lunes, 26 de septiembre de 2022

Y Carmen descubrió a Jacob (VI)

 

Carmen prosigue la lectura:

«Nuestro episodio está situado al final del ciclo de Jacob y Esaú, que es útil recorrer desde el principio, al menos en sus líneas generales, para trazar el conflicto entre los dos hermanos con su carga de contradicciones. El nacimiento de Jacob está descrito en Gn 25,19-27, y llama la atención inmediatamente cómo desde el principio su existencia está indisolublemente ligada la de su hermano Esaú. Los dos son gemelos, concebidos juntos. 

Este texto, por un lado, nos pone frente la inaudita gratuidad de estos nacimientos, puro don del Señor de lo imposible, que oye la oración y hace fecundo el seno de una madre estéril, una gratuidad aún más estupenda por la sobreabundancia: Habría bastado un hijo, pero en el seno lleva dos hijos. Por otro lado, es justamente esta sobreabundancia y generosidad de hijos lo que se transforma rápidamente en ocasión de combate, de competición y de lucha. Lo que por parte de Dios es un don se percibe de diferente manera por parte de los hombres que no saben vivir la diversidad de sus vidas en la comunión, sino que piensan que la propia identidad exige el afirmarse en detrimento de la del otro. Con el relato de estos dos hermanos gemelos, que aún antes de nacer luchan en el seno materno, pelean y se molestan recíprocamente, la Biblia anuncia “el misterio del otro”, el problema actual y de siempre, el aprender a compartir la única tierra que es de todos porque pertenece al único Dios, no en competencia los unos con los otros, prevaricando y destruyéndose mutuamente, sino acogiéndose y amándose.

Jacob más que Esaú es el hermano (Gn 25,26), es decir el que no posee ninguna autonomía propia y, desde su nacimiento, está agarrado al primogénito, lo tiene en su puño agarrándole el talón. Por eso fue llamado Jacob: La etimología de su nombre está explicada por la imagen irónica de agarrar el talón. Hay aquí un juego de palabras entre "aqev" (que significa talón) y "Ya-aqov" como si se dijese: "Fue llamado Jacob, porque le ponía la zancadilla su hermano". En Gn 27,36 hace derivar el nombre del verbo "aqav" que significa "talonear o suplantar". En este contexto en que se relata el engaño con que Jacob arrebataba la bendición que correspondía por derecho al primogénito, Esaú exclama: "¿Quizá porque se llama Jacob me ha suplantado ya dos veces?".

Jacob es, pues, por definición "el suplantador", el "zancadilleador" de su hermano. Sabemos que para la mentalidad semítica el nombre era otra cosa muy distinta a un sonido convencional; más bien expresaba la realidad esencial, contenía algo de la naturaleza de la persona que llevaba ese nombre. Jacob, en su nombre, lleva la realidad de su ser; está señalado como el suplantador, el embrollón, el prevaricador de su hermano. Y está obsesionado por su hermano, al que permanece agarrado en la definición de su propio nombre, en una relación de competición, de lucha y de odio».

Sabiendo esto que para Israel es importantísimo -ahora entenderéis los profetas y todo- hasta para llamar los profetas a Israel a conversión dicen que todo hermano engaña, y para ellos la palabra es “jacobear”. O sea, que igual que Jacob es este pueblo. 

 «Nace agarrando el talón de su hermano, así que, si el recién nacido Esaú hubiera podido hablar, le hubiera dicho: "¡Déjame!", como el hombre misterioso contra el que luchará de adulto en el vado de Yabboc (Gen 32,27).

Esta parece ser la tara psíquica y moral que pesa sobre la conciencia del patriarca. No podrá reposar tranquilo; donde quiera que vaya será constitutivamente "el que engaña su hermano". La tradición profética, de hecho, retendrá de él sobre todo esta imagen negativa (cf. Is 43,27). En Jr 9,3 el profeta, condenando la corrupción moral de Judá con la expresión hebrea: "Kal-achaqov ya qov" (que se podría traducir: Todo hermano está especializado en engañar -jacobear-), parece hacer alusión al nombre de Jacob en su papel de suplantador o de taloneador. Véase también Sal 1,10; 49,6, Os 12,3-4, Jn 1,47, donde Jesús, propósito de Nataniel, al que ha visto bajo la higuera, exclama como si se tratase de algo inaudito: "Ahí tenéis un israelita de verdad (Jacob recibirá el nombre de Israel), en quien no hay engaño" (dolos).

 La hostilidad entre Jacob y Esaú recuerda a aquella entre Caín y Abel que concluye con el fratricidio. El pecado contra el hermano, que no es aceptado en su diversidad hasta ser eliminado es el aspecto que la narración patriarcal intenta reemprender con el asunto de Jacob y Esaú para manifestar cómo la relación hostil de los hermanos es restaurada por el Señor, que enseña como reabsorber el odio para que florezca el amor».

Esto es lo que vamos a ver hoy que es donde yo quiero centrar la celebración de la Reconciliación, cómo salir del odio, cómo salir de la rivalidad, cómo salir verdaderamente de ti mismo; esto es lo que Dios va a mostrar con esta revelación de la palabra de Jacob.

«En la relación con el hermano se cuestiona la verdad de su propia identidad. En el relato, Jacob tiene que dejar el país prometido por Dios a sus padres a causa del odio de su hermano que quisiera matarlo para vengarse. Tendrá que quedarse en Jarán, etc. El misterio terrible de la presencia de Dios envuelve la existencia de Jacob, sobre todo en su salir y entrar de la tierra prometida. Ambos movimientos están condicionados por la relación de Jacob con su hermano; ¿había huido por el odio de su hermano o también quizá porque no era posible vivir en la tierra prometida mientras odiaba? 

Ahora bien, la posibilidad de volver al país está de nuevo condicionada por el hermano que allí habita. El hermano es el paso obligado, el puente humano construido en el Jordán para poder entrar en la tierra prometida».

O sea no puede entrar en la tierra prometida, en la paz, en la vida eterna, en la presencia de Dios sin reconciliarse con su hermano. Como ve que eso es imposible porque su hermano sale a matarlo y él está aterrorizado, ¿quién podrá hacer eso? Que es lo que nos pasa todos: en las comunidades, en la familia, en las naciones, en todas partes es lo mismo: LA ALTERIDAD DEL OTRO.

La primera vez que yo conocí Kiko en un barrio de Palomeras, jovencillo y tal, yo venía ya de Israel con una serie de experiencias, me dijo que había tenido una visión y dije: ¡uy, éste cómo está! De buenas primeras, sin conocerme de nada, me cuenta sus visiones, dice que la Virgen le había dicho de formar pequeñas comunidades donde el otro es Cristo. Pues este OTRO -que él todavía ni lo entiende- es el problema que se nos va a presentar aquí y que nos va a servir hoy. El otro. ¿Quién es el otro?

Quizá el fallo por el que los frutos del CNC son agraces es que, debido a su manía de considerar a todos subhumanos, todavía no han descubierto quién es el otro.

 

20 comentarios:

  1. Recuerdo a mi suegro con los cascos puestos y tomando apuntes de la "fantástica" katekesis que, según mi suegra, les había dado Karmen sobre Jacob y que al haberla podido recibir in situ, ( privilegios para negra) mi suegro había grabado en su pequeña grabadora de bolsillo, como era habitual en él en todos estos encuentros ( cientos de cassettes tiene en casa con todas las grabaciones del Maicito y Cía) y que estaba tratando de aprender de memoria.

    Ahora entiendo lo de "fantástica"... jajaja

    Lázaro

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. No sé si hay algo intencionado en el empeño neocatecumenal por llamar "catequesis" a lo que no lo es, o si se trata de simple ignorancia.
      Es posible que sea lo segundo.
      Me explico: una catequesis es una charla formativa sobre algún tema de la doctrina. Las palabras claves son doctrina y formación. Cuando la charla es una divagación sobre el hueso que une el fémur con el talón (sic) seguida de la lectura de una traducción amateur de un libro que recopila meditaciones sobre una figura biblica no es una catequesis. Ni siquiera es una meditación, todo lo más es una lectura comentada de una meditación.
      Sucede lo mismo con los monólogos kikianos: la inmensa mayoría solo saca a la luz sus neuras, no son catequesis pues ni son doctrinales ni son formativas, más bien, como he leído por aquí, son deformativas.

      Eliminar
    2. Ciertamente, no son catequesis. La catequesis es un ministerio para enseñar la Doctrina católica contenida en el catecismo, compendio de la Tradición y Magisterio de la Iglesia Católica. En el CN no están capacitados para enseñar la Fe católica, sencillamente porque no la tienen, por muy católicos que se presenten. Ellos siguen la línea de la sola Escritura, propia de los protestantes. Y con todos los tintes del judaísmo. Se le puede aplicar más la denominación judeo protestante en vez de católico.

      Eliminar
    3. Otra razón que delata que lo del cnc no son catequesis es que, por su misma naturaleza instructiva, la catequesis siempre está abierta al debate. Se trata de que los catecúmenos pregunten y resuelvan sus dudas y, por ello, las preguntas y el intercambio de ideas son bienvenidas. Todo lo contrario que en el camino donde la consigna que se da a los catecúmenos es la de calla, paga y obedece.

      Eliminar
    4. La mordaza neocatecumenal es imprescindible, pues quien basa su presunta "sapiencia" en memorizar unos textos ajenos no puede arriesgarse a que le pregunten sobre asuntos que desconoce. Pero ello es una prueba más de que en el cnc no saben lo que es catequesis.

      Eliminar
    5. Sus enseñanzas no con catequeticas, sino más bien, enseñanzas sobre la Biblia, personajes del AT... Un "kiko" puede saber mucho de Biblia, pero de Fe Católica, muy poco. Y para salvarse no es necesario conocerse la Biblia entera, pero sí conocer la Doctrina Católica, creerla y profesarla.

      Eliminar
    6. Enteramente de acuerdo contigo, Elena.

      Saberse las fiestas judías, las normas de higiene con los alimentos, las oraciones en hebreo, tener el shemá en arameo colgado de la puerta, etc. no salva. Los pobres se tragan el camello y cuelan el mosquito.

      Eliminar
    7. De lo único que hablan en esa secta CNC es de: Rosh Hashaná, Yom Kipur, de la festividad de Shavuot donde beben leche y miel... ya lo harás tu en el camino... dicen..., del día de la Independencia del Estado de Israel, del día de la Recordación de la Shoá, del Heroísmo del Pueblo Judío, del Séder, del Pesaj, del Shavuot, del Purim, de la Jánuca, de los campos de concentración de los judíos en la segunda guerra mundial, de las festividades de Sucot y Simjat, de la Torá, del día de la menorá.
      En las convivencias de eso es de lo único que hablan y repiten y repiten y repiten y dan charlas y fumar cigarro y beber café, eso es lo único que hacen, y a eso le llaman catequesis y enseñanzas Católicas!! ¡Que Horror!!!!
      En 10 años jamás escuché en esa secta una catequesis ni ninguna enseñanza Católica, y mucho menos que viniera del Catecismo Católico al cual rechazan y ni por broma lo mencionan o aconsejan usar, absolutamente nada sobre algún documento Católico, encíclicas o algo así, Además de todo eso en el CNC le dan a la Biblia una interpretación diferente a como lo hace la Iglesia Católica, ellos le dan una interpretación como lo hacen los protestantes, cada uno le da una interpretación diferente, y como si fuera poco practican la bibliomancia.
      Es claro que son un grupo Judeo-luterano-protestante más los inventos de kikocarmenpezzi. Han lograron engañar muy bien a la Iglesia Católica y a los pobres ingenuos abducidos que captan, formando gente llena hasta de herejías sin la sana doctrina de la Iglesia Católica.

      Eliminar
    8. De acuerdo en que el supuesto .." itinerario catequético " que es lo que define el ser y la finalidad del CNC según su aprobación eclesial en sus Estatutos, es ello en la práctica una descomunal mentira, un fraude espectacular.

      Eliminar
  2. Una cosa es segura, lo de "hay que hacer comunidades Cristianas como la Familia de Nazareth que vivan en humildad, sencillez y alabanza donde el otro es Cristo" es simplemente un engaño para atraer a los ingenuos a las kikotesis, también es completamente una utopía para el CNC. Primero que todo es imposible que un movimiento que promueve y hace apología al pecado y trompetea con orgullo y altivez que son los peores de los peores pecadores, donde tratan a los grupos apostólicos de la parroquia de beatorros religiosos rezanderos buenazos de misa de 12, donde aborrecen la piedad, la bondad y la misericordia sean imagen de la Sagrada Familia de Nazareth!!. Y segundo es imposible que vean y amen al otro como si fuera Cristo ya que al otro lo calumnian lo humillan lo destruyen le dicen ve y pide perdón a tu verdugo !!. Tal parece que en el CNC entendieron mal aquello de que el otro es Cristo y lo que entendieron fue: "Donde hay que tratar al otro como trataron a Cristo sus enemigos"

    No me imagino a San José a la Santísima Virgen María y a Jesús viviendo como viven las comunidades del CNC en rivalidades, envidias, contiendas, hipocresías y donde pecar no importa porque Dios los quiere así pecadores y malvados, y las comunidades más antiguas son las peores.

    ResponderEliminar
  3. huuufff la envidia, la rivalidad y la hipocresía entre los que cantan..... ni te cuento......, pero esos son los frutos de esa secta cn.

    ResponderEliminar
  4. Acá igual, hemos visto como hermanos han sido destruidos y les han hecho la vida imposible, inclusive los mismos responsables de la comunidad todo por los cantos, responsables llenos de envidia, mentira y calumnia hasta lograr que se vayan de la comunidad, bien por ellos

    ResponderEliminar
  5. Entonces es mejor que se cambien el nombre por Judíos. no kikorros si no Judíos con un barniz engañozo de Catolicismo

    ResponderEliminar
  6. Queridos lectores, comparto con ustedes un desahogo:
    Es un tanto contradictorio lo que diré, pero es mi verdad. Creo ser uno de los bendecidos en vivir esta forma de espiritualidad en servicio a la Iglesia y no tanto del "camino". Esta misma cercanía con la Iglesia me ha llevado a cuestionarme mi permanencia en las comunidades. Años deseando poder entregar un servicio real a la Iglesia (coro, catequesis) y postergándome a la espera de no sé qué. "Nadie puede dar lo que no tiene" es lo que me han dicho. ¿Pero cómo saben eso? Profetas no son...
    Así que aquí estoy enfrentado a dar un paso al costado con el corazón maltrecho por dejar a personas valiosas a su suerte porque no quieren ver la realidad.

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. No eres el único animo!!!!, lo asimilaras y darás gracias al Señor!, entrar en detalles seria tener que escribir un libro,

      Eliminar
    2. Podéis acercarse al Párroco, claro siempre y cuando no sea un kikocura, en la Parroquia con seguridad os darán la oportunidad de prestar un servicio a la Iglesia (así lo hicimos con mi esposa cuando huimos se esa secta) sin tener que esperar 50 años haciendo pasos,exámenes, escrutinios con vulgares interrogatorios que están prohibidos por la Iglesia Católica.

      Eliminar
    3. Anónimos 14:10 y 16:22, me había olvidado... Muchas gracias por vuestros comentarios.

      Eliminar
  7. "Y Carmen descubrió que el agua mojaba"

    ResponderEliminar
  8. "Y Carmen descubrió que el agua mojaba"

    ResponderEliminar
  9. No pertenezco a esa secta camino neocatecumenal pero para evitar que los falsos catequistas destruyan mi matrimonio como he visto que lo han hecho con otros porque la esposa está y el esposo no o viceversa, tengo que soportar las praxis de mi esposa y una de ellas es precisamente la bibliomancia que practican en ese grupo.
    A todas horas del día abren la Biblia miran al cielo y dejan caer el dedo sobre la Biblia y leen en es punto, si la cita les conviene dicen que fue el dedo de Dios pero si la cita no les conviene dicen que fue el dedo de satan, entones repiten todo el ejercicio hasta que den con una cita que sea de su beneplácito.

    ResponderEliminar

Antes de comentar, recuerda que tú eres el último y el peor de todos, y que el otro es Cristo.