lunes, 30 de noviembre de 2015

De la convivencia de inicio de curso 2015 (y V)



Terminada la homilía empleada para lucir el repertorio de mantras del Camino, continúa la Misa. Y nada más finalizada, en la misma sala multi-uso y ante la misma mesa donde se ha consagrado el pan y el vino, se ponen a hablar de cosas mundanas:
 No tengo palabas para expresar la emoción que siento al saber que las convivencias del CNC están en el Evangelio. ¿Y las bolsas? ¿Y los hoteles que hay que pagar? ¿Y la Fundación Familia de Nazaret?


Lo mejor, digo, lo “pedor” está por llegar: la descripción de cómo quieren cambiar la Iglesia para hacer de ella lo que nunca ha sido.
A continuación el argumento más pueril que he leído nunca para convencer a las señoras mayores para que vayan a hacer de chachas. ¿Acaso las parejas gays no tienen madres o empleada interna? Lo que son capaces de decir para conseguir que las señoras se apunten a ser chacha gratis total.


(¿continuará?)


sábado, 28 de noviembre de 2015

De la convivencia de inicio de curso 2015 (IV)



Gracias a Aurora, en esta entrada se siguen sacando a la luz algunas de las cosas que se cuentan en las convivencias del Camino.
A continuación, las hojas tal cual son vendidas por el CNC a los equipos encargados de transmitir la llamada convivencia de inicio de curso.
De la página 66:


A la vista está que empieza la cosa con una mención a la Pascua, la más grande celebración del cristianismo, que para ciertas sensibilidades en poco o nada se diferencia del paso por una convivencia. Vamos, lo mismo lo mismo y casi que no hay quien lo distinga.
Se continúa haciendo uso del nombre de Cristo para uso y consumo de un grupillo. Acto seguido, a hablar de uno mismo, de lo atareado que está, de las muchas cosas que tiene que hacer, porque en el Camino todo se tiene que hacer de forma moralista y por puños. 
Y por fin, como prueba de madurez total, se concluye pidiendo aplausitos para la enfermita Carmen.
La página 67 (partida en dos mitades para que se vea mejor), arranca con la invitación a los ecos, invitación que resulta que no hace el presidente (José Luis del Palacio, catecúmeno de La Paloma), sino el que corta el bacalao, porque en el Camino, los obispos se callan ante sus kikotistas. Y el que corta el bacalao aprovecha para hacer lo que hace siempre: hablar de sí mismo y presentar como si fuesen actuales cosas que pasaron hace más de 40 años (y luego dicen de las batallitas de los abueletes).


No sé qué libros litúrgicos usarían en esa Misa celebrada el 20 de septiembre en Porto San Giorgio, pero lo que dice la oración colecta de la Iglesia Católica del domingo XXV del tiempo ordinario es:
¡Oh! Dios, que has puesto la plenitud de la ley en el amor a ti y al prójimo, concédenos cumplir tus mandamientos para llegar así a la vida eterna. Por Jesucristo, nuestro Señor. 
Debe ser por aquello de que en el Camino unas veces se aferran a la letra (como para defender que ellos reciben la comunión de pie) y otras veces interpretan a su antojo la letra que ha fijado la Iglesia, que es la única con autoridad para hacerlo.
Por eso advierte monseñor Del Palacio que ellos son incómodos también en la Iglesia, dejando claro que ellos son otra cosa y no parte de esa Iglesia a la que incomodan. De paso, teniendo en cuenta que está haciendo referencia a Sabiduría 2,12.17-20, deja a esa Iglesia que dice que incomoda (¿estaría pensando en sacerdotes chamacos concretos?), a la altura del betún.
Sigue:
La primera cita que hace el obispo del Callao es de la segunda lectura (St 3,16-4,3). El Evangelio fue Mc 9, 30-37, pero la segunda presunta cita del obispo no procede de ese ni de ningún Evangelio… cómo no sea que está citando al santo sin espaldas en algún documento arkanísimo que nadie salvo ellos conocen...
Lo demás es el mensaje de siempre: estás en la muerte y sólo el Camino te puede devolver a la vida y la época es apocalíptica, la familia agoniza y el hombre se aproxima a su destrucción. Lo mejor es que habla a una asamblea en la que "todos hemos terminado" el Camino, lo que no es óbvice para que constate que todos están en la muerte.
Lo que prueba que el Camino no funciona. Y precisamente porque sabemos que no funciona, la mención a la humildad como característica de los itinerantes es de traca.
Y no podía terminar sin la retahíla de recurrentes mantras del CNC: "si alguno tiene hambre, como todos tenemos, comamos y bebamos el Cuerpo y la Sangre de Cristo" (porque lo es estar en la debida disposición o lo del ayuno eucarístico no está escrito para ellos, sino para los religiosos de Misa de 12 que tienen temor de Dios), "da el diezmo", "toma tu cruz, odia a tu padre y a tu madre"... Pretendiendo que sólo quien cumpla lo que ellos dice tendrá acceso al cielo.
 

(Continuará)