Tostonazzo de "Cuaresma" (V)

 

                    Prosigamos por el vergel de las parolas alucinantes, y alienantes, o de cómo tirarte a la cara todo, y así, poder llevarte agarradito de la nariz a todas partes:

 

Ramas y ramificaciones a la Karta

"RAMA DE LA SOBERBIA: Una de las  ramificaciones es escandalizarse de no ser tenido en cuenta, te escandaliza que no se te digan las cosas.

    Otra rama de la soberbia:  falta de sumisión al prójimo, confianza en ti mismo; deseo de ser alguien, de ser famoso."

¿Entiendes, Mendes? Ni te vamos a tener en cuenta; "humanamente nos importáis una mierda". Y si te molesta ir descubriendo poco a poco lo que vamos a hacer contigo, es culpa tuya, so soberbio. 

Segundo tomo del libro de los muertos: ¿Nos vas a obedecer? ¿O confías en ti mismo? ¿Eres famoso? ¿No? Ergo: no eres nadie. Y si pretendes ser alguien es solo por TU soberbia.

 

                                                  "RAMA DE LA AVARICIA: del afán del dinero, del amor al dinero: no creer que Dios cuida de ti.

 De hecho, el avaro lo es porque ha despreciado la promesa, ha despreciado la promesa de Dios. Dios ha dicho: "¿Por qué angustiaros por vuestra vida, qué comerás, qué vestirás?". Bien, el avaro no ha escuchado esto, lo ha despreciado, ha tenido desprecio por esta palabra, la considera basura. Ha dicho: "Esta palabra es estúpida". Y Dios necesita enviar ángeles custodios que ayuden al hombre porque ayudan, porque en su libertad el hombre no ve la obra divina, , o necesita decir a los ángeles: "Hazlo en secreto, porque él desprecia mi obra", por esto acumula, trabaja. ¡Dios no está!

               Otra rama de la avaricia es la vanagloria: El avaro es un vanaglorioso, ama mucho el confort, estar bien, desea la gloria mundana, El avaro es implacable, tiene un corazón duro.

              Otra rama de la avaricia: falta de conciencia; la avaricia ha destruido el alma, por eso le falta la compasión. La avaricia le ha endurecido el corazón, tiene dureza dentro y no cree en el juicio divino, no cree que hay un Dios que lo castigará. ¡Cree en el dinero!"

Ya estamos otra vez con lo de siempre, ley del embudo al canto. Peeeero, camuflado en el follaje viaja el polizón llamado Kiko, y sus compinches con él. 

Tú: no te proyectes en el dinero, ni hagas planes con él. Que para ello estamos nosotros. Desprecia el confort, será todo para nosotros (cinco estrellas y jet privado included) 

No persigas la vanagloria, que él rechazará todos los horroris kausa que le propongan, o se proponga comprar, digo, aceptar,  no por gloria mundana, será para vosotros, el camino, o sea, él,  todo lo hace en sacrificio perfecto para vosotros.

El ataque a la libertad, la tuya, claro, viene en entre líneas cuando dice: "Y Dios necesita enviar ángeles custodios que ayuden al hombre porque ayudan, porque en su libertad el hombre no ve la obra divina". Le suele pasar que cuando te va a meter la dentellada se aturulla un poco. Ni qué decir que la traducción la debes entender en cuanto que sus kikotistas son los "ángeles"... y lo que debes tirar al cubo de la basura es tu libertad... No sé si es vomitivo por sí solo, o porque le funciona a veces, pero vomitivo lo es.

Siiiiigamos el tobogán de tus desgracias de la mano del kikocismo:

RAMA DE LA LUJURIA: intemperancia (es el que come y bebe sin freno), excesivo cuidado de la apariencia, del vestir, excesivo cuidado del propio cuerpo. Deseo de divertirse fuera de Dios. La pereza es una rama de la lujuria, y la mirada desvergonzada.

                                          No veas como se describe el tipo, porque una mariscada no se le resiste, y guardando ese look negro hasta de bufanda no tiene rival. Y sí, se lo pasa pipa fuera de Dios, porque machacando almas en esa apisonadora neo inventada aún le da tiempo para jactarse. 

A ti que escuchas, lo que te cae es breve, porque el tipo conoce que en su laberinto hay mucha lujuria. Así que se va por los cerros de Úbeda con lo de la comida... aunque no olvida recitarte lo de la pereza para que recuerdes que cuando el sofá te llama para no ir a las cosas del trípode estarás pecando gravemente... 

¿Será por falta de ramas?

                                  RAMA DE LA CÓLERA: el deseo de que prevalezca tu voluntad. Y del que desea que siempre se cumpla aquello que él dice.  Él lo dice porque está convencido de su justicia, pero sé que aquello que cree justicia o verdad puede ser una rama de al cólera. De la ira. La falsa ciencia, el amor desmedido por el bien de este mundo, la impaciencia, la relajación, el no rezar. todas son ramas de la cólera.

                                      ¿Qué? ¿Cómo se te ha quedao el cuerpo? Está claro que tu voluntad, sí la tuya, es una rama de tu cólera, tu justicia, tu verdad... promovidas por tu ira... ¿Qué es eso de desear el bien para el mundo? ¿Acaso eres una miss mundo? Si te relajas, si te impacientas, da igual, eres todo presa del demonio de la cólera... ¡Repóquer! Perdiste otra vez.

                                RAMA DE LA ENVIDIA: odio contra el prójimo, el no querer verse censurado... El envidioso no se cuestiona, odia al prójimo, es perezoso. Amor al mundo, celos hacia el prójimo, amor al respeto humano: estas son ramas dela envidia.

Hombre! "Amor al respeto humano".... si no te malmete alguna puñalada no se queda tranqui.

Pero lo importante es traducir lo que en realidad quiso deciros: 

Si no te dejas censurar -por los kikotistas, claro- es porque los odias a causa de la envidia que les tienes. Así cobra sentido el sinsentido del "amor al respeto humano", como si ello fuera malvado.... no, no es retorcido, es maquiavélico.

                                    RAMA DE LA VANAGLORIA: pereza, amor por esta vida, El vanaglorioso habla siempre de sí mismo para ser glorificado por los otros: él ha hecho esto, esto otro, no ve por ninguna parte la gloria de Dios, olvida todo aquello que Dios ha hecho por él.

       Un padre de la Iglesia decía: "¡Que cargas tan pesadas son estas para el hombre!" "Son  pesadas, las cargas de Adán. Duro el yugo de Adán". Todas estas ramas de las que hemos estado hablando (usa el plural cuando ha sido él solo) todas estas pasiones son la obra del demonio en el hombre para separarlo de Dios. Pero dice también Isaías que Cristo, nuevo Adán, toma nuestras cargas, nuestros pesos, y portó nuestros pecados. Por lo tanto, estos pesos, caen sobre Adán, Nuestro Señor Jesucristo los ha llevado sobre su cruz. Estas cargas, estas ramas, estas pasiones, son las siete pasiones del hombre viejo, son las siete naciones que se oponen a la entrada del pueblo de Israel. (No veas qué empanada mental...)

   Pero el peso de Cristo, la carga de Cristo es ligera, su yugo es suave ¿Cuál es el yugo de Cristo?

La pureza, la ausencia de cólera, la templanza, la bondad, lo dulce, la alegría del espíritu, la templanza (sabe aquello que le hace mal, aquello que le conduce a la lujuria, a la embriaguez, y se contiene a si mismo, por la templanza, por el yugo de Cristo que es potencia de Cristo en él, no es solamente obra del hombre. Es poder de Cristo en ti) la templanza ante las pasiones, la caridad hacia todos, ("nosotros, el camino, no estamos en las parroquias para la caridad y esas cositas"), el discernimiento (de los kikotistas, no el tuyo, no te vengas arriba), la santidad (ya sabes para quien: "yo necesito que me canonicen"). La fe, la paciencia ante las tribulaciones (traducido: entrena para cuando te hagamos las K-bronadas), el considerarse extranjero en el mundo: quien no se tiene por extranjero, como si no tuviera la casa que tiene hoy, (por eso el sensible tiene varias) no es cristiano. El deseo de salir de este mundo es fruto del yugo de Cristo, deseo de morir para estar con Cristo. 

              Estas son las cargas ligeras, las cargas que que Cristo ordenó a los cristianos llevar. Este es el camino de la salvación.

 Así dice este padre del siglo V, Isaías de Scete.

Hombre! Cita la fuente por fin... lo que olvida es declarar que solamente: 

"¡che pesi tanto duri sono questi per l´uomo! i fardelli di Adamo. Duro é il giogio di Adamo". Se supone que es de Isaías de Scete. 

El resto, es decir, toda la perorata subsiguiente, es cosa suya y solo suya. 

-sepul-