino del CNC, y deseaba que todas las parroquias salvadoreñas abrieran ese camino del CNC. Así salen de los clonatoris Mater. Fuera de su ideología se niegan a hablar. Especialmente de Derecho Canónico donde hacen aguas a la primera de cambio.
La biblia es extensa, pero resulta curioso como kiko tan solo sabe cuatro extractos, los distorsiona e interpreta lo que da la gana, y luego se pasa horas y horas explicando sus ideas de bombero sobre esos pasajes que tanta importancia dá.
ResponderEliminarComo buen protestante sigue la regla de la sola biblia. Yo leo la biblia, yo interpreto y yo hago mi teología particular. Lo que haya dicho la iglesia durante miles de años, y la tradición, los santos, y las revelaciones modernas que les den por el ...
"¿Este hecho de que Dios le cambia su nombre como los primeros cristianos, en el bautismo, cambiaban el nombre?"
ResponderEliminarSe cuenta que una mujer fue con su hijo a pieltrechina a ver al padre pio.
Cuando pio vio al niño espetó rotundo "ese niño no tiene nombre¡¡¡". Perpleja la madre por el hecho reconoció que el niño estaba sin bautizar. Llamó a su marido y acordaron su bautizo.
"Esta es una imagen, una Palabra de Dios que expresa lo que es la vida del hombre."
ResponderEliminarKiko siempre creyendo que la biblia son cuentos con enseñanzas psicológicas para el día a dia. Siempre interpretando para leer lo que él quiere. Por eso kiko solo cree en este mundo, no cree en lo sobrenatural. No cree que los milagros que llama "magia medieval de ignorantes", cree que la santidad es un título póstumo, como un premio, cree que el cielo es en esta vida porque en la venidera no cree en su existencia...
"si alguien pronuncia una maldición, que te suceda algo malo, lo que te ha dicho tiene poder"
ResponderEliminarPor eso mismo kiko se pasa la vida maldiciendo a sus adeptos...
"Dios interviene con acontecimientos para destruir este ídolo"
ResponderEliminary si a dios se le olvida, ya esta kiko para destruir tu vida, ups perdon, tus ídolos.
Aunque no tenga nada que ver con la entrada. En el CNC se agarran a cualquier cosa para tener un santo:
ResponderEliminarhttps://www.portaluz.org/la-chica-del-camino-neocatecumenal-que-intentaron-abusar-podria-ser-santa-3038.htm
http://www.alfayomega.es/169778/la-primera-santa-del-camino-neocatecumenal
Pronto el correspondiente cuadrito de la pobre Marta Obregón en vuestras casas
PD: I.C.
Pues le voy mas a esta chica que a karmen adidas como santa. El problema es que conociendo a los feligreses de la sekta se van a ir a la Plaza de San Pedro con sus guitarritas y sus pendejadas a hace mítin como acostumbran. El autobombo está cabrón.
EliminarEsta niña, Marta, tenía bastante mas que ver con el Opus o cualquier otro movimiento de la Iglesia, o la propia y auténtica Iglesia Católica, que con el kamino...
EliminarOsea, no apropiarse lo que no es de uno...
En Cristo
Aurora
Aurora, te aconsejo que leas la biografía publicada por el arzobispado de Burgos, dinde está abierta la causa, y en ella encontrarás datos sobre su paso por el Opus Dei orimeto y luego du entrada en el Camino Neocatecumenal, con referencias a parroquias concretas.
EliminarApropiarse de lo que no es de uno está mal, pero mentir también lo es.
Pendejo mentekato de las 17:36, me vale reata si era del opus o del cnc. Entiendes? Era mas santa que karmen, a mis ojos. Entiendes? En gran pedo con los miembros de tu PUTA SECTA DE MIERDA es ese, que ustedes si se apropian de lo ajeno. Entiéndelo HIJO DE PUTA, Marta Obregón es CATÓLICA, imbécil. Más Católica que la pendeja que veneran en el kamino, pese a quien le pese.
EliminarAurora preciosa, gracias por la info.
Como no tengo por qué soportar insultos de este individuo y, además, es algo que está penado, comunico que voy a denunciar a esta página y al ciudadano en cuestión.
EliminarUn noni que quiere denunciar a una página por insultos que no se sabe contra quien van... ¿Cómo era eso de que el cristiano no denuncia? Nada que ver un cristiano con un kiko, ¿cierto?
EliminarNadie te obliga a pasar tu vida en este blog noni. Por cierto, cuanto tengas la denuncia, pásasela a Gloria. Seguro que te la publica.
2:12. Pareces el personaje de Eugenio Derbez: ¡Me ahorcó!, ¡eh! ¿vió que me ahorcó?"
EliminarEn verdad que de chiste.
Imbécil de las 2:12, sólo asegúrate que cuando vengan por mi traigan orden judicial, o los voy a recibir a plomazos. Es que aquí en mi país nunca se sabe.
EliminarLos escrutinios son para renunciar a los afectos. Esto hace al "kikocúmeno" más vulnerable ante la organización del CNC.
ResponderEliminarY el dejar sus bienes de una vez (y no poco a poco durante su vida), lo hace más vulnerable económicamente y, por tanto, más sujeto al CNC