Mamotretos varios

viernes, 12 de julio de 2013

Para tocar a Dios vivo no hay que hacer cursos de actualización, sino entrar en las llagas de Jesús

Ciudad del Vaticano, 3 julio 2013(VIS).- Esa mañana, en la misa en Santa Marta, el Santo Padre comentó el evangelio de la fiesta de Santo Tomás Apóstol, y afirmó que para encontrar al Dios vivo "hay que besar con ternura las llagas de Jesús en nuestros hermanos hambrientos, pobres, enfermos y en los que están en la cárcel".

Después de la resurrección, dijo el Papa Francisco, Jesús se aparece a los apóstoles, pero Tomás no estaba allí: "quería que esperara una semana. El Señor sabe por qué hace las cosas. A cada uno de nosotros le da el tiempo que él piensa que es mejor para nosotros. A Tomás le ha concedido una semana. Jesús se presenta con sus llagas: todo su cuerpo estaba limpio, hermoso, lleno de luz – continuó el Santo Padre -, pero las llagas estaban y están todavía, y cuando el Señor vendrá, al final del mundo, nos enseñará sus llagas. Tomás, para creer, quería meter sus dedos en las llagas: era un testarudo. Pero el Señor quiso precisamente un testarudo para hacernos comprender algo más grande. Tomás vio al Señor, que le invitó a meter el dedo en la herida de los clavos, a poner su mano en el costado y no dijo: es verdad: el Señor ha resucitado. ¡No! Fue más allá. Dijo: ¡Dios! Es el primer discípulo que confiesa la la divinidad de Cristo después de la resurrección. Y que adora".

"Y así – dijo el Papa – se entiende cuál era la intención del Señor al hacerlo esperar: tomar su incredulidad para llevarla no a la afirmación de la Resurrección, sino la afirmación de su divinidad. El camino hacia el encuentro con Jesús-Dios son sus llagas. No hay otro. En la historia de la Iglesia ha habido algunos errores en el camino hacia Dios. Algunos creían que al Dios viviente, al Dios de los cristianos, podemos encontrarlo en el camino de la meditación, e ir más lejos con la meditación. Eso es peligroso, ¿eh?¡Cuántos se pierden en ese camino y no llegan! Llegan sí, tal vez, al conocimiento de Dios, pero no de Jesucristo, Hijo de Dios, la segunda Persona de la Trinidad. A esto no llegan. Es el camino de los gnósticos, ¿no? Son buenos, trabajan, pero no es el camino correcto. Es muy complicado y no te lleva a buen puerto".

"Otros - dijo el Papa - pensaban que para llegar a Dios hay que ser mortificado y austero, y han elegido el camino de la penitencia: sólo la penitencia y el ayuno. Y ni siquiera estos llegaron al Dios vivo, a Jesucristo Dios vivo. Son los pelagianos, que creen que con su esfuerzo pueden llegar. Pero Jesús nos dice que la manera de encontrarle es encontrando sus llagas, y las llagas de Jesús las encuentras con las obras de misericordia, dando al cuerpo y al alma, sobre todo al cuerpo – subrayó el Papa – de tu hermano llagado, porque tiene hambre, porque tiene sed, porque está desnudo, porque está humillado, porque es un esclavo, porque está en la cárcel, porque está en el hospital. Esas son las llagas de Jesús hoy. Y Jesús nos invita a dar un acto de fe, en Él, pero a través de estas llagas. ¡Vale, muy bien! ¡Hagamos una fundación para ayudar a todo el mundo y hacer tantas cosas buenas! Eso es importante, pero si nos quedamos en este nivel seremos sólo filantrópicos."
"Tenemos que tocar las llagas de Jesús, debemos acariciar las llagas de Jesús, tenemos que curar las llagas de Jesús con ternura, tenemos que besar las llagas de Jesús, y esto literalmente. Pensemos, ¿qué pasó con San Francisco, cuando abrazó al leproso? Lo mismo que a Tomás, que su vida cambió. Para tocar al Dios vivo – afirmó el Papa - no hay necesidad de hacer un curso de actualización, sino entrar en las llagas de Jesús, y para ello basta salir a la calle. Pidamos a Santo Tomás a gracia de tener el coraje para entrar en las llagas de Jesús con nuestra ternura y seguramente tendremos la gracia de adorar al Dios vivo".

9 comentarios:

  1. Me gustaría saber cuantas llagas de Jesús tocan en las comunidades si no tienen obras de caridad... Salvo que sea entre ellos.

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  2. ¡Y tu que sabrás, de obras de Caridad!
    ¿Por qué juzgas a tu hermano?

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    1. Con total responsabilidad lo digo: mi catequista , ante iniciativas NO vinculadas al cnc (obviamente) , y relcionadas con algunos programas de asistencia sacramental a enfermos, de alimentación a indigentes; en los cuales tenían participación algunos hermanos de comunidad los ha emplazado durante un escrutinio:o siguen en la comunidad de manera EXÇlCLUSIVA o se van y se dedican a esos programas. Razones? ESO NO SALVA! (oi bien). Lo que salva es una fe adulta.

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    2. La doctrina del cnc es clara. Dicen algo así:

      - Los paganos ven en la iglesia una especie de ONG gigantesca, y en ese punto se pierde la auténtica misión de la iglesia, que es llevar los hombres a la fe, por eso Dios ha suscitado un ejercito, el camino neocatecumenal, que en vez de hacer esas cosas, (la caridad), lleva a los hombres a una fe adulta, que es una misión mayor que todas.-

      Veamos:
      Resumiendo un poco a SS Francisco, se entiende que no son "completas" las participaciones en la espiritualidad cuando se hacen para "buscar" una fe que ayuda al interior del hombre, pero no manifiesta a Cristo como "Dios vivo", ¿y por qué esta espiritualidad no "ve", ni "muestra" a Cristo?.
      Sería muy fácil ir a una parte de evangelio que dice algo como esto:

      -no todo el que diga Señor, Señor. Se salvará. -

      De todos es conocida esta cita, y sin ser, ni querer ser doctor, escribiré a modo de "eco":

      Lo que revela esta palabra, para mi corto entender, es mas profundo que toda la parafernalia de muchos, incluido el cnc, con todos sus pasitos, normitas y bobadas variopintas, frutos normalmente de una necesidad propia de un grupo que ha de tener a sus miembros ocupados en el propio grupo. De tal punto que se retroalimenta la noción de que en el grupo se halla la "salvación", y por ende fuera del grupo la posibilidad más que cierta de la "perdición".

      Sigo en mi pequeña forma de ver las cosas, y me aparece claro un concepto que para exponerlo me referiré a una hipótesis, un ejemplo sin nombre ni apellidos, espero no ofender:
      Pongamos por caso que yo fuese a Misa, participase de los sacramentos en buena medida, llevase una vida en "orden a Dios", y me autojustificase con algún que otro ejercicio espiritual e incluso hiciese simulacros de una caridad irrelevante. Al tiempo que entendiese que los enfermos ya tienen quien los cuide, los presos quien los guarde, y los hambrientos una ong que los alimente......

      Mi vecino, sigo en hipótesis, no quiere saber nada con la iglesia ni sus sacramentos, lleva el desorden propio de su generación, normalmente se la trae al fresco las jmj, los famylis days y toda la parafernalia eclesial, conferencia episcopal incluida. Pero algunas veces se pone un chaleco de la cruz roja, y ha colaborado en sacar o rescatar de madrugada en una playa a personas del otro lado del charco, incluso ha llorado impotente cuando lo que ayudó fue a rescatar cadáveres.
      Cuando su colega "el troles", acabó en el talego, alguna que otra visita la recibió de mi vecino.
      Cuando pasaron los del hipermercado pidiendo ayuda para la penúltima campaña de alimentos, hasta se conmovió y colaboró.

      Un día de estos, los dos, mi vecino y yo, nos morimos...... ¿Qué dice el Señor en el evangelio?

      -sepul- (un testarudo)

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    3. Palabras de SS Franmcisco:

      “¿Dónde está tu hermano?”, la voz de su sangre grita hasta mí, dice Dios. Ésta no es una pregunta dirigida a otros, es una pregunta dirigida a mí, a ti, a cada uno de nosotros. Esos hermanos y hermanas nuestras intentaban salir de situaciones difíciles para encontrar un poco de serenidad y de paz; buscaban un puesto mejor para ellos y para sus familias, pero han encontrado la muerte. ¡Cuántas veces quienes buscan estas cosas no encuentran comprensión, no encuentran acogida, no encuentran solidaridad! ¡Y sus voces llegan hasta Dios! Y una vez más les doy las gracias a ustedes, habitantes de Lampedusa, por su solidaridad. He escuchado, recientemente, a uno de estos hermanos. Antes de llegar aquí han pasado por las manos de los traficantes, aquellos que se aprovechan de la pobreza de los otros, esas personas para las que la pobreza de los otros es una fuente de lucro. ¡Cuánto han sufrido! Y algunos no han conseguido llegar.

      “¿Dónde está tu hermano?”. ¿Quién es el responsable de esta sangre? En la literatura española hay una comedia de Lope de Vega que narra cómo los habitantes de la ciudad de Fuente Ovejuna matan al Gobernador porque es un tirano, y lo hacen de tal manera que no se sepa quién ha realizado la ejecución. Y cuando el juez del rey pregunta: “¿Quién ha matado al Gobernador?”, todos responden: “Fuente Ovejuna, Señor”. ¡Todos y ninguno! También hoy esta pregunta se impone con fuerza: ¿Quién es el responsable de la sangre de estos hermanos y hermanas? ¡Ninguno! Todos respondemos igual: no he sido yo, yo no tengo nada que ver, serán otros, ciertamente yo no. Pero Dios nos pregunta a cada uno de nosotros: “¿Dónde está la sangre de tu hermano cuyo grito llega hasta mí?”. Hoy nadie en el mundo se siente responsable de esto; hemos perdido el sentido de la responsabilidad fraterna; hemos caído en la actitud hipócrita del sacerdote y del servidor del altar, de los que hablaba Jesús en la parábola del Buen Samaritano: vemos al hermano medio muerto al borde del camino, quizás pensamos “pobrecito”, y seguimos nuestro camino, no nos compete; y con eso nos quedamos tranquilos, nos sentimos en paz.



      continua...

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    4. “Adán, ¿dónde estás?”, “¿Dónde está tu hermano?”, son las preguntas que Dios hace al principio de la humanidad y que dirige también a todos los hombres de nuestro tiempo, también a nosotros.
      Pero me gustaría que nos hiciésemos una tercera pregunta: “¿Quién de nosotros ha llorado por este hecho y por hechos como éste?”. ¿Quién ha llorado por la muerte de estos hermanos y hermanas? ¿Quién ha llorado por esas personas que iban en la barca? ¿Por las madres jóvenes que llevaban a sus hijos? ¿Por estos hombres que deseaban algo para mantener a sus propias familias? Somos una sociedad que ha olvidado la experiencia de llorar, de “sufrir con”: ¡la globalización de la indiferencia nos ha quitado la capacidad de llorar! En el Evangelio hemos escuchado el grito, el llanto, el gran lamento: “Es Raquel que llora por sus hijos… porque ya no viven”. Herodes sembró muerte para defender su propio bienestar, su propia pompa de jabón.
      Y esto se sigue repitiendo… Pidamos al Señor que quite lo que haya quedado de Herodes en nuestro corazón; pidamos al Señor la gracia de llorar por nuestra indiferencia, de llorar por la crueldad que hay en el mundo, en nosotros, también en aquellos que en el anonimato toman decisiones socio-económicas que hacen posibles dramas como éste. “¿Quién ha llorado?”. ¿Quién ha llorado hoy en el mundo? Señor, en esta liturgia, que es una liturgia de penitencia, pedimos perdón por la indiferencia hacia tantos hermanos y hermanas, te pedimos, Padre, perdón por quien se ha acomodado y se ha cerrado en su propio bienestar que anestesia el corazón, te pedimos perdón por aquellos que con sus decisiones a nivel mundial han creado situaciones que llevan a estos dramas. ¡Perdón, Señor! Señor, que escuchemos también tus preguntas: “Adán, ¿dónde estás?”. “¿Dónde está la sangre de tu hermano?”.
      ---

      Por eso escribo aquí, para que la sangre de mi hermano no recaiga sobre mi cabeza. Si conozco por experiencia , una situación de engaño, y me callo, soy cómplice.

      Meripe

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    5. Fe de erratas: De momento, "Francisco" no contiene ninguna "m". Lo siento.

      Meripe

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  3. Anonimo 12 de julio 19:28, y ¿por qué tu juzgas diciendole ¿qué sabras tu de obras de caridad?. Siempre utilizando la misma frase ¿por qué juzgas a tu hermano?, con esta frase enmudeceis a la gente cuando no os interesa lo que dice.

    En el camino, que yo conozco muy bien, las obras de caridad estan muy mal vistas porque no hay que hacer nada en el esfuerzo ni por moralismo, sino te sale del corazón mejor no hacerlo.

    San Francisco se esforzo para vencer la repugnancia que le inspiraban los leprosos, y de esta forma pudo abrazar al leproso y encontrar a Cristo en él.

    Es otra de las locuras e incongruencias del camino neocatecumenal, como tantas otras. Por ejemplo decir: "Jesucristo no es un modelo a seguir", cuando es Jesucristo el modelo a seguir, El nos muestra el Camino.

    Saludos a todos, me alegra leeros, a veces no tengo tiempo de escribir, pero siempre procuro leeros.

    Meripe me has ayudado con tu frase "por eso escribo aqui, para que la sangre de mi hermano no recaiga sobre mi cabeza".

    Felices vacaciones.

    Libertad.

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  4. Hace tiempo encontré este blog buscando cosas del camino para informarme sobre él por curiosidad... y supongo que los que habláis aquí no tenéis Fe en Jesucristo. O si la tenéis no veis que seguir criticando fervientemente a otro (sea del cnc o de albacete) es un pecado. Dice el evangelio (no cito textualmente) que con la misma dureza que juzgáis seréis juzgados.Vosotros sabréis....

    No obstante termino diciendo

    ¿Eres cordero o lobo? RESPETAD LA PLURALIDAD

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Antes de comentar, recuerda que tú eres el último y el peor de todos, y que el otro es Cristo.