jueves, 26 de agosto de 2021

Traditio symboli (C)

 

Se supone que a continuación los hermanos en “misión conyugal” cuentan cómo les va, que es lo que en el argot neo se llama “dar su testimonio”. Pero en el mamotreto lo que viene a continuación es más de lo mismo, es decir, otra perorata de Kiko el humilde.

Ya sabemos que hay que ver caso por caso, incluso con los hijos: en algunas situaciones los hijos aceptan venir a la comunidad solos, si en cambio los niños tienen problemas para ir a la Eucaristía, entonces la madre no puede quedarse en casa, debe ir a la comunidad acompañarlos.

¿Qué ha sido de aquello de que lo importante era el matrimonio y que por el bien del cónyuge no caminante el otro tendría que plantearse si dejar la comunidad por completo? Era mentira, como tantas que salen de la boca de Kiko que, una vez más, pisotea al padre y a la madre y se arroga una autoridad que no tiene sobre los hijos además de imponer a los demás cargas que él no lleva.

Lo que dijo esa hermana, me parece que entendió el espíritu, porque no es fácil de entender. Hemos sido un poco drásticos, esto es cierto y os pedimos perdón, pero hemos entendido una cosa: siendo esto algo muy serio, te atreviste a entender que no era un juego, que o era en serio, ¡o no servía para nada! La gente podía creer que esto era un tiempo: "Ahora tengo que quedarme en casa, después regreso a la comunidad". En muchos matrimonios hay un desapego, en muchas parejas cada cónyuge vive por su cuenta, debemos decir la verdad. Entonces, aun sabiendo que sufristeis muchísimo, incluso aceptando que nos juzgasteis mal, que pudierais decir de todos los colores de nosotros, que nos odiabais, que pensabais mal, no teníamos otro remedio que poneros en la verdad, es decir, haceros evaluar la importancia que el matrimonio tiene para Dios.

Ser capaz de ver que Kiko es un cagalástimas y que le encanta cargar pesados fardos sobre las espaldas de los demás no es pensar mal y juzgar mal, es reconocer un hecho concreto y real. Y sobre la importancia del matrimonio para Dios, Kiko no tiene ni idea y es una presunción demoniaca por su parte pretender lo contrario.

Entonces dijimos una cosa: "Quédate en casa". El primer año, aconsejándote ir a Misa todos los días a ser posible, como ayuda, rezar el rosario pidiendo a la Virgen que os ayude, diciéndote que prestes más atención a tu marido o a tu mujer, para estar más unidos; el segundo año se hace algo diferente, ya se lo he dicho a mis comunidades. Durante el segundo año, si el esposo o la esposa quieren asistir a la Eucaristía en comunidad, pueden venir.

Nos ha fastidiado. Y si el tendero de la esquina quiere ir, también puede ir, porque una Eucaristía ha de estar abierta a todos o, de lo contrario, será una uka al margen de la Iglesia. Es más, por ese mismo motivo de que la Iglesia no cierra la puerta a nadie, no es lícito prohibir a ningún neohermano en misión conyugal que vaya a la uka si así le sale del moño o del bigote. Es decir, una vez más, Kiko impone leyes al margen y en contra de la tradición y el ser de la Iglesia.

Es decir, esta hermana, por ejemplo, puede regresar a la comunidad al segundo año, siempre que su esposo la acompañe; si tu marido quiere venir contigo, tú vas la comunidad. Lo habíamos dicho, ¿no? Es decir, hay una gradualidad: en el segundo año se puede hacer así.

La verdad, mucho mejor que se vayan juntos al cine o de paseo o a una adoración eucarística.

Pasamos al tercer año: ¿qué hacemos? ¿Seguimos, volvemos? Lo estamos preguntando porque no es fácil. Hemos sufrido mucho, algunos maridos se enojaron muchísimo, algunos cónyuges están en contra nuestra porque pensaron que queríamos hacer violencia, que eso es un chantaje para forzarlos a entrar en la comunidad.

Es que es una violencia y además es violencia ilegítima, puesto que a nadie se le puede prohibir el acceso a la uka que quiera. Lo dijo el Papa Benedicto XVI, el de los zapatitos y las puntillitas, el que uno muy sensible quería que se muriera.

Pero no, tal vez pueda parecer así sin duda alguna, puede parecerlo pero ese no era nuestro propósito. Nuestro propósito era hacer entender a los de la comunidad, hacer descubrir el amor al cónyuge: este era nuestro verdadero propósito. Si me dices que un plazo de dos años, o dos años y medio, es suficiente para que esto se entienda, que es positivo, me ayudas mucho, ¡estoy contento!

Por la misma regla de tres, para que descubran el amor a los religiosos de misa de doce, que falta les hace, para los neohermanos debería de ser obligatorio participar en las actividades de la parroquia durante unos cuantos añitos.

No hablo del cónyuge que no viene, hablo del hermano que está en la comunidad: le pregunto si este tiempo le ha servido para tener una luz diferente sobre su matrimonio, para entender muchas cosas que antes no entendía. Si me dices esto, ¡es suficiente para mí! Esto es importante. Si crees que en medio del sufrimiento ha sucedido esto, y si también hubo un beneficio para el otro cónyuge: puedes ayudarnos en esto. 

Si alguien ve que su matrimonio mejora al alejarse de la comunidad es para no dudar nunca de que lo que Dios quiere es que no vuelvas a pisar en CNC.

Sé que en muchos casos ha ido bien, aunque ha habido muchos problemas. Por ello debemos ver caso por caso, veremos las opciones, la posibilidad de regresar o no regresar. Os doy las gracias, espero que la convivencia os haya ayudado, ¡y no penséis que os hemos olvidado! Al contrario, sois algo muy querido en el camino, todas las comunidades también lo sienten. Estoy de acuerdo en que existe el peligro de olvidar, y esto debe remediarse. Os prometo que veremos los casos uno por uno, cada uno con sus propios catequistas. Veremos las soluciones poco a poco. En principio hemos comenzado a redescubrir el matrimonio, la catequesis de hoy os ayuda a nosotros.

Rogad por nosotros, hermanos. ¡Ánimo! Si queréis una bendición, arrodillémonos y recibámosla.

 

13 comentarios:

  1. Saludos, no viene al tema de la entrada. Quiero comentar el atropello y la manipulación que los catequistas del camino neocatecumenal hacen contra la Palabra de Dios y la mala interpretación que le dan!
    Dentro de las muchas irregularidades de esta gente, los catequistas aseguran ser los "pequeñitos" de los que habla el Evangelio!!!

    San Mateo 25,....
    Entonces el Rey dirá á los que estarán á su derecha: Venid, benditos de mi Padre, heredad el reino preparado para vosotros desde la fundación del mundo.

    35
    Porque tuve hambre, y me disteis de comer; tuve sed, y me disteis de beber; fuí huésped, y me recogisteis;

    36
    Desnudo, y me cubristeis; enfermo, y me visitasteis; estuve en la cárcel, y vinisteis á mí.

    37
    Entonces los justos le responderán, diciendo: Señor, ¿cuándo te vimos hambriento, y te sustentamos? ¿ó sediento, y te dimos de beber?

    38
    ¿Y cuándo te vimos huésped, y te recogimos? ¿ó desnudo, y te cubrimos?

    39
    ¿O cuándo te vimos enfermo, ó en la cárcel, y vinimos á ti?

    40
    Y respondiendo el Rey, les dirá: De cierto os digo que en cuanto lo hicisteis á uno de estos mis hermanos pequeñitos, á mí lo hicisteis.

    Acaso es esto cierto?????, o hasta dónde llegan a manipular la Palabra de Dios en el camino neocatecumenal!! Por qué la Iglesia le da al Evangelio una interpretación y los catequistas del camino neocatecumenal aseguran que los pequeñitos del Evangelio son ellos????

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  2. Asi es:
    Tened cuidado, atentos, los katequistas son los pequeños del Evangelio....... decian

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  3. Regla de San Benito.
    Cuando un hermano es reprendido de la manera que sea por el abad o por cualquiera de sus mayores por una razón cualquiera, aun mínima, o advierte que el ánimo de alguno de ellos está ligeramente irritado contra él o desazonado aunque sea levemente, al instante y sin demora irá a postrarse a sus pies y permanecerá echado en tierra ante él dándole satisfacción, hasta que con una palabra de bendición le demuestre que a se ha pasado su enojo. Y, si alguien se niega a hacerlo, será sometido a un castigo corporal; si se muestra contumaz, será expulsado del monasterio.

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    1. Regla de Cristo, expresada por el anciano Juan: "Ama y haz lo que quieras", sin teatralidades ni imposiciones vacuas.

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    2. Por cierto, es evidente que ningún kiko sigue la regla de san Benito, pues no se sabe que ni siquiera uno de ellos se haya postrado ante otro que no sea su ídolo.

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  4. Noni 09:28, te veo poco versado en las citas de la Biblia. Vamos que confundes una castaña con un huevo y te quedas tan pancho.... Cosas de la cruxantinitis.
    Confundes bastante, espero que algún palmero de la nini jefa, te ilustre con letra azul o negro sobre blanco y te saque de la ignorancia.

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    1. A lo mejor eres tú el que no sabe de las fuentes de San Agustín. Y encima vas de listo.

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    2. ¿Listo un kiko? ¡Venga, ya! Alguien que permita que le prohíban usar la razón, no puede nunca ser listo.

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    3. Noni,11:45 no sabía que el anciano Juan, el de la regla "Ama y haz lo que quieras", era maestro del de Hipona, ¿O era al revés?
      Me pierdo.....

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    4. Sí, es evidente que estás perdido.

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  5. En esta vida no hay nada más peligroso que alguien que es o que se cree una víctima, nadie se convierte con más facilidad en verdugo que una víctima, suponiendo que aquellas personas sean víctimas de verdad.

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    1. En esta vida no hay nada más peligroso que alguien que es o que se cree perseguido, nadie se convierte con más facilidad en verdugo que uno que se proclama perseguido, suponiendo que aquellas personas sean perseguidos de verdad.


      "¡Nos persiguen!" (Kikónides dixit)

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    2. En Kikónides también dicen a las víctimas que se merecen estar en la cárcel, que se merecen todo lo que les pasa y más y que tienen que ir a pedir perdón al verdugo por haberlo juzgado.

      Eso no es que sea peligroso, es que es perverso, como el padre al que siguen.

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Antes de comentar, recuerda que tú eres el último y el peor de todos, y que el otro es Cristo.