Mamotretos varios

domingo, 14 de abril de 2024

Anuncio publicitario. Pascua 2024 (II)

 

Tras el pézzimo repaso a la situación social, el caducado Mario pasa al tema de la situación de la Iglesia. Solo menciona dos hechos:

«Dentro de la Iglesia, la situación es preocupante debido a nuevas corrientes teológicas más liberales en conflicto con la Tradición sobre las principales Verdades de la fe, con la posibilidad de un próximo cisma dentro de la Iglesia alemana -al menos en parte- y con la ruptura del diálogo ecuménico con el Vaticano por parte de las Iglesias ortodoxas».

Se acabó. Deja la idea de que nada de eso tiene que ver con el CNC y que allá se las componga Dios para arreglarlo. De hecho Mario concluye con: «Digo esto porque … en la celebración de la próxima solemne Vigilia Pascual esperemos que pase con fuerza el Señor Jesucristo resucitado».

Siguiente punto del guion: descubrir a la inmadura audiencia los planes secretos de Dios.

«Dios Creador y Padre, en sus inescrutables planes, había hecho un Plan de Salvación para la humanidad, veremos a continuación que los hombres han hecho otro. El plan de salvación, que conocemos bien, después de la expulsión del Paraíso Terrenal, Dios ha realizado este diseño progresivamente en el tiempo y el espacio en que vivimos, por medio de prodigios milagrosos, que recordaremos y haremos presentes en la Vigilia Pascual a través de las diversas lecturas».

No. El caducado Mario se equivoca. Dios fue anunciando y avisando de su plan progresivamente, pero su realización ha sido en Jesús, y ha sido de una vez y para siempre. Ya está hecho y completo. No le falta nada, no tiene nada que progresar.

Y cualquier intento de hacer ver que el CNC o la comunidad o Kiko son una prolongación de un diseño progresivo es una falsedad.

Pero dice Mario que no, que el plan de Dios todavía no se ha cumplido, que solo ha habido un adelanto, una intervención divina al objeto de provocar en el ser humano una esperanza que dé sentido a su vida, porque se va a pasar toda la vida esperando, ya que dice Mario que el cumplimiento de los planes de Dios no tendrá lugar hasta el final de los tiempos.

Para mí que Mario se lía entre el plan de salvación, que ya está cumplido (Jn 19,30) y el juicio de Dios.

El caso es que en medio de esa ocurrencia sobre el plan inconcluso hasta el día de la parusía, el caducado Mario intercala lo siguiente: «para nosotros, los cristianos, pero también para los judíos, la vida tiene un principio y un final, a diferencia de las religiones naturales para las que todo es cíclico».

Y añado yo: también para los musulmanes de Palestina y del resto del mundo, para las religiones nórdicas, para las religiones precolombinas, para los ateos…, es más, sobre todo para los ateos. Qué manía de mentar a los judíos hasta en la sopa.

A partir de aquí, Mario desbarra y deja claro que no comprende (o si lo comprende, engaña) que la Nueva Alianza sustituye a la Antigua. En referencia a su pretensión de que el plan de Dios está incompleto y se sigue realizando aquí y ahora dice:

«Por este motivo el Señor mandó a Moisés establecer cada año la fiesta, la solemnidad, que ha entrado en el calendario judío hasta el día de hoy, y que, después de la venida de Cristo, entra en nuestras fiestas y reflejan el cumplimiento en Jesucristo».

Esto ya lo comenté en la entrada del primer día de la octava de Pascua, pero repito: La Pascua cristiana NO ES la pascua judía. NO ES la misma fiesta, por eso no son coincidentes en el tiempo ni respetan las mismas tradiciones ni responden al mismo mandato.

Los judíos siguen anclados en las instrucciones que Dios dio a Moisés en el desierto, en cambio, los cristianos han abandonado esas instrucciones caducadas -como Mario- y se guían por las que Jesús dio a sus discípulos en la Última Cena.

Por tanto,  NO SON LA MISMA FIESTA Y NUNCA LO HAN SIDO.

Y a los verdaderos creyentes judíos les molesta la confusión que propalan tipos caducados como Mario.

Hay en el errado discursete de Mario otra frase que requiere corrección. Dice él refiriéndose a Jesús: «aprendió a obedecer a través de lo que sufrió».

¿No dicen los neocatecumenales que el sufrimiento viene del pecado, de apartarse de Dios? Entonces, no puede ser que Jesús experimentase la muerte del pecado y que por el sufrimiento que trae consigo el pecado, escarmentase y aprendiese a obedecer. Es un error. Eso puede aplicar a Mario, pero no a Jesús.

De Jesús se puede decir que obedeció a pesar de saber que sufriría, pero no al revés.

Tras esto llega Mario al último punto del guion, el más esperpéntico, pues su tesis es que el plan del hombre es utilizar la IA para generar otro “plan de salvación” a su imagen y semejanza.

«La cultura que se está extendiendo hoy en día presenta esto [la religiosidad] como un mito del pasado, somos retrógrados, especialmente debido a la rápida evolución de la Inteligencia Artificial que está creando, en nuestra cultura y sociedad, un vacío alrededor de nosotros los cristianos, promoviendo, especialmente a través de los medios de comunicación, nuevas alternativas a nuestra fe en Jesucristo, un nuevo plan de salvación».

A saber qué clase de pastillas toma Mario, porque a partir de aquí va cuesta abajo y sin frenos.

Cita al Papa para dejar caer la insinuación de que los científicos están en condiciones de “infundir espíritu” en la materia inanimada, como si el espíritu se pudiese decantar en un alambique para luego inyectarlo donde convenga; confunde de forma interesa secularización con ateísmo; pinta el transhumanismo como si la mitad del vecindario de todos los presentes fuesen mutantes transhumanos con capacidades ocultas o clones, porque también asegura que ya hay por el mundo clones humanos indistinguibles del humano original del que proceden. Y tras pintar el escenario de ciencia-micción dice:

«Hablo de esto porque siento en todo esto una amenaza a nuestra fe, sobre todo para los más jóvenes».

Un poco de seriedad. Los jefazos neocatecumenales han tenido que reconocer que los adictos a la pornografía son legión dentro de las comunidades, los hay que se drogan, que pecan contra el sexto mandamiento, que practican el engaño y la falsedad para complacer a los kikotistas..., tienen montones de problemas reales, pero Mario les cuenta una película de ficción para que no piensen en la realidad.

Pues más triste que este panorama absurdo e irreal que pinta Mario son las propuestas que aporta para “proteger a nuestros chicos”.

En primer lugar dispone que Chat GPT es una herramienta del demonio, también la IA es pariente próxima de Satán pues según Mario «la inteligencia artificial crea efectos de realidad aumentada de rostros y cuerpos, distorsiona las fotografías o incluso crea imágenes completamente falsas, engañando a los usuarios. Para la campaña en Estados Unidos, Joe Biden o quien trabaja para él ha creado mensajes falsos que se difunden para ganar votos».

Es muy cómodo echar la culpa a la IA, la realidad es que los programas de edición de imágenes son programas con cero patatero de inteligencia, y la manipulación de noticias es un actividad humana más antigua que las pirámides.

Por cierto, el caducado Mario sabe mucho de manipulación de noticias, como en el siguiente ejemplo:

«Otro fenómeno típico de nuestro tiempo son los llamados hikikomori de Japón: jóvenes que se autoexcluyen de la vida social, se encierran en casa o incluso en su propia habitación, cortando toda relación con el mundo, a veces incluso con el virtual. En Japón, según la última encuesta nacional realizada en noviembre de 2022 por el Gobierno, hay alrededor de 1,5 millones de jóvenes que viven así, les llaman murciélagos porque trabajan de noche y duermen de día, no salen. Este fenómeno también se está expandiendo en Europa -España e Italia- y especialmente en América del Norte.

Es decir, no se produce allí donde o sales a buscarte las lentejas o te mueres de hambre. Pero Mario manipula la noticia y redondea para arriba, incluye en el saco de “jóvenes” al total de hikikomori de todas las edades y además ignora que son un porcentaje pequeño en el total de población de Japón. Y que dan muchos menos problemas que los adictos a sustancias o al porno, dicho sea de paso.

Pues aún hay más. Mario se saca de la manga que la IA sumada a la física cuántica, la física de las partículas y su imaginación enfebrecida producen aplicaciones para uso de los chavales que les introducen en la cuarta y la quinta dimensión, lo que fascina y subyuga a los jóvenes, claro. Lo que no me explico es que ya no somos jóvenes no nos hayamos enterado antes de la posibilidad de acceder a esas dimensiones.

Chorradas pézzimas al margen, dice Mario que los pobrecitos niños se creen todo lo que ven en esas aplicaciones, que no saben distinguir todavía fantasía de realidad, que les da igual creer en los Reyes Magos que en el ratoncito Pérez, en superhéroes voladores o en el demonio. Pero eso es lo de menos. Según el caducado Mario el verdadero problema es una aplicación que propone algo así como una filosofía de vida que propugna cuidar y conservar la naturaleza, no sobreexplotarla. Bueno, pues Mario, en su paranoia, ve un peligro grandísimo en esta filosofía de vida: «también pueden influir en nuestros hijos como alternativas a la fe en Jesucristo».

Entonces, según Mario, los hijos y nietos del CNC no saben si el Dios verdadero es la tecnología, el locutor de la TV que habla tanto, el presbi de los sábados por la tarde o quién; y lo que hay que hacer con ellos para aclararles las ideas es soltarles kerigmazo tras kerigmazo a tiempo y a destiempo.

Es decir, lo importante es repetir como loros adiestrados los dichos de Kiko, aunque esos dichos no sean respuesta a lo que pregunten los chavales. No para nada, ya aprenderán a hacer las preguntas correctas. O dejarán de preguntar por aburrimiento.

Para concluir, sin venir a cuento de nada, el caducado Mario se acuerda de la persecución contra los cristianos en Sudán y en Burkina Faso para concluir en un ejercicio de cinismo que también a ellos los persiguen:

«Nosotros estamos sujetos a una persecución que no es tan obvia y sangrienta, sino con guantes de terciopelo. A través de una cultura que busca ridiculizar y matar la fe cristiana».

 

 

3 comentarios:

  1. Siempre he tenido la sensación de que al komboniano le escribe los discursitos el propio Maicito...no en vano tuvo la lucidez de decir que se ordeno sin fe y que la descubrió en kikolandia.
    Mucho de su discurso atufa a ideas totalmente kikianas pero que el Sensible no puede predicar personalmente porque serían ya muy mesiánicas.

    Lázaro

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  2. "Jesús aprendió a obedecer a través de lo que sufrió"

    Lo dice así y se queda tan pancho. Fray Rasputín desvaría y no le importa.

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  3. Creo que a alguien no le gusta que una IA de mejores discursos que el o dibuje mejor que el

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