lunes, 24 de octubre de 2016

Más frutos (malos) del Camino



El testimonio original que se reproduce en esta entrada puede leerse aquí.


Nací “en la comunidad” (en jerga cnc se dice así de los chicos cuyos padres están en el camino antes de su nacimiento).
 
A los 13 años entré en el Camino, tal y como imponía el responsable de la primera comunidad. En un momento de mi adolescencia, tenía entonces 17 años, debido a un pequeño problema (enorme a mis ojos, pero en realidad, visto en retrospectiva, normal para una muchacha), el responsable de mi comunidad decidió llevarme a hablar con el catequista de región. Era un inmenso honor, desde el punto de vista de la vida comunitaria; hablar con el catequista significaba ser una pequeña elegida. Sin embargo, a raíz de ese “encuentro”, comenzó a llamarme con insistencia. Yo no lo entendía, estaba confusa, pero no maliciaba nada; al fin y al cabo se trataba del catequista, casi un dios (casi, porque el verdadero Dios del Camino se llama Kiko). Después de todo pensaba que las insistentes llamadas telefónicas de ese catequista pretendidamente carismático, casado y con un montón de hijos, sólo podían responder al deseo de ayudar y apoyar.
 
Pasado mes y medio, tal vez dos, no recuerdo bien, por enésima vez suena mi teléfono; un poco alterada y estresada respondo a la llamada: era él. Quería que me reuniese con él, esa noche tenía un encuentro en la iglesia con la primera comunidad. Le creí. Fui a aquel malhadado encuentro.
 
¿Puedo hablar en el Camino?
Me hizo subir a su coche. Todavía pensaba, por mi condicionamiento de catecúmena, que se trataba de una especie de honor y que, pese a aquel extraño y repentino encuentro, lo que quería era mostrarme su apoyo.
 
Las primeras señales que mi psique y mi cuerpo me dieron fueron los incontrolables escalofríos y la confusión que me atenazó cuando me cogió las manos. “Tienes las manos heladas”, me dijo. Le miré de reojo. Sólo entonces pensé que algo no cuadraba, que su actitud no era acorde a los esquemas establecidos. La incomodidad me ahogaba y sin embargo seguía manteniendo una pequeña llama de imprudente esperanza. Me cogió la mano. Estábamos en un camino de tierra. Apagó el motor. Miré a mi alrededor… sólo vegetación y nada más. Ni un alma viva… aquí me resulta difícil continuar, el corazón se me desboca…
Me giré y vi sus pantalones bajados hasta los tobillos, debía haberlo hecho en un nano-segundo, no me había dado cuenta de nada, o tal vez fuese porque mi percepción del tiempo se había desvanecido, sí, porque no puedo cuantificar el tiempo pasado en aquel condenado auto parado. Con su fuerte mano, me hizo bajar la cabeza (no quiero recordar los detalles, porque siento un grandísimo malestar), sentía asco y malestar. Trató de besarme, trató de tocarme… me bajó de nuevo la cabeza  y ahí terminó mi pesadilla… eso pensé.
 
No hablamos. Me llevó de vuelta a casa. Me dijo que el Señor se servía de medios incomprensibles a nuestros ojos para conducirnos a la felicidad. Dijo que haría que mis deseos se hiciesen realidad y que cualquier cosa que salía de su boca y cualquier acción suya estaban inspiradas por Dios.
 
De hecho, eso era lo que me habían enseñado en el Camino: los catequistas eran seres superiores… inspirados por Dios y por Kiko.
 
Le conté a mi responsable lo que había sucedido. Me miraba de un modo extraño, girado hacia la ventana hasta que, para mi estupor, floreció en su boca una sonrisilla. «Mira», me dijo, «pienso que XXX ha actuado de este modo con un propósito para tu alma. Un propósito de salvación». 

¿Puedo hablar en el Camino?
Había escuchado miles de veces, en Eucaristías y convivencias, mentar los caminos y las historias de salvación. Pero en aquel momento no me decía nada. Me sentí mal, casi culpable, culpable por mi sentimiento de tristeza y angustia hacia un acontecimiento que según XXX y mi responsable era el proyecto de Dios para mi vida.
 
Intenté olvidarlo.
 
Cumplí los 18 años; pasaron tal vez dos o tres meses desde aquel acontecimiento, pero las llamadas no cesaron, así como no cesaba mi sentimiento de sumisión que me movía a contestar… cada una de las veces.
 
Se organizó una convivencia con varias comunidades; varios autobuses llenos de catecúmenos, casi todos jóvenes. Cada autobús tenía un responsable. Descubrí que nuestro responsable era XXX. Llegamos al hotel. Traté de no pensar en mi vergüenza e incomodidad, mi angustia y mi tristeza. Trataba de ser la chica de siempre, de recuperar la normalidad que me había sido arrebatada aquella noche. Todos los jóvenes nos habían reunido en una sala para charlar cuando sonó mi teléfono.
 
Me sentí enferma al leer su nombre. Fue como un presentimiento funesto. Contesté mientras me dirigía al baño (el catequista supremo nos había prohibido terminantemente estar de charla; Dios acontece en el silencio, no en el caos, fue su argumento).
 
Me dijo que fuera a su habitación, porque era lo correcto y… en aquel contexto, le creí. Saludé a mis amigos y salí de aquella estancia tan segura para mí para adentrarme en los pasillos fríos y vacíos del hotel. Bajé las escaleras esperando que sólo quisiera hablar conmigo, decirme algo concreto y tranquilizador… no fue así.
En retrospectiva, no era nada normal dirigirme de noche a la habitación de un hombre… tal vez hoy sea un hombre, entonces sólo fue una bestia infame. Sin embargo era mi catequista, todas sus obras “eran inspiradas por Dios” (Dios perdone la blasfemia, pero eso decía él).
 
¿Puedo hablar en el Camino?
Le encontré esperándome fuera, actuaba como si estuviese controlando los pasillos, como un catequista adulto y responsable que se ocupa de sus chicos. La máscara que siempre llevaba. Me hizo entrar en su cuarto […] 
Esa persona que decía estar inspirada por Dios me obligó a tener sexo con él, me violó… No recuerdo como me encontré en el suelo, ¿me caí? ¿traté de escapar? No recuerdo en qué momento recibí un golpe que me dejó un gran moratón durante al menos veinte días… Hay muchas cosas que no recuerdo, pero hay muchas otras que no puedo olvidar.
 
Recuerdo que por fin me rebelé, pero él era mucho más fuerte que yo, recuerdo que le dije que Dios no quería eso, que Dios no inspira a una bestia que realizaba actos infames. Por fin abrí los ojos y la mente, pero era demasiado tarde. Me hallaba en una situación de sometimiento físico de la que no pude librarme. 
 
No tuve valor para contárselo a nadie.

Fui a confesarme. Y el presbítero me dio un rosario para que lo recitase. Aún me aguardaba más dolor moral por parte del kikismo.
 
No dejé entonces el Camino, aunque aturdida y triste, participaba…
 
La noticia de que había sucedido algo peliagudo entre XXX y yo se extendió y para defender al CNC y a su amado catequista, Kiko en persona ordenó a XXX y a su familia que abandonasen nuestra región y volviesen a su lugar de origen
Para mi comunidad fue un shock y como había que echarle la culpa a alguien, recayó sobre mí (pese a que el sentido común –tan desconocido en el Camino- les tendría que haber llevado a pensar que algo grave y malo habría hecho XXX para ser repudiado con tanta urgencia, pues no habían pasado ni quince días desde aquel trágico suceso).
 
Una noche hubo una reunión con un presbítero relevante de la región, que en numerosas ocasiones había acompañado a XXX y su familia en las convivencias. Participaba también nuestro presbítero, extremadamente catecúmeno. Por turno, cada uno habló de su experiencia personal y de los problemas de la comunidad.
Llegó mi turno. Expresé mi malestar por el hecho de que nadie había vuelto a dirigirme la palabra, me sentía extraña en el mundo al que pertenecía desde mi nacimiento, pues los “hermanos” que habían sido mis “amigos” o que me habían visto crecer me habían abandonado. Hoy diría que se trataba de auténtico y genuino “bulling”.
 
No. No se puede hablar en el Camino
El presbítero relevante y sabihondo respondió que era culpa mía, que si había ocurrido era porque yo no había sabido gestionar la situación y los acontecimientos y, por tanto, de todo lo sucedido sólo yo tenía la culpa.
 
Me enojé seriamente, estaba por decir lo que verdaderamente había sucedido. El presbítero se dio cuenta y se interrumpió atropelladamente, se supo en pie y bendiciendo me calló categóricamente. Ni una palabra de consuelo, ni un abrazo… sólo indiferencia, después de todo lo que había pasado.
 
Al terminar la nueva responsable me acompañó a hablar con el presbítero de nuestra parroquia. Entré y empecé a hablar con él. La responsable y su marido estaban detrás de la puerta. Era casi media noche. Le dije al presbítero que quería denunciar. Abrió mucho los ojos y me conminó a no hacerlo, porque si la historia salía a la luz, muchos  dejarían no sólo la comunidad, sino también la Iglesia.
Agotada, humillada y sin esperanza me dirigí a la puerta; no veía el momento de que los responsables me llevasen de vuelta a casa. Fuera no había nadie, ni ellos ni el coche, se habían ido. Estaba sola, una vez más el peso del pecado de otro me aniquilaba. 

Me sentí fatal. 
 
Me puse a caminar hacia mi casa, a lo lejos vi, sentados en un bar propiedad de otros catecúmenos parientes de los responsables a mis propios responsables, al anterior responsable al cual al principio yo había contado lo sucedido y a otros.
Hablaban de mí, hablaban del incidente y de todo lo que yo había vivido en primera persona y como me había afectado profundamente.
 
Yo estaba devastada y ellos chismorreaban tan tranquilos… estaba sola en la oscuridad y sé con certeza que se percataron de mi presencia. Sé con certeza que me dejaron sola intencionadamente.
Sé de cierto que en aquel momento Dios estaba conmigo, mientras que con ellos se sentaba Satanás, pero todo esto lo sé ahora, entonces caminaba sola, desolada y profundamente humillada por las calles vacías.
Dejé el camino (minúscula en el original, y no se merece la mayúscula).
Un sacerdote de una lejana ciudad que estaba al tanto de todo participó en un encuentro en Roma en el cual participaban presbíteros y catequista de cierto nivel (según su escala de valores) y allí contó lo sucedido e informó de un detalle significativo:
Kiko dijo a XXX con mucha rabia que por su culpa el camino neocatecumenal (minúsculas en el original) corría el riesgo de ser rechazado. El disgusto de Kiko fue enorme, no en defensa de la víctima ni del inocente, sino en defensa de su secta.
¿Qué se podía esperar de él sino eso? Él ha gestado este maldito mecanismo de ocultación y de satanización de las víctimas.

55 comentarios:

  1. Cuándo no. El culpable y sus cómplices, empeñados en culpabilizar a la víctima. Y el mandamás, en uno de esos éxtasis de humildad que le caracterizan, preocupado sólo en lavar la imagen de su imperio.
    Qué asco.

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    1. A ver. Llevo cuarenta y tres años de camino, soy catequista. Si me cruzo con ese sinverguenza le faltan calles para correr, le doy más palos que pelos tiene en la cabeza, y despues, por supuesto le denuncio a la policia. Así de claro. Ahora, la muchacha es la leche, o sea que sabiendo como es ese tío, porque ya lo ha intentado una vez, acude a encontrarse con él en una habitación de hotel ..... ¿pero esta muchacha es tonta o que? ¿no sabía lo que se iba a encontrar? ¿con 18 años?. La primera vez que él intenta violarla, lo que tuvo que haber hecho es irse directamente a la policia y decirselo a sus padres y punto. Pero hombre que la llame una segunda vez y que vuelva a ir, es la ostia la muchacha. Él un canalla y ya digo que si me pasa a mi le inflo a leches y le denuncio, pero ella .... es la ostia, más tonta no puede ser.

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    2. 43 años de camino y eres un justiciero, que emite juicios de intención contra el que pase por delante y da pruebas de su carencia de respeto hacia la Sagrada Forma.

      Menudo ejemplo de fruto del cnc.

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    3. Y que adultos y bien adultos se bajen los pantalones delante del kikotista de turno en un escrute, ¿eso sí lo entiendes, 10:46, o también es que no pueden ser más tontos?

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    4. Claro, Anónimo24 de octubre de 2016, 10:46, SIEMPRE culpando a la víctima, verdad? Seguro sos de los que dicen que con razón se le violó porque usaba minifalda, o los que dicen que "ella luego se lo buscó" etc, etc, etc.
      Por si no te das cuenta, el camino te lava el cerebro y modifica el pensamiento hasta más no poder! Y más si son jóvenes, es más fácil caer en sus trampas.
      Te lo dice una excatecumena (por suerte ex!) de 23 años que nació en el camino y estuvo en la comunidad desde los 13 hasta los 17.
      No culpes a la víctima, culpa al culpable!!!!!!!!!

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    5. Y se te entiende muy bien, Gäbrielle.
      Ese es el "punto", culpar a la víctima porque así, la presunta culpabilidad se disipa entre las tinieblas sembradas a posta.
      Marka de la kasa, claro.

      Bienvenida.

      -sepul-

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  2. Viendo el subrayado en amarillo de las zonas que le interesan a la que ha publicado el artículo se ve claro la importancia que le da de las cosas que cuenta la presunta victima.

    No entiendo que seáis cómplices de un presunto pederasta. Tampoco que esta supuesta chica que ha sido abusada no denuncie y le envíe su experiencia a una desconocida. Es todo tan surrealista, que es muy dificil de creer.

    De todas formas, por el bien de todos, creo que con esta publicación ha llegado la hora de denunciar. Voy a denunciar a la policía y lo tengo un tanto fácil ya que mi marido lo es este hecho. No se pueden hacer acusaciones tan fáciles contra una persona como Kiko Argüello el cual se da su nombre de tapar asuntos de pederastia.

    Hasta aquí hemos llegado.

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    1. Tu preocupación por las victimas y por la verdad, deslumbra.

      Si quieres, da también el nombre de un tal Pell como experto en tapar casos de pederastica, o de un tal Apurón.

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    2. Y, ya que te pones, denuncia también a quien hace culpables a las mujeres que son asesinadas por sus maridos.
      Te digo el nombre: un tal Francisco Gómez de Argüello. Como mujer, y como esposa de policía, deberías ser la primera en acudir a comisaría a poner una denuncia por apología del feminicidio.

      http://notifica.do/educacion/4275/el-feminicidio-es-culpa-de-las-mujeres-que-no-aman-y-abandonan-a-los-maridos.html

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    3. Voy a hacer lo que vosotros no hacéis que es denunciar un presunto caso de pederastia y de incubrimiento que se ha publicado en este blog, y en el que se dan nombres, al menos del incubridor. Claro, que tiene un precio, y es que por fin haya motivos de que se desvele la identidad de la autora del artículo. De momento ya esta denunciado a blogger. Un saludo.

      lo hago por la victima. Algo que ninguno ha hecho.

      Hago algo que a nadie le ha interesado,

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    4. ¿No has entrado en el enlace original? Está al principio. La entrada es sólo una traducción de la historia original, que está en italiano. Y allí aparece la autora. ¿Qué harás en su contra?

      ¿O tú lo que quieres es ir en contra de Gloria por publicarla? Ah, ya veo por dónde van los tiros...

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    5. El incubrimiento de los incubridores es algo que sólo les pasa a los progimos que se rascan las bestiduras, ¿no?

      Es que no me aclaro.

      Lo que sé muy bien, y no me explico que la esposa de un policía no lo sepa, es que cuando no hay testigos, de poco sirve a la víctima la denuncia, salvo para recibir nuevas humillaciones, puesto que la parte contraria, asesorada por el abogado de turno, sabe que lo que ha de decir es que la relación fue consentida.

      Es la palabra de uno contra la de otra. Y no se puede condenar a nadie sin pruebas.

      Así que a mí no me cuesta nada entender la reticencia a denunciar, y si además la víctima es catecúmena y el verdugo es un kikotistas con galones, apaga y vámonos.

      Aunque no hubiese testigos, aparecerían para decir que el acusado nunvca estuvo en esa convivencia, si hiciese falta.

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    6. Maika, espero que cumplas lo que dices y denuncies, aunque lo dudo si estas en el cn. Ahí nadie denuncia nada, solo murmura, juzga y condena.
      Dudo que esta muchacha tenga pruebas para denunciar, pero yo la animaría, a ella y a otras posibles victimas de hechos así, o que atenten contra su Fe, a hacerlo.

      Cuando tienes ese grado de sometimiento no eres consciente de la gravedad de las cosas hasta que éstas se han consumado. Y esa inocencia y sometimiento te llevan a no tener "astucia" ante personas que te han convencido que son seres superiores y que actúan para tu bien.

      La astucia te viene luego, vaya que te viene...
      Mucho cuidado con las víctimas, no las infravaloréis ni las despreciéis...

      En Cristo
      Aurora

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    7. ¿Que en el cnc nadie denuncia? Yo mismo he tenido que poner alguna denuncia y lo he hecho. Por cierto, los jueces siempre me han dado la razón.

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    8. Ahora cuéntanos que te dijo tu kikotista al saber que te dedicas a poner denuncias.

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  3. Mi solidaridad con cualquier víctima de violencia de género, provenga de donde sea. No se puede permitir que desde una posición de "fuerza" (jefe-secreraria, capataz-obrera, cura/catequista-feligres) se viole física o psiquicame a alguien.
    Mi enhorabuena a la página de facebook donde se cuentan los hechos y a todas las personas que han manifestado su opinión en la misma. Es de agradecer que lo hagan a cara descubierta, con sus nombres y apellidos, sin miedo a nada ni a nadie, espero que el blog de copiar dichos testimonios empiece a actuar de una manera sería y responsable, asumiendo las consecuencias de sus publicaciones.
    Todo mi cariño, respeto y oraciones por esta muchacha, a quien le deseo lo mejor en su vida y relaciones.

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  4. ¿La chica del relato es que no tenía padres a los que contar el suceso? Es un poco extraño que no interviniesen.

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    1. Sí, que extraño es que no animasen a su hija a pedir perdón públicamente en la comunidad.

      No me lo explico.

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    2. Sí los tenía, y tan kikos como el abusador. Así que de poco o nada le servía contarles el suceso.

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    3. Y, aunque esos padres quisiesen intervenir, no les permitirían hacerlo. A un kikotista no se le puede denunciar. A lo sumo, les mandarían pedirle perdón por juzgarlo.

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    4. Pues en mi diócesis se dio un caso, no hace mucho, de un catequista de zona al que se descubrió en adulterio y se le señaló la puerta de salida de la comunidad ipso facto y la comunidad hizo piña con su mujer. Según tengo entendido hasta se marchó del país. Así que no entiendo que los padres no intervinieran. Desde luego a mí me pasa eso y tiembla el misterio.

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    5. Está muy bien que por fin alguien, aunque sea desde el anonimato, se atreva a reconocer que en el cnc hay adulterios y separaciones maritales (y también divorcios). Porque haberlas, las hay, si bien se exige que la agraviada disponga de todo tipo de pruebas y de testigos para que se consienta la separacion.

      Y en el caso que se narra en esta entrada, no hay ni testigos ni pruebas de intimidación y violencia física.

      Pero eso de que el adúltero se marchase del país... será que se marchó a seguir de kikotista en otro sitio donde no le conociesen, porque lo normal cuando la esposa te pone, merecidamente, en la calle, no es que tengas parné para cambiar de país.

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    6. anónimo 7:22,
      No se fue de catequista, se marchó a intentar ganarse la vida en otro sitio, pero ya fuera del CNC.

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    7. Estás diciendo que hasta ese momento se ganaba la vida en el cnc

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    8. No, estoy diciendo que se fue a intentar trabajar en otro país, supongo que donde no lo conzcan. Él vivía de su trabajo aquí y ha intentado hacer lo mismo en otro sitio. Pero que ya no pertenece al CNC, porque fue puesto de patitas en la calle. No tiene nada que ver su trabajo y el CNC. ¿Queda claro?

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  5. Jajajajajaja Gloriosa, esta historia surrealista y amarillista no se lo cree ni tu abuela, jajajaja, no sabeis como levantar este blog que cada dia esta peor!.

    Ahora cuentame una historia de vaqueros jajajajaja

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    1. Que nadie espere respeto por parte de un kikotizado. Ellos no están para la karidad, el respeto, ni esas cositas propias de religiosos de misa de 12.

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  6. Vaya vaya este relato parece sacado de una web porno, que ilusos los admunistradores del blog creer que alguien se trage este cuento,

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    1. Hay al menos dos cosas incompatibles con el kikismo: la misericordia hacia el "progimo" y el conocimiento del propio "hidioma".

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  7. Ya conozco este caso, pobre chica, y pobre sobre todo familia del catequista. La versión oficial del asunto es que esta chica aiba con otra, muchas veces, a cuidar de los hijos de este matrimonio. Se encaprichó de el marido de la familia, intentaba seducirlo. El automáticamente lo hablo con su mujer, con los padres de la chica y evidentemente nunca le llamaron más para ese trabajo de canguro. Ella desesperada, se ha inventado esta historia. Ahora está gracias a Dios con tratamiento médico que le ayuda a eliminar esas alucinaciones y obsesiones. Pobres padres y pobre familia, han sufrido mucho. Santos, que no han denunciado a la chica y han tratado de ayudarla. Hay que informarse antes de copiar y pegar.
    Otro intento fallido de

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    1. No cabía la menor duda de que la versión "oficial" iba a ser la de exonerar al kikotista, pese a la evidencia de que se le quitó de en medio ipso-facto y se le mandó a toda prisa de vuelta a su país de origen.

      Por cierto, el cnc jamás duda en hacer circular bulos calumniosos. La chica no tiene miedo en dar su nombre y podría dar los de otros. Lo que provoca cagalera en algunos.

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    2. Claro, claro, Clarisimo.
      Increíble!!!!.
      Hay otra que se ha metido hasta el centro¿Supongo que la conoces?

      ¿En esta que te vas a inventar?

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    3. En efecto, claro, clarísimo.

      La doctrina kikotera establece de forma obligatoria que ante cualquier hecho concreto que demuestre su podredumbre lo que hay que hacer es gritar que les persiguen, bramar que la postura oficial dice que la víctima es malvada. Que no se aporte prueba alguna en favor de la cínica postura oficial es lo de menos, de lo que se trata es de que la víctima sepa que está sola, que nadie la apoya, que nadie la cree y que en lo que al camino respecta puede suicidarse una y otra vez en lugar de dar murga.

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    4. Menos mal que ha llegado Maika, tan dispuesta a denunciar a quien haga falta... Denuncia tú a la chica ya que aseguras que miente contra tus amados kikotistas, Maika, denuncia, a ver que pasa.

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    5. Ah claro, ahora es mentira, como dicen siempre.

      Y también es mentira lo del kikura que sacó del colegio a una menor kika y se la llevó para pasar con ella un buen rato dentro del coche en una playa desierta de Guam, aunque el caso haya salido incluso en las noticias locales.

      Es que la chiquilla (de 17 años) lo obligó y él, no pocos años mayor que ella (30 años), se sintió en el compromiso de complacerla.
      ¡Ay que ver lo sinvergüenzas que son estas chicas! Y todas kikas, por cierto.

      Curiosamente, el obispo de Guam es kiko, y el caballero kikura, llamado Luis Camacho, salió indemne. Y los padres de la chica, que eran también kikos, of course, no denunciaron.

      http://www.bishop-accountability.org/news2015/03_04/2015_03_23_Carrera_PriestHad.htm


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    6. Y qué decir de dicho obispo kiko de Guam, el "excelentísimo" Apuron. Tiene varias denuncias por pederastia.
      Seguramente esos chiquillos fueron culpables por estar en el sitio menos adecuado y con la compañía incorrecta. ¡A quién se le ocurre!

      O directamente están mintiendo, como diría Maika.

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    7. ¿Porque das más credibilidad a la historia de la entrada que a la que firma "Maika"? ¿Tienes alguna prueba que corrobore alguna de las dos versiones? ¿o simplemente es interés partidista?
      Mientras no existan alguna aportación más, cualquiera de las dos versiones puede ser verdadera. Siento decir que la denuncia por escrita por si misma no vale para nada en un litigio, ni incluso en un expediente de la Iglesia.

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    8. Por varios motivos: Porque la joven no se oculta, porque a los kikotistas les largaron apresuradamente a su tierra,porque jamás en el cnc es el marido quien se ocupa del servicio de niñera, para eso está "la reina de la casa", porque lo que se puede probar en esta historia es desde qué número de móvil se hacían insistentes llamadas a qué otro número... y una y otra vez el número llamate es el de un kikotista (y como digo no lo hacía para acordar un servicio de niñera) y el receptor es el de la joven.

      Nunca al revés, siempre de él a ella.

      Más claro, agua, por más cortinas de humo que desde el desinflado cnc se intenten levantar.

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    9. Una mínima prudencia obliga a usar términos del tipo: "supuesto", "presunto".

      Maika da por sentado, según "su" versión oficial, que la presunta víctima está bajo tratamiento psicológico. Pero éste supuesto no tiene por qué obedecer a las conclusiones que la propia Maika indica. De facto, es más fácil necesitar ayuda profesional cuando se es violada, que cuando se denuncia en falso.

      En mi opinión resulta que creo más la versión de la presunta víctima, que la cosa esa oficiosa vendida como oficial por doña Maika. Pero ésto no es indicativo de nada por sí mismo.

      Dicho lo anterior, vaya mi más sincero afecto y cariño con la que considero víctima.

      En lo que es mi propia experiencia dentro del grupo reformista, tuve ocasión de comprobar que por costumbre se mantenían cautelas, insuficientes, pero cautelas a fin de cuentas, para evitar si fuera posible hechos de los descritos en el testimonio de la entrada.

      También pude experimentar, en persona, y en terceros, que la tendencia fuertemente instalada era simplemente correr un tupido velo sobre cualquier atisbo de lo que el atolladero denomina "escándalo". Fuere de índole sexual, o cualquier otro que pudiera salpicar el propio funcionamiento del sistema: komunidad sobre todas las cosas, y personas, claro.

      La mirada in black (a veces no mirada tan siquiera) hacia quien pudiera representar una amenaza al "buen nombre" del referido sistema, era la primera conclusión. Apartando a los "infectados" de indignación, mediante ese tipo de versiones oficiales. De modo que se pudiera aplicar aquél:
      "Mexan por nós e hai que dicir que chove".

      Está por verse eso de que el cnc tenga una "versión oficial" que rece así:

      -La hemos kagado, nunca debimos hacer esto, o decir lo otro-

      ¿Alguien la oyó? ¿Alguien escuchó alguna vez cosa parecida?

      Y no me hablen de pequeñas concesiones, que suelen preceder a instalar, again, otra neo versión de cualquier asunto, que, curiosamente, suele lavar la cara al muñeco, aunque ésto signifique que la "culpa" recaiga siempre, sobre otros.

      Bien explica Anón, que no forma parte del sistema que aquí tratamos de describir, lo relatado en el testimonio.

      Lo que si compone parte de dicho sistema, es la componenda por definición. Pero depurar responsabilidades es un capitulo eternamente pendiente, si ese depurado afecta en lo más mínimo al referido sistema. Eso es lo grave, según creo.

      Si hay que quemar algún fusible, se quema y ya está. Pero la supervivencia del sistema se trata de garantizar. Que un kikotista caiga, no es el problema, que un katekúmeno sea pisoteado, tampoco.

      Lo que importa al atolladero, es que los papas sucesivos, le pasen la mano por el lomo. Teniendo especial cuidado de no tocar las alas en las ninguna espaldas.

      Santos, lo que yo te diga, prima.

      -sepul-










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  8. El papa Francisco:

    "el Pontífice ha reconocido que “detrás de la rigidez hay algo escondido en la vida de una persona”. La rigidez no es un don de Dios. La mansedumbre, la bondad, la benevolencia, el perdón, sí. “Detrás de la rigidez hay siempre algo escondido, en muchos casos una doble vida; pero hay también algo de enfermedad”. Asimismo, ha precisado que los rígidos sufren cuando son sinceros y se dan cuenta de esto. “Porque no consiguen tener la libertad de los hijos de Dios, no saben cómo se camina en la Ley del Señor y no son bienaventurados”, ha reconocido. De este modo, ha añadido que “parecen buenos porque siguen la Ley, pero detrás hay algo que no les hace buenos: o son malos, hipócritas o están enfermos”.

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    1. Brillante descripción de ciertos "frutos" cincuentones que yo me sé. Ni a propósito les hubiese podido retratar mejor el Papa.

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    2. ¿Lo que les dijo el Papa a los Agustinos Recoletos, hace unos días , fue particular o para toda la Iglesia?

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    3. Francisco García, más valdría que limpiáseis la copa por dentro:

      http://infocatolica.com/blog/cura.php/1610181124-no-aguanto-mas-estos-de-carit

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    4. Anónimo25 de octubre de 2016, 4:33: "Por dignidad, nadie sin hogar". Claro, según un comentarista de "infocatólica" esto no es cristiano. Tendrían que haber puesto un san Pancracio, para que los negocios funcionen bien. En fin, más campañitas para desacreditar la ingente labor de Caritas. Campañitas que, casi siempre, vienen del mismo (o parecidos) sitios.

      Por cierto, leo en "Hispanidad" que el kiko Barriocanal ha hecho perder millones de euros ha la COPE y a 13 TV, emisoras de la Conferencia Episcopal Española, con su labor financiera.

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    5. El "comentarista", como tú dices, es un párroco con muchas horas de vuelo, que conoce el tema y que lo argumenta, algo a lo que tú no estás acostumbrado.

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    6. En cambio, se ve que tú estás muy acostumbrado a buscar el desprestigio del otro... ¿lo aprendiste en la comunidad o te sale de natural?

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  9. La historia es ciertamente dura. Solo tengo una duda: ¿cómo es que a una convivencia va un catequista casado como responsable y no va su mujer?... que yo sepa, eso no es lo normal. Por lo demás, lo siento y al camino, que le den.

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  10. A ver...
    De todo kaminante es sabido que en cuanto los alevines hacen las ktkss y tienen su komu, los padres se desentienden de ellos, y dejan LA RESPONSABILIDAD DE GUIAR SUS VIDAS EN MANOS dE LOS KTKS.
    Eso funciona así, yo lo se porque lo he vivido en ambos lados y lo sigo viviendo con los hijos de los hermanos de komu.
    ¿Porque digo esto? Porque a partir del momento que dejas a tus hijos MENORES en manos de los ktks, estos se encargan de dirigirles, organizarles y manipularles la vida en todos sus aspectos. EN TODOS...
    Y los padres, a pesar de ir muchas veces en contra de sus principios y conciencia, les permiten hacer lo que sea, sin poner en duda nada. Y os recuerdo que estos críos no conocen otra cosa ni otras personas, y que lejos y fuera de la komu y el cn no pueden agarrarse a otra cosa porque todo "es del demoño".

    ¿Que otra cosa puede hacer una chica en esas circunstancias? Si dentro no le van a hacer caso, porque "al ktk se le escucha y obedece" antes que a los padres, y fuera esta el demoño?

    Anónimo24 de octubre de 2016, 13:20
    Que inocente eres...

    En Cristo
    Aurora


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  11. Típicamente un entrada imposible de comentar porque se trata de un caso cometido por un individuo sin tratarse de una normativa impuesta por el grupo coercitivo. Obviamente gustaría disertar sobre la falta total de compasión, sobre el encubrimiento. Al final, como siempre en tales casos, se comentará sobre los comentarios.

    Disparó Maika Tekumena, Pedo de un lado, vueltita, pedo del otro. Finuras más que previsibles, nos vino la usual triple “H”, hipócrita histérica hiperventilada. No le falta aire, sólo inteligencia.

    En cuanto al curtido catequista con más de cuarenta años en el chiringuito, pues en cuanto a ausencia de pruebas formales y de testigos tiene toda la razón. El derecho romano es así, combates de papeles. Sin papeles, a tomar por el saco.

    Evidentemente, no podía fallar, luciendo una imperturbable lógica querida imparable, obvia el peso de una reforma del pensamiento casi desde la eyaculación del padre biológico. Hubiera podido cargar algo más la barca sugiriendo que en el coche del katekista la oca blanca sí obedeció pero, al no tener sus gafas de corrección de cerca, hizo estúpidamente una mamada a la palanca de cambios de marcha, motivo por el que se tuvo que repetir el intento en mejores condiciones.

    Todo lo que enseña el catequista todavía no aburrido por una vida tan convenida es que probablemente no ha tenido ninguna mujer o niña de su familia violada. Una mujer criada y viviendo fuera de cualquier grupo coercitivo recibe un tal golpe que, en la mayoría de los casos, no puede actuar fríamente, exponer el caso, denunciar.

    Tenía de casi vecino a un presidente de juzgado, muy cristiano por eso, que siempre consideraba que la mujer violada tenía por sistema que haber provocado a su(s) agresor(es). Clásico, como el arzobispo de Lima que pone todo a cuenta de la manera de vestirse.

    La vida no siempre es una mala broma, resulta que un día la mujer del juez fue violada en el aparcamiento subterráneo del juzgado. Y el cretino, convencido de que su santa mujer, rana de pila si las había, no podía haber provocado a nadie, entró en una depresión de esas que sólo funcionarios se pueden permitir. El nefasto nunca pudo volver a oficiar. Se supone que lo que le ahogaba no era el remordimiento sino la sensación de haber sido víctima de una injusticia mayor ya que había perdido la dulce satisfacción que procura la exclusiva de un coño.
    …/…

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  12. 2/2

    Menos mal, vino Francisco García a distender la atmósfera con una cita del capellán de la oligarquía globalista. Me puso de excelente humor. Cuando un jesuita habla de perdón, el músculo cigomático se prepara a sufrir calambres por las inminentes carcajadas.

    Hablando de la rigidez, efectivamente, los jesuitas son muy flexibles en cuanto a los medios para conseguir lo que persiguen con una psico-rigidez sin equivalente.

    El Papa se dedica distraer la atención con un diluvio de palabras. Si bien se puede detectar en el flujo lo que anuncia acontecimientos, resulta mucho más producente fijarse en sus silencios.

    Y ya que hablamos de silencios, otra vez nos enfrentamos a la ciudadela del encubrimiento. Entre artistas mayores de la formalización del encubrimiento en el Derecho, San Juan XXIII y Benedicto XVI. Eso para lo cosido del hilo más gordo. La repentina tolerancia cero da la impresión de ser otro chisme para el lavado de cara necesario para dar credibilidad a la nueva campaña de marketing buenista.

    El campeón olímpico del encubrimiento, San Juan Pablo II, canonizó Pío IX, campeón de la negación de la libertad de conciencia tal y como se concebía en su época (1854) adversa para la Iglesia. No hay ninguna contradicción, la libertad de conciencia, para la Iglesia, se traduce en que nadie puede ser obligado a actuar contra lo que le dicta su conciencia.

    La libertad de religión es una libertad por la negativa, ya que la Iglesia católica se define como única poseedora de la Verdad, es decir que se trata de la libertad de buscar a Dios en la forma católica de hecho ya que ni la libertad de conciencia ni la libertad de religión otorgan un derecho al error. Equivocarse no es un derecho. Pero la doctrina quiere que no se pueda usar la fuerza para fomentar la fe en quien no la tenga. En las cruzadas europeas era más bien “conversión o exterminación”.

    Es así que se concibe perfectamente una teocracia, provisto sea católica. Las demás modalidades cristianas y las demás religiones entonces minoritarias, lógicamente no pudiendo gozar de los mismos privilegios que la verdadera religión católica. España, Irlanda e Italia son unos ejemplos.

    En cuanto a la mujer, pues hay que mantenerse firme a lo que dijo San Juan Pablo II, la mujer no es igual al hombre en derecho, los es solamente en dignidad.

    Todo esto para recalcar que la única cosa que pueda provocar una patada al culo al cnc es la compulsiva indisciplina del gurú si estorba para el desarrollo de los planes del Vaticano. Como está pasando en Guam tanto por la supuesta pedocriminalidad del kiko de oropeles como por la supuesta malversación relacionada al seminario RM, si la Iglesia no se mueve, la única salida será la justicia civil.

    La Iglesia necesita absolutamente a los pobres porque el estegano imperio no puede subsistir sin los muy ricos. Queda patente que el dinero no tiene olor para Roma que mantiene una “neutralidad” llena de benevolencia al respecto de la clase rica, feudal o capitalista. Para la pasta, no hubo esa rigidez que denuncia el Papa de la Iglesia pobre y para los pobres. Gómez ha jugado esa carta del dinero de bolsillo, como tantos otros.

    La Iglesia también necesita caos, al igual que la gran cleptocracia, para recuperar el terreno perdido ante los musulmanes y acabar con los enemigos de siempre, los ortodoxos rusos. La desconfianza de las metas respecto al ecumenismo católico no es totalmente fruto del azar.

    Es esa dualidad que permite el uso de medios a veces dudosos para conseguir el fin. De tal manera que las víctimas de los neo-inventos, tanto como las demás víctimas del imperativo de supremacía total, no son más que lo que los cínicos llaman “daños colaterales”. Y entre dos comilonas y un concurso de la capa más larga, los daños colaterales…

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  13. La historia que se lee en este artículo no es ni el primero ni el único caso de acoso y violencia atribuida a miembros del Camino Neocatecumenal, en contra de las jóvenes o hasta niñas. Los miembros del Camino Neocatecumenal que no condenan estos actos, incluso para hipotesis (por ejemplo: "si tal cosa había sucedido, espero que el responsable será expulsado de las comunidades!"), deberían haber verguenza...

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  14. He visto con tristeza , pero no con sorpresa, lo que se relata en esta entrada. Vienen a mi mente algunos recuerdos de cuando pertenecía a alguna de esas comunidades. Recuerdo, especialmente,el discurso constante y permanente de los catequistas y los hermanos de la comunidad (especialmente responsables) que se creían asistidos por UNA FE ADULTA a NO ESCANDALIZARSE (“Es imposible que no vengan escándalos; pero, ¡ay de aquel por quien vienen!” (Lc 17, 1))... De tal manera que, si se presentara algún acontecimiento como el descrito, la mejor evidencia de que no tenías fe, era que te escandalizabas.Así se adiestra: NO TE ESCANDALICES.Muchos actos injustos y "escandalizadores" vi y que , en nombre de la fulana fe adulta, debían ser pasados por el "arco del triunfo" de las víctimas, los victimarios y ...el auditorio.La posición del cnc en esta materia es contrario al espíritu de la Iglesia; como suele ser en muchas materias. Veamos, por ejemplo, lo que expresa el Catecismo de la Iglesia Católica.
    El respeto del alma del prójimo: el escándalo

    2284 El escándalo es la actitud o el comportamiento que induce a otro a hacer el mal. El que escandaliza se convierte en tentador de su prójimo. Atenta contra la virtud y el derecho; puede ocasionar a su hermano la muerte espiritual. El escándalo constituye una falta grave si, por acción u omisión, arrastra deliberadamente a otro a una falta grave.

    2285 El escándalo adquiere una gravedad particular según la autoridad de quienes lo causan o la debilidad de quienes lo padecen. Inspiró a nuestro Señor esta maldición: “Al que escandalice a uno de estos pequeños que creen en mí, más le vale que le cuelguen al cuello una de esas piedras de molino que mueven los asnos y le hundan en lo profundo del mar” (Mt 18, 6; cf 1 Co 8, 10-13). El escándalo es grave cuando es causado por quienes, por naturaleza o por función, están obligados a enseñar y educar a otros. Jesús, en efecto, lo reprocha a los escribas y fariseos: los compara a lobos disfrazados de corderos (cf Mt 7, 15).

    2286 El escándalo puede ser provocado por la ley o por las instituciones, por la moda o por la opinión.

    Así se hacen culpables de escándalo quienes instituyen leyes o estructuras sociales que llevan a la degradación de las costumbres y a la corrupción de la vida religiosa, o a “condiciones sociales que, voluntaria o involuntariamente, hacen ardua y prácticamente imposible una conducta cristiana conforme a los mandamientos del Sumo legislador” (Pío XII, Mensaje radiofónico, 1 junio 1941). Lo mismo ha de decirse de los empresarios que imponen procedimientos que incitan al fraude, de los educadores que “exasperan” a sus alumnos (cf Ef 6, 4; Col 3, 21), o de los que, manipulando la opinión pública, la desvían de los valores morales.

    2287 El que usa los poderes de que dispone en condiciones que arrastren a hacer el mal se hace culpable de escándalo y responsable del mal que directa o indirectamente ha favorecido. “Es imposible que no vengan escándalos; pero, ¡ay de aquel por quien vienen!” (Lc 17, 1).(Fin de la cita). Este "ay" que aquí se cita, no es cualquier "ay". Aquí equivale a una MALDICIÓN. Sí. Muchas comunidades, por acción de algunos de sus integrantes, están bajo esta condición y no gozan propiamente de las bendiciones del cielo.Esto, sencillamente, no es de Dios.

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  15. Hoy en día, no es difícil denunciar y mandar a la cárcel a un individuo pederastra. Si no hubiera testigos sólo haría falta recurrir a los exámenes médicos de rigor para comprobar tal violacion y su agresor.
    Si está persona hoy no está en la cárcel y además la chica no menciona su nombre, ni denuncia a ninguna persona que por ocultar y ser cómplice por omisión no ha sido investigada o procesada por este delito? Ni el papa los salvaría de la cárcel.
    Por eso me parece una historia poco creíble. Hay gente que por menos esta en la cárcel. Además la Iglesia en la actualidad no oculta este tipo de delitos y no creo que el catecumenal tenga tal poder para esconder ante la justicia este hecho. Por consiguiente, si ni ha habido denuncia al respecto, me parece no creíble.
    En Chile por ejemplo se denunció hece años a un cura de estupro y fue condenado. Este participaba del catecumenado y no se escondió por parte de nadie.

    Saludos de un Ex catecumeno.

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    Respuestas
    1. Bien, sigue sacando trapos sucios del cnc, para que quede claro que en todas partes son igual de nocivos.

      En cuanto a la facilidad para mandar a la cárcel a un pederasta, teniendo en cuenta que la jovencita ya tenía edad legal para tener relaciones sexuales, sospecho que es directamente proporcional a la disposición de la Iglesia a cooperar en tales investigaciones, es decir, bastante baja.

      Sostener otra cosa está en línea con la facilidad de cualquier kikillo para menoscavar la fama del "progimo", pero es irreal.

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  16. Hola! A la persona que escribió esta terrible experiencia, solo te puedo decir lo siguiente:
    Te abrazo, te abrazo a vos, abrazo a la joven de 17 y 18 años que fuiste, a esa chica que fue a buscar ayuda en un momento de necesidad, fue a un lugar en donde esperaba que la ayudaran, y terminaron perjudicandole mucho más.
    No te conozco, pero te abrazo virtualmente (si aceptas, obviamente). No sé qué más hacer para ayudarte.

    Firma: Yo.
    (Mujer de 23 años, de Paraguay, nacida en el camino, con padres caminantes, yo misma caminé hasta los 17 años, Atea desde esa edad :), desde el año 2011)...

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Antes de comentar, recuerda que tú eres el último y el peor de todos, y que el otro es Cristo.