"G Man". El último anti héroe. Parte one

                Hubo un tiempo en que por verano aquí en el blog nos permitíamos alguna entrada de broma, como en los desagradables días que nos toca vivir todo es o neo, o post, en este post verano a lo peor toca dejar una kagad, digo, una broma sin ánimo de nada:

SUCEDIÓ EN LA ANTIGÜEDAD.. (O hace muy poco, no se sabe.. a lo mejor ni pasó)

                           No eran tan malos tiempos aquellos, la verdad que no, aunque hubiese personajes proclives al desastre por vocación, a principios apocalípticos por adelantado,  a echar las suertes en negativo por costumbre antes de tirar los dados. Un ejemplo claro lo podemos observar en el sujeto central de esta pequeña historieta que versa sobre una demolición anunciada. Long long long time...

Hace ya mucho, en un país de cuyo nombre prefiero olvidarme, corrían y saltaban las generaciones de enchufados, bufones de ninguna corte, chaqueteros varios, en fin, lo de siempre. Medrando por los estrechos pasillos a sus anchas, mientras los de a pie buscaban las habichuelas del presente día en la alacena del ayer, procurando las de mañana. Emigrando a tierras extrañas también los hubo, buscando panes con el sudor de su frente, pero otros, pijitos de medio pelo, desoficiados beneficiados, se permitieron lujazos al alcance de muy pocos, pintando monas.. no de pascua.

                                              Mientras, en coordenadas e instalaciones secretas, los Tipos de la Inteligencia Nacional Absoluta (B.I.N.A) manejaban la información para el contraespionaje, con agentes del tipo Bestiajez, Paletonez, etc. Y, la división Desinvestigación y Desarrollo trabajaba en los laboratorios de la mano del profesor Bacilus Longhi, qué, como estaba como una kabra montesa gozaba de presupuesto ilimitado para sus continuadas aberraciones e invenciones, la penúltima en aquellos días fue someter a una garrapata perruna a una serie de radiaciones peligrosas, e infiltrar en su ADN mezclas de LSD y otras hierbas alucinógenas variadas. De modo sorprendente la garrapata había sobrevivido cuando los anteriores experimentos habían acabado en fracaso sin fin, y más sorprendente aún, se dio a la fuga generando un fenomenal pánico desde el Superintendente al último mono de la BINA...incluidos los agentes, Flipadelo, y Morcillón. Encargados a la postre de la caza y captura de la garrapata modificada... se sabe, si encargas estas cosas a los citados, el Kaos está garantizado. 

                 El susodicho pintamonas tenía afición por la de seis cuerdas, y un cierto gusto por lo estéril, además de una absoluta carencia afectiva que le hacía oscilar sobremanera entre las ideas más radicalmente contrapuestas, y la ninguna acción posible para remediar el desguisado interior que le acompañaba a todas partes. Decidió salir del centro a la periferia suburbial, desarrapado, desaliñado, camuflado entre gentes honradas que en su imaginación le parecieron los últimos de no se sabe qué, pero claro, no hay peor ciego que aquél que no desea ver la realidad, por más que tenga ojos en el kareto.
 

Un mal día lo tiene un cualquiera, y aquella mañana anunciaba malos augurios, tanto es así, que las honradas gentes del lugar le fueron a buscar muy temprano a la kloak, digo, barraka, 

-Vente, que vamos a kurrar-

-¿Eso qué lo qués?

-Tu ven, que los ladrillos esperan..

-Vale, pero solo porque me gusta lo neo, y esto lo parece, al menos para mi.

Al tajo llegaron al despuntar el alba a pesar de tener que aguantar al pintamonas y sus rollos desacertados de si el sol sale por la mañana pa guenos y malos, o se esconde al atardecer porque le da miedo la oscuridad, de si los padres son una figura destructora de la personalidad, de lo malo que es ser honrado por aquello de lo imposible, etc Pobres gentes que tuvieron que dar la razón a la sinrazón, a fin de poder tener la fiesta en paz, es decir, un día lo más normal posible dentro de la anómala situación, así que decidieron no ir a buscar más a tan desnortado personaje, "Una y no más..." murmuraron (hecho que no quedó oculto para G. que tomó nota en su libreto para más adelante dar mala cuenta del detalle inadmisible) 

Pasó el día de trabajo ladrillos pacá, ladrillos pallá, sangraron las delicadas manos que no habían dado palo al agua, con la firme decisión de: "Una y no más..."

                                Nuestra otra protagonista, la garrapata modificada, transitaba huyendo del personal por aquello de los malos recuerdos que le traían los seres de dos patas, y acabó, hete aquí, en la barraka de G, hambrienta, asustada, meditabunda.. Cuando vio y sintió aquél cuerpo yacente en el kamastro, no dudó un instante, mordió con desesperación animal al durmiente, sin saber que aquello era el comienzo de una larga y penosa amistad forzosa. La especie de simbiosis empezó por la fiebre mutua, reciproca, pues la muy necia tuvo la infeliz idea de ir a morder detrás de la oreja, demasiado cerca de la cabeza con funestas consecuencias para "mambos dos".. O quizá no tanto...

G alcanzó más de 85º C. y su cuerpo desprendía energía térmica como para una ciudad. La garrapata, por su parte,  sudaba de lo lindo, maldiciendo entre dientes: 

"¡Seré gafe! Con toda la gente que hay por ahí, con tanta sangre, he tenido que venir a morder a un desangrado (los ladrillos, los ladrillos) que más parece tener horchata que otra cosa en las venas." 

Y lo pedor estaba por llegar.. extrañas ideas aparecieron de perrente en la cabeza de nuestra prota, creyó volverse tarumba de remate (y era cual creyó).

Al mismo tiempo que don pintamonas entraba en el irreal submundo del ácido, y las malas hierbas, con delirios espeluznantes de por medio. Un estupendo, maravilloso, fantástico encuentro aquél, en que dos seres por completo extraños se harían el impagable favor el uno al otro, para siempre jamás. 

La mente de G por fin había encontrado sentido a absolutamente todo lo que ayer no era sino kaos...un desierto, los judíos, faraones, moiseses varios, signos y más signos... sin olvidar darle cuerda a la de seis cuerdas con gallokanturriales. Había que ordenar el desorden..
 

 Super poderes Garrapatiles le fueron suministrados mediante extrañas visiones, se veía a sí mismo instalando sus delirios por todas partes, comiendo de otros, viajando en private jet, durmiendo en five stars, chupando del bote ad infinitum, sin por supuesto volver a tocar un ladrillo en su vida. Solamente faltaba un huésped.. lo suficientemente grande para abastecer tamaña sed, la infinita voracidad que se había despertado dentro del otrora desnortado, apareció un norte, una finalidad, una meta.... Y para mayor infortunio dio la casualité de existir un crucifijo en aquella habitación del pániko, fue así como nació la imperiosa necedad de la turbo predación, y, un slogan que a poteriori hubo de ser retocado:

- hay que hacer garrapatas como yo, que vivan del kuento sin fin, perpetrando chupadas de espíritu y dinero como si no hubiese un mañana-

Klaro, como resulta qué, el huésped a la postre fue la Iglesia, por aquello del ambiente reinante en esas fechas, en aquél tiempo..Y,  los terribles, espantosos delirios que dieron de resultas de la radiación, y el ADN modificado de nuestra es...timada  Garrapata, hubo que interpretarlos a modo, creando una necesidad inexistente. Nuestro timador..es, vino a ser vendedor de humo para esta generación. La mala fortuna a veces se alía con doña casualidad, así pues, toda nuestra mala suerte obedeció sin duda al enkuentro que precedió a todos los enkuentros que luego vinieron... 

                     Otro detalle a tener presente se dio en qué, "es...timada" adquirió la fakultad de aparecerse en sueños y pesadillas a "timador..es", transfiriendo merced a los mismos su naturaleza parásita, con lecciones magistrales de chupa aquí, chupa allá, semper chumpandis. No se puede obviar que los latinajos mezclados con eskupitajos, y revueltos en la neo ensalada aliñada de signos ajenos, obedeció más mal que bien, al kaprichoso deseo de "es..timada", en disfrazarse a veces de judío ultra ortodoxo, y otras, de cardenal lleno de cardenales. El karnaval de Venecia parecía un juego de niños comparado con la extraña manía de doña garrapata. Pero claro, después de morder ciertas orejas, vaya usted a saber qué diantres pasa por esas cabezas....

Flipadelo, y Morcillón, recorrían las calles y plazas buscando su objetivo, su misión imposible acabó siendo eso mismo, imposible. 

Advertencia severa:

CONTINUARÁ:

-sepul-