En su blog N. analiza los motivos que le condujeron a dejarse intimidar por una patulea de individuos que, es obvio, se servían de la coacción para lograr sus fines.
Palanca de la autoridad.
Un motivo para nada baladí es que fue un párroco quien llevó a N. al CNC. N. confió en su párroco, le creía al servicio de Dios y de la Iglesia, no podía saber que era un peón en la maquinaria captadora de incautos del Camino.
Palanca de la elección.
Otro motivo es que desde el primer momento le hicieron sentir una especial predilección de Dios. N. comenta que en la convivencia del “shemá”, uno de los kikotistas, en una de esas arengas publicitarias que llaman catequesis, dijo a la asamblea: “No me vengáis con esas tonterías de que el Camino es sólo uno de tantos caminos en la Iglesia. Por supuesto que hay otros caminos en la Iglesia para llegar a la fe... Pero yo os digo esto: Dios los ha puesto en el Camino, y es en el Camino que Él quiere llevarlos a la fe”.
Este sentimiento de ser objeto de una especial elección por parte del mismo Dios se acrecienta con la imposición de un vocabulario y de cantos particulares que nadie más sabe. Solo a los elegidos se les explica el significado profundo de los cantos que les son enseñados. Solo ellos llaman kerigma al anuncio de la buena nueva, solo ellos emplean términos como scrutatio, didáscalo, shemá, sekiná…
Palanca del miedo.
En la convivencia del “shemá”, un kikotista predikikaba a la comunidad de N.: “Espero que estéis preparados para el segundo escrutinio cuando llegue, porque estar fuera del segundo escrutinio es estar fuera de la comunidad, y ¡estar fuera de la comunidad es estar fuera de la Iglesia, donde hay llanto y crujir de dientes!”.
Y para que no quedase la menor duda de que los kikotistas están al tanto de la voluntad de Dios, en una reunión privada, uno de ellos declaró solemnemente: “N., Dios te ha traído al Camino para llevarte a la fe, Él continuará llevándote a la fe a través de este camino y no puede llevarte a la fe excepto en el Camino”.
Palanca de la culpa.
La pretensión de que los kikotistas son la voz de Dios para los neocatecúmenos se refuerza con la insistencia en hacer ver a estos que son la suma de todos los vicios y defectos habidos y por haber, son los últimos y los peores, son indignos de amor, indignos de salvación y si rehúsan la ayuda de los kikotistas, que son los únicos que pueden salvarlos de la fosa de la muerte y conducirles a la fe, están perdidísimos.
Por tanto, el catecúmeno se juega la vida eterna si no obedece. Esto es lo que les quieren hacer creer a todos.
Vuelvo de nuevo a la palanca de la autoridad, pretendida sin otro mérito que el llevar más años de intenso consumo de kikotina, para exponer algunas de sus técnicas gnósticas.
La información como palanca coercitiva.
A lo largo de los años, a través de interrogatorios vergonzantes, los kikotistas acumulan información sensible sobre los catecúmenos. Por ejemplo, a los jóvenes se les conmina a reconocer si se masturban, además de que han de aclarar su orientación sexual y los matrimonios han de dar explicaciones si hay lapsos considerados sospechosos entre embarazo y embarazo.
Cuando N. abandonó el Camino, empezaron a circular chismes y juicios sobre sus hechos concretos del pasado, unos ciertos y otros falsos, es decir, calumniosos. Cuando se trata de dejar claro que quien se ha ido ha cometido errores graves en su vida y, por tanto, no hay que imitarle en nada, un kikotista no se anda con sutilezas, lo de menos es si los bulos que propala son solemnes mentiras o no lo son, lo importante es que nadie imite al Judas y se vaya con él.
El misterio gnóstico y el “ya lo verás más adelante”.
A medida que avanzaba en el Camino, N. notó que los kikotistas periódicamente daban indicaciones contradictorias entre sí, o hacían afirmaciones que contradecían las anteriores, todo sin dar nunca explicaciones.
Por ejemplo, en el primer escrutinio se dice a los catecúmenos que "vendan sus bienes y den las ganancias a los pobres", y se les asegura que es algo entre Dios y el catecúmeno y que ellos nunca se entrometerán para cuestionar lo dado o dejado de dar. Paradójicamente, en el "shema", los kikotistas interrogaron a varios ante la comunidad sobre ese tema. Tras lo cual declararon que ninguno de los interrogados había "dado lo suficiente".
Otro ejemplo, la reacción de los kikotistas de N. respecto a la negativa de su prometida a entrar en el CNC fue totalmente contradictoria con sus dichos previos sobre el matrimonio, la Eucaristía, la Iglesia y el Camino. Muchas veces dijeron que la mejor preparación para el matrimonio era que los novios participasen juntos de la Eucaristía, sin embargo, pusieron el grito en el cielo porque N. faltase a la uka por asistir a Misa junto con su prometida. También recalcaban con frecuencia que "el Señor llama a quien quiere" a la comunidad, pero se revolvían como serpientes ante la idea de que Dios suscitase a su prometida la decisión de no pertenecer al Camino. Siempre predicaban que "debemos abrazar nuestra cruz", y sin embargo, cuando vieron que N. se casaba con una mujer ajena al Camino, le advirtieron que "casarse con alguien de fuera del Camino es siempre un gran sufrimiento" que había que evitar a toda costa, es decir, era una cruz que no debía abrazarse.
Y no menos baladí es que el discernimiento sobre el matrimonio solo compete a los novios, en oración ante Dios, no a entes ajenos y guiados por a saber qué intenciones.
Pero en el Camino no existe verdadero diálogo entre kikotistas y catecúmenos. Cuando pontifican, los kikotistas están sujetos a un guion que ellos repiten como loros bien amaestrados, por tanto, no pueden permitir que la asamblea se lance a hacer preguntas y cuestionamientos. Cualquier duda que plantee el neocatecúmeno es cortada de raíz: “tú ahora no puedes entenderlo, lo entenderás más adelante”, “a los bebés no se les puede dar alimento sólido”, “fíate de los kikotistas que Dios ha designado para ti” o más grueso todavía: “fíate de Dios y obedece”, porque un kikotista ha de estar presto a hacer uso espurio del nombre de Dios.
En consecuencia, el neocatecúmeno aprende que no puede fiarse de lo que cree cierto, porque lo que ayer fue así hoy es asá, sin ninguna explicación racional (“hermano, crucifica la razón”) que justifique la contradicción, sino en virtud de un conocimiento gnóstico que solo poseen los kikotistas. El resultado final es que la única forma de no equivocarse es la obediencia incondicional a un grupo de personas, no a un conjunto de preceptos.
Así, en el CNC se trata de que los neocatecúmenos sean fieles a ellos, no a lo que ellos dijeron, porque lo que dijeron ayer está en contradicción flagrante con lo dicho anteayer. Y jamás se les ha de pedir cuentas por sus contradicciones, que no son tales, sino “como tú lo ves” debido a tu falta de discernimiento. En todo caso, ha de quedar claro que la fidelidad debida es a ellos, no a Dios, porque ellos ocupan el lugar de Dios para ti.
Lo más grotesco y una de las acciones más miserables de los kikotistas es preguntar a uno por uno en público, delante de todos ¿Os masturbáis?. Por Dios, creen Ustedes que Jesucristo hacia semejantes cosas con sus discípulos y seguidores?. Esos kikotistas son lo más bajo, miserable y morbosos. Eso sin anotar otras peores preguntas de carácter sexual. Ver las caras de las víctimas siendo interrogadas sobre temas y prácticas íntimas es algo denigrante y vergonzoso.
ResponderEliminarNi los Sacerdotes tienen el permiso para realizar tales indagatorias, todo eso está prohibido por la Iglesia, sin embargo unos laicos sin ningún permiso de la Iglesia se dedican a invadir la privacidad y la intimidad de las personas.
EliminarLos sacerdotes tienen prohibido hacer en confesiones preguntas de tal índole. De hecho algún Obispo ha advertido en su diócesis NO entrar en temas que puedan hacer daño a las personas y si son ellas quienes lo confiesan,no hacer preguntas ni buscar el morbo. Eso dice la Santa Iglesia Católica. El kkamino es otro mundo... Cuanto más engañes a tu pareja mas te quiere el señor y cunto mas pornografía consumas mas historia de salvación tienes.... Mentes enfermas. Se cierran el cielo y se lo están cerrando a la.mayoria.
ResponderEliminarLa intromisión en la parte sexual de cada uno por parte de los katekistas, no deja de ser una anécdota respecto de todas las intromisiones vergonzantes y fuera de lugar que llevan a cabo.
ResponderEliminarEllos no son quién para saber sobre tus relaciones familiares, tus problemas laborales o, por ejemplo, si das el diezmo o no...de hecho va totalmente en contra del concepto de fuero interno. "Qué no sepa tu mano derecha lo que hace tu mano izquierda" y ellos por descontado no son ninguna de nuestras manos y menos aún para hacer esas preguntas en presencia de todos los "hermanos".
La Iglesia católica reguló esto con mucha delicadeza hace muchos años creando el secreto de confesión, respetado incluso en procesos civiles y sin embargo estos individuos se erigen en sabedores de todo. Prueba más evidente de que el Kkamino no es iglesia.
Lázaro.
Saludos, os digo una cosa, cuando sales del camino neocatecumenal sea por la razón que sea ves todo completamente claro, ves con claridad todos los engaños de esa secta, y lo más importante te das cuenta de cómo te estaban privando de las verdades reveladas por Dios en la Iglesia Católica.
ResponderEliminarLos números de comunidades y abducidos neocatecumenales siguen cayendo, tal parece que ir dando a conocer en detalle a través de los años realmente lo que es el camino neocatecumenal (una secta) esta haciendo efecto; las últimas intervenciones y pronunciamientos del mismo Kiko han sido definitivos, el mismo kiko sin darse cuenta con su atrevimiento, desfachatez, descaro, maldad y crueldad a sacado a la luz pública lo que realmente son, como aquello de desear en pleno encuentro del camino la muerte del Papa Benedicto XVI simplemente porque los estaba corrigiendo y poniendo en cintura; además de las muchas denuncias de víctimas y los testimonios a través de las redes sociales y las web de Internet como esta página y muchas más, donde se denuncian en detalle los graves errores dogmáticos y doctrinales con herejías incluidas del camino neocatecumenal, los abusos y atrevimientos de los mal llamados catequistas, catequistas que no cuentan con una formación Católica sino una formación judeo-luterana-protestante-kikiana, catequistas que detestan y despresian el Catecismo de la Iglesia Católica el cual no tienen en cuenta ni para su formación ni para darlo a conocer y mucho menos para usarlo en sus comunidades; además de las praxis y formación antiCatólica/Cristiana con la cual están destruyendo la Sana Doctrina Católica en las Parroquias en las cuales está secta se instala como parásito; con el agravante que han logrado que les ordenen "sacerdotes" (kiko-curas) aparentemente Católicos pero formados con todos los errores antes mencionados desde sus comunidades de origen. Los neocatecumenales ya no saben que hacer para captar más adeptos, están optando por no escribir en sus invitaciones para las kikotesis las palabras camino neocatecumenal o cualquier otro término que los identifique, últimamente se han limitado a escribir en sus carteles y en sus invitaciones "charlas para adultos" o "charlas para personas a partir de los 13 años". Las muy pocas comunidades nuevas de 8 o 10 individuos están integradas solamente por los mismos hijos de los neocatecumenales, los cuales son obligados a ir a las kikotesis, o algunas pocas personas que por su ignorancia e ingenuidad son manipuladas y coaccionadas por esa secta, personas que carecen del conocimiento real de lo que es la Iglesia Católica y por eso caen en las garras de los neocatecumenales; Ahora se entiende bien porque en un principio la secta sólo buscaba personas alejadas de la Iglesia Católica ¡vaya, que astutos!
ResponderEliminarY la Iglesia sin enterarse y si se han enterado y no hacen nada, mucho peor.
EliminarExactamente, eso es lo peor, no hacen nada ( o casi); el Kkamino compra con oropeles a las voces críticas que se dejan deslumbrar por los agasajos personales tanto a obispos como a sacerdotes; viajes gratis a Tierra Santa, aportaciones monetarias a sus diócesis o parroquias y por supuesto, mucho relleno en las actividades que organicen..
EliminarHabía una película ( que curiosamente cuando se estrenó se recomendaba ver en las komus) titulada Pactar con el diablo y protagonizada por Kenau Reeves y Al Paccino ( el diablo), donde éste terminaba diciendo la frase "realmente la vanidad es mi pecado favorito" y es cierto, de este pecado no estamos salvos ninguno, obispos incluidos y es precisamente con el pecado que más juega el Neo-invento.
Lázaro
Es una total falta de respecto como los kikos se refieren a la Misa como la "euka", vamos a la "euka" se les oye decir,.... que desagradable
ResponderEliminarClaro, porque a parte de ignorantes ( la eucaristía es un parte de la Misa), son unos soberbios y tienen que sentirse por encima de los demás también en terminologías rimbombantes y por eso consideran de poca categoría utilizar términos como "MISA" o "CURA" ridiculizándolos como de "misa de 12" y sustituyéndolos por "eucaristía" o "presbítero" que según ellos es como de más nivel.
EliminarLázaro.