Bien. Tras explicar que el otro lejos de ser el prójimo es el enemigo, Kiko da una vuelta de tuerca más:
¡Va el niño y se sube a le chepa!
«¿Por qué te hace sufrir? Por tu orgullo, porque no respetas que el otro pueda cometer errores. El error de un hijo te destruye: ¿por qué? ¿Tienes tanto orgullo que no permites que tu hijo cometa errores? Ya sabéis todas estas cosas mejor que yo».
A ver si lo explico: quien es destruido, dice Kiko, por el error de un niño demuestra ser un adulto infantilizado que no ha aprendido a canalizar la frustración; ni a asumir la responsabilidad. Y debería acudir a un psicólogo para ser tratado de sus deficiencias, porque lo grave en este caso no es el fallo del niño, que no ha nacido doctorado en nada, sino la inmadurez del adulto.
Esto tan fácil de entender, Kiko lo emplea para dormir la mente y la conciencia de los oyentes, de por sí entregados, y una vez implantada la idea de que quien no obra como Dios quiere es el adulto cascarrabias destruido por el error de un hijo, Kiko le da una vuelta torticera a la tortilla:
«Amamos muy mal, no tenemos derecho a ensuciar a los demás con nuestra afectividad, la afectividad es una forma de amar que pasa del ágape al eros, decían los griegos. Es decir, en lugar de amar al otro queriendo el bien del otro y olvidándote de ti mismo (ágape), transformamos nuestro amor en un amor egoísta, utilizamos al otro para nuestro placer, para nuestro bien (eros): no tenemos derecho a ensuciar al otro con nuestra afectividad. Esto es muy profundo. Ya no respetamos la libertad del otro, con sus defectos, como hizo Dios, incluso con la posibilidad de construirse pecando, fracasando. Tenemos una dificultad grandísima para amar al otro respetándolo».
Primero un ejercicio de transformar en negativa la palabra que designa los sentimientos, emociones y pasiones de la persona. La afectividad no ensucia porque el amor, que es afectividad, no ensucia. Y el pecado no construye a nadie, pero ya lanzado a decir mentiras, ¿para qué pararse?
Así, tras la palanca del destruyente error del hijo, Kiko pasa a afirmar que si no aceptas el pecado del otro es que no lo respetas. Y que eres un afectivo, que debe de ser peor todavía.
Quizá tal sarta de mentiras le haya dejado con la defensa baja, porque a continuación reconoce que su convivencia con Mario no es idílica:
«Muchas veces, estando con el P. Mario las veinticuatro horas del día, me encuentro hablando con violencia y digo: “¿Pero por qué me irrito tanto? ¿Por qué soy tan violento con él, qué me ha hecho?”. He visto que empiezo a no aceptar su lentitud, no acepto como es: ¿por qué no lo acepto? ¿Por qué no lo acepto tal como es? Me gustaría que me aceptara más, quiero decir que ahora estoy cansado, quisiera más afecto y no lo encuentro y empiezo a juzgar, y así constantemente».
Vaya, también el tronante Kiko es un afectivo y reclama afecto a los demás. ¡El eros! En lugar de amarlos como son quiere servirse de ellos.
«Entonces, ¿cómo se cura esto? Se cura rezando: “Señor, tienes razón, soy un pecador: ¿por qué me irrito tanto? ¿Por qué soy tan violento? Señor, ten piedad de mí, ten piedad de mí”. Entonces voy y le pido perdón: “Discúlpame, Mario, esta mañana grité, soy un estúpido”. Nos pedimos perdón y todo vuelve a estar bien».
A ver, si el violento y agresivo fue Kiko, ¿por qué tiene que pedir perdón Mario? Praxis del kikismo: que la víctima pida perdón al verdugo.
Y la cosa no acaba aquí:
«También debemos aceptar nuestra imperfección, que todos somos pobres. ¡Pero qué difícil es amar al enemigo!».
Ya que lo que relataba era una pelea con Mario, todo apunta a que cuenta a Mario entre sus enemigos. Kikismo en estado puro. Pero no está mal que reconozca que tras tantísimos años de convivencia ni se aman ni se aguantan y solo el interés les mantiene juntos. Es que sin afectividad no hay amor.
Aquí Kiko cambia de tema para dejar claro quién manda en las misio ad gentes:
«El Señor ha dicho: “si sois perfectamente uno, el mundo creerá”. Entonces, si nosotros mandamos una missio ad gentes, ¿creéis que esos pobres hermanos, llenos de defectos, serán perfectamente uno? Se critican, se juzgan: ¿hemos fracasado? ¿A qué juego estamos jugando? No, tal vez hagan una penitencial y se pidan perdón: "¡Dejemos de juzgarnos!"».
Aquí se mezclan conceptos. No hace falta una penitencial para pedir perdón, lo que pasa es que Kiko es un teatrero y le encanta que en mitad de una celebración alguien se levante y haga una confesión pública, que no es un sacramento, y mejor si además se arrodilla y pide perdón. El valor sacramental de tal teatro es cero, pero los neocatecumenales son adiestrados para actuar así.
Y sigue el teatro:
«Mirad a ese pobre hombre al que su esposa lo abandonó, era ingeniero y ahora vive en la calle con una manta, está destruido al ver que su esposa e hijos lo han abandonado. ¿Y por qué no te ha sucedido a ti? ¿Porque a ti no? ¿Te crees que eres mejor que ese? ¿Y has visto a ese otro, con el matrimonio destruido? Mira a ese otro, y a ese otro... mira, mira a tu alrededor. ¿Y tú no? ¿Crees que eres mejor que los demás? ¿Crees que eres mejor que alguien? No es verdad, todos somos pobrecillos».
Me llega muy hondo lo del ingeniero que ha dejado de serlo… ¿Será que el título era de la esposa y no del marido? Bromas aparte ¿qué tendrá que ver que los mandados por Kiko a missionis ad gentes se dediquen a juzgarse, maldecirse y morderse entre ellos con el ingeniero abandonado?
Es un intento de desviar la atención. Ha reconocido que los neocatecumenales mandados por él son un desastre, ahora pretende hacer ver que todos los demás están peor. Porque en el país de los ciegos el tuerto es el rey.
«Bien, es dificilísimo amar al enemigo pero no tiramos la toalla, no nos rendimos, confiamos en que si el Señor ha llamado a las familias y las ha enviado a una missio ad gentes en un país, está bien».
En resumen, se desentiende de toda responsabilidad y hace oídos sordos a las noticias de puñaladas traperas entre miembros de las missionis ad gentes, que los dañados le reclamen a diosito, a quien hace responsable de unos envíos que un poco más arriba ha reconocido que han sido por mandato expreso suyo, no de Dios.
Jesucristo enseña qué el otro es tu prójimo y Kiko Argüello y su invento camino neocatecumenal enseñan qué el otro es tu enemigo!
ResponderEliminarA ver con quién os quedáis??, a quién le creéis.
Eso es sencillamente MENTIRA Y MANIPULACIÓN
Eliminar¿Dónde está la mentira, acusador? ¿Dónde la manipulación? Señala, señala... No podrás.
EliminarDe aberrante predicación de kiko retorcida, ambigüa y llena de sofismas parte la displicencia con relación al pecado, se vale de la imperfección del hombre y se su ejemplo de los niños que cometen errores para dar rienda suelta al pecado de una manera descarada y cínica, es por eso que en el camino alardean de una manera extraña y enferma el hecho de ser los peores de los pecadores y los últimos peores de los últimos pero que no pasa nada porque Dios te quiere así pecador.
ResponderEliminar¿Posibilidad de construirse pecando? ¿Eeeh? Yo flipo.
ResponderEliminarDe ahí que en kikónides hayan convertido el pecado en "una gracia". Cuanto más pecan, más edificados se sienten.
No te digo lo que un kikocura catequista nos interpreto y nos explico sobre la frase del pregon pascual. "oh feliz culpa que mereciste tan grande Redentor", una completa herejía para irse a de para tras.
EliminarPor lo menos en esta zona los catequistas (que en realidad y por muchas razones no son catequistas) siempre han enseñado que es necesario pecar y se remiten a la frase que comentas (oh feliz culpa). Una de dos, o esta gente está muy enferma y retorcida o son ángeles de luz.... demonios.
EliminarcRISTO NO AMA EL PECADO PERO SI AL PECADOR. ¿Tu no te consideras pecador? ¿eres perfecto? venga ya....
Eliminar¿Te crees que Cristo ama más a quien más peca? ¿Por eso te esfuerzas tanto por ser el último y el peor de todos? Venga ya...
EliminarNoni, ¿a ti el pecado te edifica? Venga ya...
EliminarY los kikocuras que se ordenan en los redemtoris mater salen a enseñar las herejías y los errores que le aprenden a Kiko. Que horror
ResponderEliminarLa novedad del CNC es que el pecado te edifica, no seas moralista deja de tratar de convertirte repiten los kikotistas, ya Dios cuando lo vea bien os dará la conversión... dicen.....
ResponderEliminarEsta gente trae una nueva doctrina, una nueva ideología.. vaya vaya...
El camino neocatecumenal nunca ha sido perseguido, siguen las denuncias en YouTube a esté movimiento que simula ser perseguido cuando esta siendo corregido y denunciado por sus graves errores.
ResponderEliminarhttps://www.youtube.com/live/7WFYXQiWqPA?si=8tb0xik7Z5Fxrro8
Si es así, pronto saldrá a la luz pública el estudio del camino, del que hablan en el video; bien por el dueño del canal de youtube que no permitió que los neocatecumenales le cerraran el canal!
EliminarEl tipo interpreta todo inclusive peor que los protestantes, sí, estamos de acuerdo, es una monumental falacia para justificar de una manera torcida el pecado, todo muy lejos de la revelación de Dios, del Magisterio de la Iglesia Católica y de la Sana Doctrina. Según los inventos de kiko el adulto es aquel que no hace la voluntad de Dios (peligrosisima interpretación) tal cosa no puede venir del Espíritu Santo!
ResponderEliminarkiko-
"¿Por qué te hace sufrir? Por tu orgullo, porque no respetas que el otro pueda cometer errores. El error de un hijo te destruye: ¿por qué? ¿Tienes tanto orgullo que no permites que tu hijo cometa errores? Ya sabéis todas estas cosas mejor que yo"
Por eso no soportan hablar de Santidad y conversión, para la conversión y para la Santidad también tienen sus propias definiciones retorcidas.
En conclusión según la predicación ambigüa del kilo no tener orgullo, no ser orgullo es permitir que tu hijo cometa errores.... esto lo traspola a las comunidades, no ser orgulloso es permitir el pecado y pecar. Lo anterior esta perfectamente analizado en varios libros que han salido a la luz pública revelando los engaños y errores de la secta camino neocatecumenal.
EliminarQue predicación tan astuta y sutil, con parte de verdad y al mismo tiempo con errores garrafales; este tipo de predicaciones torcidas van directo al subconsciente, el humilde el que no tiene orgullo es permisivo con el pecado, y no pasa nada porque Dios te quiere pecador,, huppp
EliminarSaludos, no olvidéis otra de las muchas frases de cajón de Kiko y sus neocatecumenales, frases de cajón con doble sentido y con tentación incluida, en las cuales es obvio que le hacen apología al pecado: "entre más pecador seas Dios te quiere más"
ResponderEliminar«Entonces, ¿cómo se cura esto? Se cura rezando: “Señor, tienes razón, soy un pecador: ¿por qué me irrito tanto? ¿Por qué soy tan violento? Señor, ten piedad de mí, ten piedad de mí”. Entonces voy y le pido perdón: “Discúlpame, Mario, esta mañana grité, soy un estúpido”. Nos pedimos perdón y todo vuelve a estar bien».
ResponderEliminarY donde quedó el SACRAMENTO de la penitencia, la confesión, la absolución de los pecados??
Este tío es tan prepotente que se cree que puede hacer lo que le da la gana...y lo peor, le acompaña un tipo que siempre fue un mal sacerdote y que sin pudor confesó haber descubierto la fe en el Kkamino.
Aberrante.
Lázaro
Dicen los Karteristas que un cristiano no debe decir: "Discúlpame" sino: "Perdóname". El Kuervo ¿No es cristiano?
ResponderEliminarObvio que no, no pasa de ser kikiano.
EliminarContradice sus propias enseñanzas.
EliminarMucha razón M, cuantas veces escuche en el 2do escrutinio… “ve a pedir perdón a tu marido infiel”, no disculpas, porque el cristiano pide perdón. Kiko se enreda en sus propias catequesis, es un hombre extremadamente raro, y el más juzgador de todos, pero bueno, yo ya me cansé de corregirlos en los canales de YouTube, son caballos cocheros, todo es como ellos lo ven, solo me queda orar por ellos. Solo Dios puede mostrarles la verdad.
EliminarHay que ser conscientes de que la verborrea de Kiko es para llenar fardos pesados que cargar sobre las espaldas de los demás, pero no de aplicación para sí mismo. Kiko no da el diezmo, no hace el trípode, no obedece a nadie, no pide perdón a quien ha juzgado, no ve prójimos sino enemigos, no escucha, no atiende a razones y jamás jamás reconoce haber cometido un error.
EliminarEso es para los demás, no para él, que es muy sensible.
«¿Por qué te hace sufrir? Por tu orgullo,"......
ResponderEliminar"El error de un hijo te destruye:"
"¿Tienes tanto orgullo que no permites que tu hijo cometa errores? "....
«Amamos muy mal, no tenemos derecho a ensuciar a los demás con nuestra afectividad, ".....
ETC
Resumen práctico a la de tres:
"Se critican, se juzgan: ¿hemos fracasado? ¿A qué juego estamos jugando?"
Punto primero: Kiko usa verbos muy duros, porque su burda manera de ver la vida es palurda a más no poder. Como además es un egoísta integral, proyecta en los demás sus derivas mentales, extravíos evidentes a poco que se analice su contradicción perpetua.
Todo a fin de cuentas es un "juego" para el tipo, y se le escapa alguna vez esta terrible verdad. El problema es que los pobres adeptos hacen como que compran todo el lote de estupideces y mentiras, cuando en realidad acaban optando por poner en práctica lo que creen conveniente, pero eso sí, proyectan sus deseos de cumplimientos desvariados en sus homólogos, a los que se atreven a llamar hermanos, tratrándolos a patadas muchas veces..... uno de los resultados de tanta frustración.
Que la incongruencia, la verborrea desacertada, la falacia, y otras hierbas malolientes, sean evidentes a todas luces, no consigue hacer mella en los ánimos neo fantasmales, pues el caos reinante se supera instalando el totalirarismo que rige el Kkmino. La confusión adquiere tintes de drama cuando alcanza las parcelas de las vidas afectadas por la insistente privación de los afectos..... es decir, Kiko se ama a sí mismo, y pare usted de contar, pero no contento con el desaguisado, pretende que todos dejen de amar a todos, y nunca olviden dejar de tenerse en cuenta a ellos mismos...... "Locualo" trae consigo disociacones de la personalidad, pues queriendo el bien, es el mal lo que se encuentran en las manos.
Pues ¿Qué es el bien, según KIKO? La nada más el pecado. En suma: cero patatero.
Y digo yo, un poner ¿Para esa terrible desgracia Creó Dios al ser humano?
Los infiernos de Dante son peladillas al lado de los infiernos propuestos para las vidas de sus adeptos el iniciator number one.
-sepul-
Los pseudocatequistas del camino son peores que su amo kiko, los que están en esta parroquia (y es seguro que todos) lo único que les falta decir es que tienen el don de la infalibilidad y que hablan ex chatedra, al qué se atreva a hacerles una corrección fraterna enseguida os dicen que vais de parte de satanás o algo así, o dicen que los están persiguiendo; esta gente no responde al saludo, caminan como pavos reales, miran a los demás por encima del hombro y otras actitudes parecidas, jamás aceptan qué se equivocan; La soberbia, la astucia y la irresponsabilidad de esos pseudocatequistas no tiene límites, en alguna oportunidad que no supieron como afrontar su responsabilidad ante un mal consejo que dieron a un hermano no tuvieron otra cosa que responder que: el "espíritu santo" permite que nos equivoquemos. Como veis lo anterior es la muestra y la prueba de la falsedad y astucia de esos sinvergüenzas qué ni siquiera deberían llamarse catequistas porque no están siendo formados por la Iglesia Católica como lo ordeno el Papa Francisco; ellos están formados pero en los errores de kiko/carmen/pezzi y todas las mañas de su invento camino neocatecumenal.
ResponderEliminarExactamente así es anónimo 3:03, los kikotistas cuando se equivocan le hechan la culpa o a Dios o al diablo,,, jajajajaja patéticos.
EliminarCon mi esposo pasamos 16 años en esa secta y jamás un catequista reconoció sus errores, que se equivocaba, o que era pecador o pedir perdón mucho menos por supuesto, ellos son más que el Párroco más que el Obispo más que todos, seguramente esos falsos catequistas de la secta camino neocatecumenal mean agua bendita
EliminarA mi me consta que no saludan! Cuando hacen catequesis iniciales no muestran su verdadera cara, cuando vas al 2do escrutinio se muestran tal cual son! Malvados y perversos con sus catecumenos, dicen que así es el amor con disparates y hacerte entrar en la verdad, diciéndote cada cosa despectiva e insultos. No creo que nuestro señor trate así a su hijos, de corregir nos corrige, pero lo que hacen los carteristas es falta de respeto! Ah me olvidaba cuando ven que un hermano es pudiente, no lo sueltan están detrás de él, pero cuando no les sirve, para ellos mejor si no sigue en el camino.
EliminarLo peor de todo el juego psicológico está en el deseo de sustentar la mayor de las Herejias y base de toda Apostasía que consiste en la frase "El otro es Cristo". Esto por si solo constituye un Antropocentrismo espejo, es decir, crea una deidad en el prójimo donde desaparece la obra de Redención, es un sutil engaño que solo puede venir de los mismos infiernos.
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