Mamotretos varios

jueves, 13 de julio de 2023

El neocatecúmeno que me escuche se salvará

 

Hoy traigo a los neocatecúmenos una palabra de ayuda. 

 

Es el diálogo de los fariseos con Jesucristo; mirad que está hablando con gente religiosa, como los del Camino. ¡Jesucristo habla con una valentía enorme! Para intentar salvarlos les denuncia sus mentiras, sus hipocresías, sus engaños… Esta palabra, aunque parezca un poco fuerte, es para nosotros hoy; la necesitamos para   poder llegar a la Verdad. Para poder recibir las gracias y la salvación que nos trae Jesucristo, es necesario ver la profundidad de nuestra realidad de pecadores, reconocer la maldad que hay dentro de nosotros, porque lo único que desea el Señor es llevarnos a la verdad y salvarnos. ¡Ánimo, hermanos!

El pan de la Eucaristía es ázimo, no tiene levadura, porque la levadura infla el pan en el horno y ese hinchazón es la soberbia del faraón. ¡El faraón se cree dios! Ésta es la levadura que debe ser destruida. La levadura está en relación con el pecado original, el primer pecado que ha cometido el hombre: el demonio invita a Eva a ser dios. Entonces lo que impide que tú te conviertas es la levadura que tienes todavía dentro: la levadura del faraón, y hay que eliminar de nosotros la levadura del faraón, de la malicia, de que tú seas dios, del gran pecado: el orgullo.

¡Animo! Os invito a dejar la levadura, la soberbia del faraón, que te puede     hacer creer que hoy no te puede salvar una cosa tan pobre como la verdad puesta al descubierto en un blog. Hoy hay un misterio: el misterio de tu conversión. Dios querría que a través de mis pobres palabras se abatiese en ti el muro que impide que Dios pueda    ser Uno contigo. Solo hay un medio para ser uno con Dios: la Iglesia.

¿Qué es lo que te impide hoy escuchar? El demonio: la levadura de los fariseos de la que habla Jesucristo. Porque en la Escritura todo está unido: la soberbia del faraón, que se ha hecho dios y no soporta otro dios. El pecado original,    la levadura que llevamos dentro, es hacernos dioses: el hombre se hace dios de sí mismo. Es el problema que existe hoy en todo el mundo y que tú también tienes, aunque estés en el Camino Neocatecumenal. Tienes una levadura que te hace dios de ti mismo, y eso te impide escuchar. Esta levadura tiene un padre: el demonio.

Recordad lo que dice Jesucristo cuando dialoga con los fariseos: “Vuestro    padre es el demonio”, “Si sois hijos de Abraham, haced las obras de Abraham; pero intentáis matarme, a mí, que os he dicho la verdad que de Dios”. Atención    a esta palabra: Verdad.

Escuchad esta concatenación: levadura maldad verdad. Atención, porque San Pablo habla de levadura y de verdad. Entonces, ¿por qué somos hipócritas? Mirad que está hablando con gente religiosa. Nosotros no escuchamos    porque tenemos dentro la levadura del faraón. ¿Y cuál es la levadura del faraón? La mentira. ¿Qué mentira? Que eres dios. El demonio dice a Eva: “Seréis como Dios”. Y viendo Eva que el árbol era apetecible a la vista, es invitada a ser como Dios, a comer: “Dios sabe muy bien que el día que comas, serás como Dios porque  conocerás el bien y el mal, y podrás decidir por ti mismo”. Esto es lo que significa  hacernos nosotros dioses.

Esto os ha pasado a vosotros, catecumenales.

Entonces hoy nos dice Jesucristo: “¿Por qué no escucháis mis palabras? ¿Por qué mi palabra no penetra para formar dentro de vosotros este cuerpo que hace la vida nueva? Tenéis por padre el demonio y escucháis a vuestro padre que os dice: ‘Tú eres dios’, o sea, tú eres autónomo moralmente”. ¡Escúchame bien, presbítero! ¡Escúchame bien, katekista! El demonio te dice que eres autónomo,  que puedes hacer lo que quieras. No te dice que el bien está en Dios.

Atención porque esto es muy profundo. 

Arángel Gabriel, dicen

Hay otro ángel que Dios ha enviado a la Virgen María. Un ángel anuncia a una joven una buena noticia. Esta noticia tiene el poder de fecundar a quien la escucha, de realizarse en quien la acoge. Muchos, como no escucháis, necesitáis un cáncer, la vejez, humillaciones. Porque la levadura que llevamos dentro, la habéis cogido de nuevo a pesar del Camino; porque los años de Camino    no os confirman en gracia, sino todo lo contrario.

El neocatecúmeno que me escuche hoy es como la Virgen María, y yo soy para él como el arcángel   Gabriel, porque os anuncio una buena noticia: ¡Nuestra salvación!

 

Y si a alguien le escandaliza la frase anterior, que sepa que la puede encontrar, como todas las demás de esta entrada, en el tostón publicitario de la Pascua 2023.

Así que menos juicios y más obediencia, que para vosotros soy como el arcángel Gabriel.

 

3 comentarios:

  1. Casi me convierto.

    Excelente prédica muy konvincente.

    Pero ya sabemos que esta prédica sólo tiene efecto durante las konvivencias y los anuncios kerigmáticos y que al final no sirve para nada de nada en la vida cristiana. Su efecto es nada más kikotínico, para seguir durmiendo.

    Y seréis felices.

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  2. Como mera curiosidad esto es lo que dice el ChatGPT cuando le pregunté acerca del Camino Neocatecumenal. Soprendentemente exacto a mi parecer.

    Explique como experto religioso los perjuicios que puede ocasionar el Camino Neocatecumenal a las personas y a la Iglesia Católica en general.

    Como modelo de lenguaje AI, puedo presentarte algunos posibles puntos de preocupación que se han mencionado en relación con el Camino Neocatecumenal. Es importante tener en cuenta que estas preocupaciones no son compartidas por todos y pueden variar según las perspectivas individuales. A continuación, se presentan algunos posibles perjuicios que se han mencionado:

    Fragmentación de la comunidad parroquial: Algunas personas han expresado preocupación de que el Camino Neocatecumenal pueda llevar a la fragmentación de la comunidad parroquial. Esto se debe a que los miembros del Camino a menudo se reúnen en grupos pequeños dentro de la parroquia y pueden tener su propia liturgia distintiva, lo que podría dificultar la colaboración y la unidad entre los diferentes grupos y movimientos dentro de la Iglesia.

    Estilo litúrgico controvertido: El Camino Neocatecumenal ha sido objeto de debate en relación con su estilo litúrgico. Algunos críticos argumentan que su enfoque en la simplicidad y la participación activa puede llevar a una falta de reverencia y solemnidad en la celebración de la Eucaristía. Esto ha generado preocupaciones sobre la coherencia con las normas litúrgicas de la Iglesia Católica.

    Tensiones con los párrocos y obispos: En algunos casos, ha habido tensiones entre los miembros del Camino Neocatecumenal y los párrocos o obispos locales. Esto puede deberse a diferencias en la comprensión y la práctica de la fe, así como a cuestiones relacionadas con el liderazgo y la autoridad. Estas tensiones pueden afectar negativamente la relación entre los miembros del Camino y las autoridades eclesiásticas.

    Aislamiento de otros católicos: Algunos críticos argumentan que el enfoque de formar comunidades cerradas dentro del Camino Neocatecumenal puede llevar al aislamiento de otros católicos que no son parte del movimiento. Esto podría afectar negativamente la participación y el sentido de pertenencia en la comunidad parroquial más amplia.

    Excesiva dependencia del fundador: El fundador del Camino Neocatecumenal, Kiko Argüello, ha tenido una influencia significativa en el movimiento. Algunas personas han expresado preocupación de que esta dependencia excesiva de un líder carismático pueda llevar a una falta de autonomía y discernimiento crítico entre los miembros del Camino.

    Es importante destacar que estas preocupaciones no se aplican a todos los seguidores del Camino Neocatecumenal y que las experiencias pueden variar. Además, la Iglesia Católica ha tomado medidas para abordar algunas de estas preocupaciones y ha establecido directrices para la implementación del Camino Neocatecumenal dentro de las parroquias.

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    1. Es evidente que la IA sabe poco del cnc, es decir, solo va de oídas, por eso se deja temas como la tolerancia al maltrato intrafamiliar, las muchas bolsas negras de dinero B, la mala formación de los presbikikos, las herejías doctrinales... Y con todo, es claro que no alienta a acercarse a ellos.

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